(Minghui.org) Un matrimonio en la ciudad de Qinhuangdao, provincia de Hebei, fue condenado por su fe espiritual. El esposo murió mientras esperaba una audiencia de apelación, y la esposa no pudo asistir a su funeral ni recibir las visitas de sus dos hijos ni su abogado.

El 12 de junio de 2018, el Sr. Wei Qishan y su esposa, la Sra. Yu Shurong, fueron arrestados después de que la policía sospechara que colgaban carteles sobre Falun Dafa, una disciplina espiritual perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

La pareja fue sentenciada a prisión, el Sr. Wei recibió una sentencia de siete años y la Sra. Yu cuatro años. Apelaron al tribunal intermedio de la ciudad de Qinhuangdao, que aún no ha programado una audiencia para sus casos. La Sra. Yu permanece en el centro de detención de la ciudad de Qinhuangdao, donde murió su esposo.

La muerte súbita

Los dos hijos del Sr. Wei recibieron llamadas del centro de detención de la ciudad de Qinhuangdao alrededor de las 9:20 p. m. el 23 de noviembre de 2019 y les dijeron que su padre estaba muriendo en el Hospital Popular de la ciudad de Qinhuangdao.

Como ambos hijos viven lejos de su ciudad natal, llamaron a su tía, la hermana de la Sra. Yu, y le pidieron que fuera al hospital para ver a su padre.

Diez minutos después, la policía volvió a llamar a sus hijos y les informó que el Sr. Wei acababa de fallecer.

La cuñada del Sr. Wei se apresuró al hospital y vio su cuerpo, que todavía estaba en una camilla, pero no en la sala de emergencias. No estaba claro si le habían dado reanimación de emergencia en el hospital.

Ella también notó que sus ojos estaban medio abiertos. Su brazo derecho estaba colgando y su manga derecha estaba completamente mojada. Ella le subió la manga hasta la mitad y vio que su brazo derecho estaba completamente negro y morado.

Cuerpo del Sr. Wei Qishan

Un guardia de apellido Zhao afirmó que el Sr. Wei se cayó esa noche alrededor de las 8 p. m. mientras usaba el baño. Su cabeza golpeó el suelo de concreto, perdió el conocimiento y el personal médico del centro de detención le realizó reanimación artificial. Al no reaccionar, lo enviaron al hospital para reanimación, pero aun así murió.

Alrededor de las 10 p. m., más de 10 policías llevaron el cuerpo del Sr. Wei a una funeraria. Su cuñada intentó detenerlos, pero la dejaron de lado y no se le permitió acompañar el cuerpo a la funeraria.

Esposa no puede recibir visitas

Los dos hijos del Sr. Wei regresaron a Qinhuangdao al día siguiente de la muerte de su padre. Fueron al centro de detención y pidieron que liberaran temporalmente a su madre para que pudiera dirigir el funeral de su padre. Los guardias rechazaron su solicitud y los remitieron a la procuraduría.

Sin embargo, el procurador dijo que ya no estaba a cargo de los casos de sus padres y los dirigió al tribunal intermedio de la ciudad de Qinhuangdao.

Los hijos fueron a la corte intermedia. El juez Zhang Shuangjian a cargo de los casos se negó a reunirse con ellos. Luego le pidieron al abogado de sus padres que visitara a su madre en el centro de detención, ya que no estaban seguros si ella había sido informada de la muerte de su padre.

El centro de detención se negó a concederle al abogado una reunión con la Sra. Yu y dijo que su caso ya había sido cerrado por el tribunal intermedio. El abogado exigió saber cuándo se cerró su caso, pero no obtuvo respuesta y, en cambio, le dijeron que solo podía visitar a la Sra. Yu después de que la trasladaran a prisión.

Pocos días antes de la muerte del Sr. Wei, el juez Zhang había prometido darle al abogado tres meses para preparar documentos para los casos de apelación de sus clientes.

Sospechando que hubo un juego sucio en el centro de detención, los hijos del Sr. Wei fueron nuevamente a la corte intermedia. Esta vez, el juez Zhang respondió a su llamada y estuvo de acuerdo en aceptar los documentos para el caso de apelación de sus padres. Envió a un empleado al vestíbulo para que se llevara los materiales sin encontrarse personalmente con los hijos del Sr. Wei.

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