(Minghui.org) Soy un caucásico de 55 años de Europa. Mi padre era ingeniero y mi madre farmacéutica. A pesar de formar parte de una típica familia de clase media, mi vida no era tan típica.

Algo magnífico

Desde que tuve conciencia de mi ser a una temprana edad, he sido un auténtico explorador. Mi primer descubrimiento fue la ciencia: cuando era un niño en la escuela, me suscribí a revistas científicas, realicé experimentos y ensamblé aparatos electrónicos. Podía pasar horas solo estudiando y planificando cómo resolver un problema, enfocándome totalmente en mis proyectos. Mi familia creía que me convertiría en científico, igual que mi padre. Pero nunca lo hice. En la ciencia, no encontré lo que buscaba.

Un poco más tarde, en mi infancia, tuve un gran deseo de expresarme por escrito. Escribía cartas muy especiales a mis seres queridos y también escribía poemas. Cuando era un adolescente, sentí que podía cantar mis poemas, así que formé una banda. Me convertí en el líder de una banda de rock como vocalista principal y bajo. A los veinte años, era un joven inteligente, bien parecido e intransigente, con mi propia visión del mundo. Todo eso se reflejó en mi música, y a los que tuvieron la oportunidad de escucharla les encantó. Tenía un gran potencial para convertirme en una estrella de rock. Pero no lo hice.

Mientras servía en el ejército, que era obligatorio en mi país, no pasé mucho tiempo con mis compañeros. Ellos también sentían que yo era diferente. Una vez a la semana, a los soldados se les concedía un permiso por la tarde para salir del cuartel. Cada persona "normal" lo usaba para divertirse bebiendo alcohol y tal vez para estar con chicas. Usé mi permiso para ir a la biblioteca pública. Cada semana, regresaba a mi dormitorio cargado de libros. Mientras no estaba de servicio, leía desenfrenadamente los libros. Después de un tiempo, comencé a escribir mi propio libro. Antes de que terminara el servicio militar, había escrito mi primera novela a la edad de 19 años.

Después de regresar a casa, continué escribiendo literatura e interpretando música. Divertirme era la cosa más aburrida para mí. Mientras mis amigos salían y disfrutaban de la vida, yo trabajaba para cumplir mis sueños. Sabía que tenía que hacer algo muy importante, algo magnífico, algo que sacudiera al mundo. También sabía que enfocarme en un objetivo es crucial para obtener cualquier gran logro. Por eso, renuncié a mi carrera musical, disolví la banda y me concentré en escribir. Posiblemente tenía todo lo que necesitaba para convertirme en un escritor famoso. Pero nunca me hice famoso.

A los 24 años, me enamoré. No tenía mucha experiencia previa en relaciones, pero eso no era necesario para saber al instante que ella era la elegida. Nos casamos y tuvimos dos hijos.

Llegados a este punto, tuve que renunciar a mis sueños. Le di desinteresadamente todo lo que tenía, todos esos largos años escribiendo, componiendo, luchando por el estrellato. Me convertí en un hombre común, trabajando en un trabajo regular, viviendo entre el amor y el odio, el miedo y la euforia - viviendo para un momento, no por la eternidad.

Cuando vives los momentos, pasan por ti rápidamente. Los niños estaban creciendo, y nosotros estábamos envejeciendo. Me convertí en un hombre mundano cuando en mi juventud casi era monje. El mundo tuvo su efecto en mí. ¿Cómo no podría? La injusticia, la desigualdad, la falta de libertad, todo eso me dolió mucho. Como no podía hacer nada al respecto, tenía que vivir con dolor día tras día. Me estaba convirtiendo en un hombre amargado, desequilibrado, enojado, viendo el lado malo de todo el mundo y encontrando errores en todas partes y en todo. Estar así no me hizo sentir bien.

En algún momento, empecé a preguntarme: ¿Cómo renuncié a mis sueños, y dónde los perdí en el camino? ¿Era realmente especial, o solo lo estaba imaginando? ¡Decidí retomar de nuevo mi sueño!

