(Minghui.org) Empecé a practicar Falun Dafa en 1997. Desde que en 1999, el partido comunista chino (PCCh) comenzara a perseguir a Falun Dafa, me han encarcelado tres veces, en campos de trabajos forzados.

La policía local estuvo buscándome en 2012, y publicaron mi foto en Internet. La oficina 610 del condado ordenó la suspensión de mi pensión en febrero de 2008. Para ganarme la vida, acepté trabajar por contrato.

Sin importar dónde me encontrara, nunca olvidaba que era practicante y siempre le hablaba a la gente sobre Dafa.

Empecé a trabajar como cocinera en una obra de la construcción donde conocí a mucha gente. Compartía el dormitorio con otras obreras de la construcción, lo que me dio la oportunidad de hablar a la gente sobre las bondades de Dafa.

También me encargaba de comprar suministros frescos todos los días, lo que me ofreció la oportunidad de contar los hechos de la persecución a los vendedores del supermercado. La mayoría decidió renunciar a su afiliación al PCCh.

En una ocasión, debido a las fuertes lluvias, la obra se detuvo por un día. Así que tres de las trabajadoras jóvenes decidieron ir a cortarse el pelo. La peluquera que las atendió, también era practicante, les habló de Dafa y les ofreció su ayuda para que renunciaran al PCCh y sus organizaciones juveniles. Entonces, le respondieron que su cocinera era también practicante y ya les había ayudado a renunciar al PCCh. Acabamos conociéndonos y me regaló materiales actualizados sobre Falun Dafa.

Como practicantes, debemos eliminar nuestros apegos. Así que me recordé a mí misma de deshacerme de mi mal temperamento y ser amable con los demás. Comprendí que no importaba cómo me trataran los demás, me estaban brindando la oportunidad para mejorar mi carácter moral. Cuando algunas personas perdían los estribos y me atacaban, no le permitía a mi corazón conmoverse. Después de estos momentos, esta gente incluso llegaba a hacerse amiga mía.

En cuanto conocí a mi jefe, le hablé de Falun Dafa con gran detalle. Decidió abandonar el PCCh, lo que estableció los cimientos para que hablara con otros trabajadores de la construcción.

A finales de 2013 me trasladaron a algunas otras obras. Pensé: "¿No sería estupendo que la gente pudiera ver los programas de televisión de la Nueva Dinastía Tang (NTD)? ¿que mis compañeras de trabajo pudieran ver noticias diferentes a las de los medios de comunicación estatales y disipar sus malentendidos sobre el tema de Falun Dafa? Así que compré un televisor y una colega me enseñó cómo acceder a la señal de NTD. A partir de entonces, las trabajadoras venían a ver los programas de NTD cuando acababan su turno.

Algunos, después de renunciar al PCCh, gritaban de camino al trabajo: "¡Falun Dafa es maravilloso! ¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia es maravilloso!”.

Algunos, de vez en cuando, llegaban a decir en voz alta en mitad de la obra: "¡Falun Dafa es maravilloso!".

Consecuentemente, no hemos sufrido ningún accidente en las obras a la vez que se realizaba un trabajo de alta calidad.

Algunos de las nuevas trabajadoras eran de la ciudad natal del Maestro Li (el fundador de Falun Dafa). Después de ver los programas de NTD, dijeron que el Maestro Li era verdaderamente maravilloso. Luego les hablé de Dafa y también renunciaron al PCCh.