Liberándome de la envidia

(Minghui.org) Finalmente me di cuenta de que un tipo de negatividad estaba influyendo mi pensamiento, y solo lo consideré un problema hace poco tiempo. Fue entonces que decidí liberarme completamente de todo pensamiento negativo. Una vez que tomé esta decisión, comenzaron a hacerse evidentes muchas nociones incorrectas, formas de pensar negativas e incluso formas de hablar negativas. De repente los vi ajenos a mí y sucedió una separación de mi verdadero y falso yo.

Mi hallazgo más significativo fue la envidia. Pero no lo encontré enseguida. Tuve que pasar por una experiencia desagradable que se convirtió en una dolorosa llamada de atención. En retrospectiva, esa desagradable experiencia debe haber sido cuidadosamente arreglada por nuestro benevolente Maestro. En ese momento, cuando estaba en compañía de otros, comencé a desarrollar pensamientos y sentimientos negativos, especialmente después de sentir que me habían tratado injustamente. Sabía que no debía permitir tener pensamientos negativos, así que hice todo lo posible por reprimirlos, pero no pude evitar sentirme negativo e irritado. No importa cómo intentaba negar el sentimiento, no podía deshacerme de él y tampoco podía ignorar los errores de los demás.

Sin embargo, sé que como cultivador, todo con lo que me encuentro es algo bueno y favorable para que mejore. Cuando regresé a casa le dije a mi esposa que sabía que estaba equivocado al sentirme tan mal con otras personas, pero que no podía ignorar sus faltas. Entonces compartió conmigo su comprensión de los celos y, a través de este intercambio, obtuve más claridad sobre la envidia, como nunca antes.

Me di cuenta que cuando mi corazón esta desequilibrado, desprecio a los demás o tengo pensamientos negativos sobre los demás, todo esto se debe a la envidia. Cuando mi mente es manipulada por la envidia, también manipula mis sentimientos. Me di cuenta de que la envidia es como un malvado general, y su ejército son las siete emociones y los seis deseos de una persona; que la envidia manipula para hacer que un practicante olvide sus pensamientos rectos. Es cierto que todas las partes rectas se vuelven frágiles cuando la envidia no ha sido eliminada.

Entonces vi la imagen de un demonio rojo cerca de mi hombro, alimentando cosas malas en mi mente. Me di cuenta de que esto era la envidia y que, erróneamente, había aceptado que ese demonio era yo mismo. Solía pensar que esos pensamientos negativos eran una especie de pensamiento dialéctico. Por ejemplo, si alguien decía algo bueno sobre otra persona, podía estar de acuerdo, pero en mi mente estaría pensando: "Pero esta persona en realidad es tal y tal...". Era el demonio el que me lo decía.

Por supuesto, hay una diferencia entre analizar de manera objetiva a alguien o algo, incluyendo sopesar sus pros y sus contras, lo que no es un problema, y el tipo de reacción negativa que la envidia refleja en la mente. Un cultivador debe ser capaz de reconocer esta diferencia mirando sinceramente hacia su interior. En cuanto a esos sentimientos negativos, pensé que eran solo mi reacción "natural". Pero lo "natural" no existe; hay una razón para todo. Me di cuenta que la envidia no solo me había estado manipulando durante mucho tiempo, sino que inclusive estaba tratando de reemplazarme.

Al igual que tantas personas que hoy en día permanecen ignorantes de las influencias malignas de las ideas marxistas en la sociedad y en sus propias mentes y que solo las siguen ciegamente, la envidia había permanecido completamente oculta dentro de mí, y la desconocía, hasta ese día de perspicaz intercambio. Comprendí que este proceso de cultivación es como una guerra, pero uno no lucha de la forma en que lo hacen las personas que no se cultivan. Siento que el tercer verso del tercer ejercicio resume mi entendimiento sobre cómo abordar esta guerra interna: "心慈意猛", que se traduce como "El corazón es benevolente y la voluntad es fuerte" en Falun Gong.