Tenía 40 años cuando terminé mi segunda novela. Fue publicada por un importante editor y finalmente me dio el reconocimiento que anhelaba. Pensé que esta era mi última oportunidad de cambiar la situación, así que seguí escribiendo como si no hubiera un mañana.

A los 43 años, fue publicada mi tercera novela. Comencé escribiendo obras de teatro una tras otra. Estaba muy ocupado, pero cuando miré más allá del teclado de mi computadora, tuve que admitir que el mundo no había mejorado. Las naciones libran guerras por los intereses mezquinos del hombre. Los hermanos se convirtieron en los peores enemigos. Los policías son considerados como los mayores criminales, y los degenerados eran adorados como santos. Odio, mentiras y engaños estaban por todas partes. Durante siglos ha sido así: la gente hiriendo a la gente, y eso es todo. ¿Cómo puedo vivir en este mundo? ¿Cuál es el propósito final? ¿Por el amor de Dios, por qué estoy aquí?

Ahora tengo 55 años y sigo mí camino tranquilamente. El propósito de mi vida ha tomado un significado totalmente diferente. ¿Cómo llegué aquí? Bueno, eso necesita una breve explicación.

¿Qué es la cultivación?

En la antigua China, lo llamaban xiulian, cultivación refinamiento de mente y cuerpo. Entonces, ¿qué es la cultivación de la mente y el cuerpo? La civilización occidental sabe que la cultivación de la mente, es en su mayor parte una cuestión religiosa. Tratas de comportarte de acuerdo a los principios de la religión, buscas el perdón a través del arrepentimiento e intentas no volver a cometer los mismos errores, mientras rezas a Dios para que te acepte en un lugar mejor. Muchas religiones fueron introducidas en Occidente antes o después de Cristo. También había muchas formas de cultivación no religiosas, pero no había una cultivación de mente y cuerpo.

En Oriente también hay todo tipo de prácticas de cultivación, como el Yoga en la India, el qigong en China y las artes marciales. La gente tiende a pensar que las artes marciales son para luchar contra un enemigo o para la autodefensa, pero si eso es cierto, ¿por qué la gente las practica en los monasterios? ¿De quién necesitan defenderse en un monasterio construido en la cima de una montaña? En realidad, es porque es una forma de cultivación, y los cultivadores del pasado dejaban el mundo secular para cultivarse en soledad.

Esto nos lleva a un problema. Transmitidos de boca en boca a través de la historia, la mayoría de los caminos de cultivación perdieron sus genuinas enseñanzas. El Taichí es un ejemplo típico: Se sabe que el maestro Zhang Sanfeng durante la dinastía Ming presentó los movimientos de Taichí, pero no dejó ni una sola palabra de sus enseñanzas. Por lo tanto, ¿es el Taichí que mucha gente práctica hoy en día una verdadera forma de cultivación? Yo no diría eso. La gente moderna lo practica para estar en forma, por eso no puede alcanzar la verdadera meta de cultivar ambos, mente y cuerpo. Ni siquiera saben para qué fin se utilizó.

Al menos así es como supe del xulian en el que he estado durante 13 años, que es la única forma de cultivación que posee movimientos y enseñanzas en su forma original y pura. Es bastante conocido en China, pero no tanto en el extranjero. Entonces, ¿cómo me inicié en este camino especial de cultivación, y cómo me encontré con él?

El mayor descubrimiento

Era un frío día de invierno en una de las capitales turísticas de Europa, y yo me encontraba allí por negocios. Se estaba celebrando una importante convención política y la ciudad se hallaba fuertemente protegida. Los helicópteros volaban en el cielo, mientras que el flujo de turistas avanzaba lentamente a través de las estrechas calles. En todo este bullicio, algo llamó poderosamente mi atención: un hombre de unos treinta y tantos años estaba sentado junto a la atracción turística, un poco alejado del ajetreo, con las piernas cruzadas en posición de loto y los ojos cerrados. La expresión de su rostro era pacífica y serena, parecía que no le importaban los -20 grados centígrados y todo el alboroto en la calle. Estaba ahí como sentado en una cáscara de huevo. No podía apartar la mirada de él.

