(Minghui.org) Una mujer en la ciudad de Qitaihe, provincia de Heilongjiang fue brutalmente golpeada por la policía después de ser arrestada por crear conciencia sobre la persecución a su fe en Falun Dafa.

Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una disciplina espiritual basada en los principios de Verdad, Benevolencia, Tolerancia que ha sido perseguida por el régimen comunista desde 1999.

La Sra. Zhang Liping, de 56 años, fue arrestada en el mercado local el 11 de marzo de 2019, después de ser reportada a la policía por repartir información sobre Falun Dafa.

Durante el interrogatorio de la policía, le rogó a los oficiales que dejaran de participar en la persecución, que no tiene ninguna base legal. La policía dijo que era su trabajo perseguir a los practicantes de Falun Dafa.

Cuando la Sra. Zhang se rehusó a revelar su nombre y dirección, un oficial le agarró el pelo y trató de tomarle una foto. No cooperó y fue esposada a una silla. Un oficial comentó que no importaba cómo torturaban a los practicantes de Falun Dafa, siempre y cuando no los torturaran hasta la muerte en la estación de policía.

Le repitió a la policía que no deberían perseguir a los practicantes de Falun Dafa pues no había cometido ningún crimen. Un oficial le apretó las esposas en venganza.

A la tarde, la policía le exigió que pusiera sus huellas dactilares en un escáner. Cuando se negó a hacerlo, golpearon su cabeza contra la máquina antes de abrir sus puños para tomar sus huellas dactilares. Usaron tanta fuerza que le costó respirar y hablar y casi se desmayó.

Incapaz de caminar, fue arrastrada por seis oficiales a un baño y la forzaron a proveer una muestra de orina. Cuando se rehusó a firmar el formulario de consentimiento del examen de orina, fue brutalmente golpeada.

En la mitad de la noche, los oficiales la llevaron a un hospital para un control físico. La abofetearon y la golpearon cuando no cooperaba. La policía la alimentó forzadamente con algún medicamento al encontrar que su presión arterial era tan alta como 220 mmHg.

Luego fue enviada a un centro de detención local. Estaba aún demasiado débil para caminar, un oficial la llevó a la celda e instruyó a los reclusos para que la golpearan.

Las condiciones de la Sra. Zhang continuaron deteriorándose los próximos días y su presión arterial aumentó a los 260 mmHg. Fue liberada bajo fianza el 15 de marzo. Su cara aún tenía moretones e inflamación. También tenía dificultades para sentarse y ponerse de pie, ya que su cadera y sus piernas estaban heridas.