Me dije que de ahora en adelante ignoraría, negaría y eliminaría por completo a ese demonio de la envidia y cultivaría estrictamente mi cuerpo, habla y mente de acuerdo con los principios de Dafa de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

La claridad que obtuve sobre a envidia fue muy significativa, y sentí que parte de mi ser experimentaba cierto grado de iluminación. Me sentí espiritualmente elevado, y emergió la felicidad interna. Entendí que era una mejora significativa en mi cultivación. Esa noche soñé que un practicante me clavó una jeringa mágica, que extrajo un montón de suciedad de mi cuerpo, incluso de mis órganos internos. La succión fue intensa, pero sabía que mi cuerpo había sido limpiado. Después de despertarme al día siguiente, todavía tenía la sensación de que algo había sido expulsado por la fuerza. Fue realmente como el Maestro dice:

“Con la elevación de tu xinxing, a tu cuerpo le ocurre un gran cambio; al elevar tu xinxing está garantizado que ocurre una transformación en la materia de tu cuerpo" (Primera Lección, Zhuan Falun).

Desde que mi esposa y yo decidimos ser discípulos de Dafa con pensamientos rectos y acciones rectas y deshacernos completamente de la negatividad, he estado encontrando cada vez más impurezas en mis pensamientos. Por ejemplo, los apegos a la reputación, las ganancias, la protección y a contender. Cada vez que encuentro otro, me siento feliz porque significa que puedo mejorar y volverme más limpio, más puro y más cercano a los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

También llegué a comprender que cada vez que encuentro un problema, al principio es parecido a cómo la ciencia moderna solo puede ver una partícula. Sin embargo, como cultivador, primero identifico el problema, luego me enfoco en elevar mi xinxing para rectificar o eliminar el problema. Pero no termina ahí. Entonces obtengo una mayor claridad de lo que percibo como un plano emergente del problema, en lugar de solo un punto. En este caso, el plano de la envidia. A medida que sigo cultivándome, comienzo a ver cómo el apego se manifiesta en una variedad de pensamientos, sentimientos y conductas, y cómo puede incluso relacionarse con otros apegos como la reputación, los beneficios o el sentimentalismo. Entonces me vuelvo más y más claro, e inevitablemente soy capaz de elevarme aún más gracias al poder del Fa. Este tipo de proceso de cultivación refleja cómo la cultivación es, de hecho, un proceso de recuperación del verdadero yo o de los verdaderos pensamientos. 

El Maestro escribió:

“El xiulian también hace que la calidad de la moral se eleve, y cuando se puede distinguir la bondad y la perversidad verdaderas, lo bueno y lo malo verdaderos, y al mismo tiempo salir del nivel de los humanos, solo entonces se puede ver y contactar el verdadero cosmos y las vidas en los diferentes niveles y diferentes espacios” (Lunyu).

Ahora hago un esfuerzo consciente para enfocarme solo en el lado positivo de las personas e ignorar sus deficiencias. Si no puedo ver los puntos positivos de una persona, entonces me recuerdo que una vez pudo haber sido un ser iluminado extraordinario, quien quizás tenga innumerables seres conscientes que esperan ansiosamente el regreso de su Señor.

El Maestro dijo:

“Los Dafa dizi deben manejar todo positivamente. No miren el lado negativo de otras personas. Siempre deben mirar su lado positivo. En realidad, sabían que antes cuando les enseñaba el Dafa, durante las clases muchos pensamientos humanos fueron enviados por la audiencia allí abajo. Los pensamientos enviados por algunas personas eran realmente malos, pero yo no miré nada de eso. Sólo miro vuestro lado positivo, por lo tanto puedo salvarlos. Si siempre estuviera mirando vuestro lado negativo, ¿cómo podría salvarlos? Mientras más lo mirara, más disgustado estaría, y entonces, ¿cómo podría salvarlos?" (Exponiendo el Fa durante el Festival de la Linterna, 2003).

Reflexionando sobre cómo el Maestro maneja las cosas, entendí que esto es la misericordia, la compasión y la gran tolerancia de los seres iluminados. También entiendo que el proceso de eliminar la envidia es un proceso de cultivar la compasión, y que la envidia es lo opuesto a la compasión.

Con frecuencia me recuerdo, incluso a menudo frente a un espejo antes de salir de casa, que "hoy voy a ser totalmente para los demás, un discípulo de Falun Dafa desinteresado y compasivo que ayuda a Shifu a rectificar el Fa y a salvar seres conscientes".