(Minghui.org) Aunque han pasado cinco o seis años desde que ocurrió este incidente, todavía está muy vívido en mi memoria.

En ese momento, participé en un proyecto temporal de Falun Dafa con dos compañeras practicantes, la Sra. Zhang y la Sra. Chen [ambos alias]. En una ocasión, la Sra. Zhang comenzó a hablar de otro compañero, diciendo: "El Sr. Wang [alias] no sabía nada cuando vino a trabajar con nuestro equipo de proyecto. Le enseñé muchas habilidades diferentes y cómo manejar algunas de las máquinas. Como resultado, se hizo cargo del proyecto hasta el punto de que ya no puedo ni siquiera usar las máquinas sin su permiso". Por el tono de su voz podríamos deducir que la Sra. Zhang se quejaba y estaba indignada.

La Sra. Chen también se quejó de la mala actitud del Sr. Wang hacia la gente. De hecho, yo también tenía una queja sobre el Sr. Wang, pensando que él no se comportaba como un practicante, que era egoísta e injusto. Sin pensarlo dos veces, dije: "Es porque, ahora él es tan capaz y ya no necesita tu ayuda". Dicho esto, me sentí bastante bien, como si hubiera juzgado correctamente al Sr. Wang.

Después de criticar y comentar sobre al Sr. Wang, las tres continuamos con nuestro trabajo. En ese momento, me agaché a recoger algo. Cuando me levanté, de repente sentí un pinchazo en el lado izquierdo del pecho, y luego no podía respirar con normalidad. Cuando inhalé, me dolía tanto el pecho que solo podía respirar muy superficialmente.

Sin contarles a las otras dos practicantes lo que había sucedido, rápidamente fui a otra habitación y me senté para enviar pensamientos rectos. Primero negué la persecución de las viejas fuerzas. No podía respirar profundamente cuando enviaba pensamientos rectos. Después de inhalar un poco, sentí como si me quedara sin aliento. La situación era bastante crítica. Continué enviando pensamientos rectos durante cinco o seis minutos. Al darme cuenta de que no estaba mejorando, de repente recordé que debía mirar hacia adentro (es un indicio del Maestro). Entonces me di cuenta de que los tres habíamos criticado a otra persona a sus espaldas. En lugar de impedirles que hablaran sobre alguien, simplemente incrementé el yeli (karma) uniéndome a ellas.

Tan pronto como me di cuenta de mi error, inmediatamente pude volver a respirar normalmente. Después de confirmar que todo había vuelto a la normalidad, me levanté rápidamente y volví a mi trabajo. Este incidente duró solo diez minutos y las otras dos practicantes ni se dieron cuenta y tampoco lo comenté.

Justo así pasó. Después, me asusté un poco al pensar en la situación de ese momento. Si Shifu no me hubiera dado una pista de que debía mirar internamente, ¡podría haber perdido la vida!

El Maestro dijo:

“El ye o yeli se genera por los errores que uno ha cometido en esta vida o en vidas anteriores. Por ejemplo, el matar, maltratar a otros, contender para obtener beneficios ajenos, maldecir a alguno a sus espaldas, tomar una actitud no amistosa hacia otro, así como otras cosas, pueden todas producir yeli” (Capítulo III de Falun Gong).

Antes de empezar la cultivación, cuando hablaba con mis colegas o amigos, me gustaba escuchar chismes, tales como los que revelan las deficiencias de alguien. Me divertía hablar de otras personas. Me complacía escuchar cuando maldecían a alguien por sus malas acciones. Todos rieron al escuchar los últimos chismes.

Después de comenzar a cultivarme en Falun Dafa, ahora, entiendo que hacer cosas como chismorrear es causado por mis celos. Sin cultivar mi habla, crearé yeli y daré mi virtud a otros. Sin embargo, las sustancias nocivas formadas por este hábito mío todavía no han sido eliminadas y permanecen activas. Muchas veces, no soy consciente de lo que digo y hago, que está dictado por estas nociones humanas. Lo más importante que he comprendido es que no soy estricta conmigo como practicante.

Shifu dijo:

“Sólo cuando todo en la superficie ha sido finalmente transformado, serás completamente separado de los seres humanos. Pero mientras te cultivas, debes tener una conciencia clara, cultiva y desmenuza tus deficiencias, reprime tus debilidades, y elimina tus defectos. Tienes que tener una sensación de subir constantemente. Eso es cultivación” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Atlanta, 2003).

Además, las viejas fuerzas también están tratando de aprovechar nuestras brechas, para destruir a los practicantes de Dafa y a los seres conscientes que están esperando ser salvados.

El Maestro señala:

“Algunos de nuestros estudiantes no pueden pasar el ye de enfermedad. No tienes que pensar que lo causa algo grande. Dices que no tienes grandes errores, estás muy firme en el Fa. Pero tomas esas cosas pequeñas como si no fueran nada. La maldad perversa sabe aprovecharse de las brechas, muchos estudiantes incluso se fueron por pequeñeces, realmente por cosas muy pequeñas. Debido a que el xiulian es muy serio, es wu-lou (sin brechas), y por un largo periodo no te has cultivado, aunque sean pequeñeces, no les has prestado atención por un largo tiempo, entonces esto es un problema, por eso, mucha gente se fue por esto” (Enseñanza del Fa en el Fahui de la Costa Oeste 2015).

En los últimos años ha habido, en efecto, compañeros practicantes que han fallecido, lo que causa pérdidas a Dafa. Espero que cada uno de nosotros camine bien el camino que Shifu ha extendido para nosotros, mejorándonos y trabajando juntos diligentemente.