Su amigo se me acercó y me enteré de que hay un gran número de personas que son perseguidas en China -decenas de millones- por hacer el mismo tipo de meditación. Estas personas practican Falun Gong también conocido como Falun Dafa. Es una práctica de cultivación realmente antigua, que a través de la historia ha sido transmitida de maestro a discípulo, hasta principios de los años noventa, cuando se presentó al público y se extendió rápidamente por toda China. En 1999, el partido comunista chino temió que su popularidad excediera la suya, así que prohibió Falun Gong. Desde entonces, miles de personas han sido asesinadas debido a la persecución que sufren en China, y muchas siguen siendo objeto de la brutal persecución. Por esta razón, los practicantes en el extranjero tratan de crear conciencia demostrando la práctica de manera pacífica.

La información era totalmente nueva para mí. Como ateo declarado, nunca me interesó nada lo espiritual, pero como hombre cosmopolita, me importaban las cuestiones de derechos humanos. Agradecido por la información, acepté con gusto un volante.

Sin embargo, no lo leí hasta que pasaron dos años. La gente dice que hay un tiempo para todo. Mi tiempo llegó con una emergencia en mi familia: mi esposa sospechaba que estaba gravemente enferma. Después de un examen médico, le dijeron que estaba en la etapa terminal de cáncer de pulmón. Su padre ya había muerto de la misma enfermedad, y sabíamos que no había cura en la medicina occidental. Fue entonces cuando recordé la práctica de cultivación, ¿no mencionaron ellos que mucha gente en China se había curado de enfermedades graves? ¿Cómo se llamaba?

Me sentí afortunado cuando encontré el volante de Falun Dafa escondido en mi cajón. Juntos, aprendimos los movimientos y comenzamos a practicar.

Al mismo tiempo, empecé a leer los libros de Falun Dafa. Me quedé asombrado. Para mi sorpresa, no se trataba de ningún tipo de mezcla mística con significados ocultos detrás del texto con el propósito de hacer que el autor parezca más conocedor de lo que realmente es. Era directo y simple, escrito en lenguaje moderno, con referencias a cuestiones científicas. Emocionado, leí todo el libro de la noche a la mañana.

Mi visión del mundo se amplió instantáneamente. Recuerdo claramente mis pensamientos en ese momento: el mundo no es esta pequeña mota de polvo llamada Tierra; el espacio que nos envuelve no es un lugar frío, oscuro y hostil; es el hogar de los grandes seres iluminados. La característica de su naturaleza es Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Cuanto más elevados son, más bondadosos se vuelven.

El inmenso cuerpo cósmico, incluyendo los innumerables planetas, estrellas, galaxias incluso el vacío de su interior, además de todos esos fenómenos mortales de las estrellas, incluyendo los agujeros negros y las enanas blancas, todo está en perfecta armonía. Todo está bien, solo que yo no estoy bien. No estoy en armonía con ellos. Entonces, ¿cómo se puede alcanzar esta armonía universal? ¡A través de este gran camino de cultivación, así es como se hace!

Un mes después de que empezáramos a practicar juntos, mi esposa descubrió que los resultados de sus pruebas estaban equivocados. Estaba sana y dejó de practicar. Sin embargo, me quedé y continué practicando hasta hoy.

No hay necesidad de escapar

Trece años después, ¡soy la persona más afortunada del mundo! A través de la cultivación, gané:

1. Salud sobrenatural,

2. Energía de la que carecía incluso cuando era joven,

3. Paz mental para ayudarme a encontrar soluciones en cualquier crisis,

4. Comprensión de los fenómenos cósmicos que ningún científico puede tener jamás,

5. Las respuestas a las preguntas que los filósofos desde la antigüedad hasta hoy han anhelado.

¿Conoces a alguien que diga tener esto? Probablemente solo si está loco. Pero los practicantes de Falun Dafa son muy racionales y con los pies en la tierra. Solía ser un soñador, pero ya no sueño.

