(Minghui.org) Soy un practicante de Falun Dafa de Calcuta (Kolkata), India. Me gustaría compartir los cambios que he experimentado desde que comencé a practicar Falun Dafa hace tres meses.

Quisiera compartir un pequeñ relato sobre mi vida que les ayudará a comprender la razón de mi búsqueda del verdadero yo.

Nací en una familia de clase media donde las personas tratan de equilibrar espiritualidad y lujo. Durante mis días de escuela era una persona agria. No tenía amigos. En aquel momento alguien me introdujo a la meditación y la sanación. Esto fue algo extraordinario y comencé a sentirme especial. Solía hacer sanación con dedicación y meditar durante horas. Sentí que estaba creciendo.

Después de unos años mi padre pasó a mejor vida, lo que me dejó débil y frustrado. Comencé a concentrarme más en mi viaje espiritual para superar mi depresión. Siempre quería caminos desconocidos y explorar nuevas formas de vivir. Encontré un programa de entrenamiento mental y me uní a él. Otra vez, era todo sobre sanación, positividad y meditación. Por ese entonces me había vuelto algo popular por mi así llamada “habilidad” para sanar. Pero el método no funcionaba de la misma manera cada vez.

Sentí en mi corazón que todavía no había encontrado mi verdadero propósito y no estaba sintiendo la dicha incluso después de ser feliz y positivo. Comencé a seguir enseñanzas budistas y taoístas y sentí que podía entender las cosas más claramente.

Casi habían pasado 31 años de mi vida. Dejé de hacer sanaciones porque sentí que esto no solucionaba el verdadero propósito de la existencia humana. Sentí que podría hacer todo lo que la gente pidiera después de aprender entrenamiento mental pero carecía de un Maestro que me pudiera guiar hacia el propósito verdadero de mi vida.

Un día encontré un artículo en mi página de Facebook sobre Falun Dafa. Instantáneamente fui atraído a él para leerlo y busqué información en Internet. Exploré la página web de Falun Dafa y encontré la información de contacto del practicante local. Él me ayudó pidiéndome que leyera los libros Zhuan Falun y Falun Gong.

Tan pronto como comencé a leerlo me sentí conectado al libro. Leí los dos libros en un corto espacio de tiempo. No solo era capaz de leer sino también de sentir muchas cosas que estaban escritas en los libros.

Cuando comencé con los ejercicios sentí el movimiento circular en mi abdomen bajo y que podía subir escaleras sin perder el aliento. Me sentía muy ligero y podía andar largas distancias sin sentirme cansado. En el trabajo pude manejar situaciones con más calma en lugar de enojarme ya que comprendí que esas situaciones estaban arregladas para nuestra cultivación. También sentía gratitud hacia la gente que me ayudaba a cultivarme creando situaciones para desafiar mi tolerancia.

Me pareció bastante fácil relacionarse con los secretos del Fa que el Maestro había compartido. Estos secretos fueron las respuestas a las preguntas que me había estado haciendo durante mucho tiempo.

Estudiar el Fa me hizo comprender por qué decidí abandonar las sanaciones y también por qué tuve algunos poderes sobrenaturales en diferentes fases de mi vida.

Estudiar el Fa que el Maestro ha compartido con nosotros es verdaderamente el cimiento en el camino hacia nuestro verdadero ser.