(Minghui.org) El señor Wang, un jubilado de 60 años de edad, vive en la ciudad de Chongqing. Fue a su ciudad natal en el distrito de Changshou a honrar la memoria de sus antepasados frente a sus lápidas.

Mientras encendía una vela, esta cayó por accidente sobre la hierba seca y comenzó un incendio que se extendió rápido. Intentó apagarlo con una escoba, pero el fuego pronto lo rodeó.

El señor Wang pudo escapar de las llamas, sin saber qué hacer. El viento empezó a soplar y pronto toda la hierba del cementerio se incendió. El bosque junto al cementerio estaba en peligro de incendiarse, al igual que el pueblo.

Todos los adultos estaban trabajando fuera, así que solo quedaban los ancianos y los más jóvenes en el pueblo. Con la ciudad más cercana a unos 40 kilómetros de distancia, los bomberos tardarían un par de horas en llegar y para entonces, todo sería cenizas.

Sintiéndose impotente, el señor Wang pensó en el Maestro Li Hongzhi, fundador de Falun Dafa: "Por favor, ayuda, Maestro Li. Por favor, ayúdame a apagar el fuego. Por favor, sálvanos", suplicó.

El fuego se debilitó de repente y en pocos minutos, se extinguió por completo. La gracia salvadora del Maestro es de verdad ilimitada.