Mi vida es simple. Todas las mañanas practico los ejercicios de hora y media a dos horas, lo que limpia mi mente y cuerpo y me relaja más que una noche de descanso. Esto se debe a que cuando duermes, tus células cerebrales siguen activas, pero cuando meditas, todos tus pensamientos desaparecen.

También dedico un par de horas para estudiar las enseñanzas del Fa, lo que me ayuda a ver las situaciones que encuentro en mi vida diaria desde la perspectiva de cultivar la mente. El resto del tiempo soy como todos los demás: trabajando, y pasando tiempo con mi familia.

Lo que realmente hace mi vida fácil es la ausencia de necesidades. Por ejemplo, a lo largo de mi vida, cuando llegaba el verano, sentía el impulso repentino e incontrolable de escapar de la ciudad y de hacer todo tipo de planes para viajar a la playa o a las montañas: ser libre. Pero la mayoría de los planes no se pudieron realizar debido a la falta de tiempo, dinero u otras cosas. Esto me hizo más estresado, decepcionado y bastante frustrado.

Ahora no necesito escapar de nada, estoy bien dondequiera que esté. Me siento libre pase lo que pase. La verdadera libertad no se puede comprar ni ganar; solo se puede obtener a través de la cultivación. La libertad es estar libre de apegos, y para eso estaban destinadas todas las formas de cultivación genuinas. Ya fueran discípulos de Jesús, Buda o Confucio, ya fueran artistas marciales en Oriente o alquimistas, monjes y caballeros en Occidente, todos tenían el mismo objetivo: liberarse de los deseos, miedos, opiniones, ambiciones, es decir, deshacerse de los apegos. También puedes entenderlo como ser libre de ti mismo. El yo es la mayor carga que una persona puede llevar.

Aprovechando el tiempo

Cuanto más tiempo pasa, más me doy cuenta de lo precioso del momento en que vi al practicante de Falun Dafa meditando en la calle. Nunca volví a ver a este compañero, y no conozco su identidad, pero siento que lo conozco, ya que ahora hago lo mismo siempre que puedo. La razón es que cuando tienes algo tan precioso como Dafa, que puede aliviar tu carga, ¿cómo puedes no compartir las buenas noticias con otros?

Lao Zi, el gran fundador del Taoísmo, dijo: "Cuando un persona superior oye al Tao, lo practica diligentemente. Cuando una persona promedio lo oye, esta persona lo practica de vez en cuando. Cuando una persona inferior lo oye, se ríe a carcajadas. Si esta persona no se riera a carcajadas, este no sería el Tao".

Ahora tengo una mejor comprensión de mi pasado y de mis incursiones en la ciencia, la literatura, la música, etc. Si bien nunca llegué a ser un científico, un músico o un escritor famoso, todos estos fueron pasos importantes en mi camino. Sin ellos, no podría haber llegado donde estoy ahora

Si pudiera volver el tiempo atrás, si tuviera el poder de cambiar las cosas, aun así lo dejaría como está, excepto por una cosa: ese par de años que permaneció el volante de Falun Dafa escondido en mi cajón. Consciente de lo significativo y valioso que es cada momento, lamento el tiempo perdido. Si pudiera volver atrás en el tiempo, me uniría a ese practicante en el acto.

Hoy en día hay un explorador en cada persona. Para este tipo de exploración, no es necesario que abandones la sala de estudio. Pero eso no significa que seas menos aventurero, ya que de vez en cuando es mucho más difícil que explorar el mundo. Al mismo tiempo, quien intente explorar este camino puede llegar a encontrar algo mucho más valioso de lo que esperaba.

Me gustaría añadir que esto es todo mi propio entendimiento y mi iluminación de Falun Dafa en mi nivel actual, incluyendo lo que se mencionó sobre Taichí y otras formas de cultivación.