(Minghui.org) Las practicantes de Falun Gong son encarceladas en la prisión de mujeres de la provincia de Liaoning, desde que el partido comunista chino (PCCh) comenzara a perseguir esta práctica espiritual en 1999. Los funcionarios del PCCh en un intento por “transformarlas” y hacerlas abandonar su creencia las someten a todo tipo de torturas físicas y psíquicas.

La prisión tiene 13 secciones, y en casi todas hay practicantes de Falun Gong. La sección 12 es, por lejos, la peor. Es lo que llaman la “sección de hacinamiento y castigo" o "sección hospitalaria”. Allí, es donde las practicantes son más salvajemente perseguidas.

Antes del 2000, se llamaba el "grupo demencial". Fue designado como la sección de hacinamiento y castigo en 2010. Su único propósito es "transformar" a las practicantes de Falun Gong. Cualquier practicante que se niegue a abandonar su creencia será torturada por las guardias y las demás reclusas.

Cuando se cerró el tristemente famoso campo de trabajo forzado de Masanjia, todas las practicantes de Falun Gong que se encontraban allí detenidas, fueron transferidas a la recién establecida división de Masanjia, en esta prisión de mujeres de la provincia de Liaoning.

Tácticas utilizadas en la división de corrección

Destruir la integridad de las practicantes

Chen Shuo, el líder de dicha sección, lidera la persecución a practicantes de Falun Gong en la sección de castigo. Se encarga de que la vida diaria de las practicantes sea lo más coercitiva, difícil y espantosa posible. Por ejemplo, les quita todos sus artículos de aseo personal y no les permite usar el baño cuando lo necesitan. Tampoco hay papel higiénico en el baño.

No se les permite lavarse la cara, cepillarse los dientes ni cambiarse la ropa interior.

En las celdas solo hay una cama. Las practicantes tienen que dormir en una tabla de madera sin colchón ni edredón, independientemente de la estación del año.

A las practicantes se les permite comer muy poca cantidad de alimentos. Además están obligadas a permanecer largos períodos de pie y en cuclillas, cada día. Frecuentemente reciben palizas e insultos, descargas con picanas eléctricas, confinadas en régimen de aislamiento y obligadas a ver videos que difaman a Falun Gong.

Si a pesar de todo, se niegan a ser "transformadas" les imponen 10 años más de prisión. Las reclusas que colaboran con los funcionarios tampoco obtendrán la prometida reducción de sus penas. Esto provoca que hagan incluso mayores esfuerzos reprimiendo e intimidando a las practicantes.

A las practicantes, les prometen que se reducirán sus penas de cárcel, y que tendrán que hacer menos trabajos, si aceptan ser "transformadas".

Las guardias hacen todo lo posible, para presionarlas y que abandonen su creencia.

Instigar a las reclusas para que las torturen

Las guardias instigan a las reclusas llamadas Shan Lili, Xu Yingmei, Li Li, Guan Cui, Yang Fan, Wang Rui y a muchas otras, para que torturen a las practicantes de Falun Gong.

La Sra. Guo Hongyan fue torturada tan salvajemente que tuvo que ser trasladada a un hospital. La Sra. Liu Xiaoya fue torturada hasta verse reducida a un montón de piel y huesos. La Sra. Chen Yazhou fue electrocutada con picanas eléctricas. Forzaron a una señora de 60 años a trabajar como una esclava durante el día y a permanecer en cuclillas, debajo de una mesa, durante toda la noche. Luego, la encarcelaron en una pequeña celda en régimen de aislamiento. A otra practicante no le permitieron lavarse la cara, los dientes ni la ropa durante seis meses, y las reclusas la insultaban debido al olor que despendía.

Las guardias toman la delantera en la tortura de las practicantes e instigan a las internas para que las maldigan y golpeen. Como resultado, las reclusas les hacen muchas cosas malas. Las prisioneras que maltratan a las practicantes ven reducidas sus penas de cárcel. Cuanto peor las tratan, más se benefician.

Muchas internas tratan de agradar a las guardias y las ayudan persiguiendo a las practicantes. Algunas se comportan incluso peor que las guardias.

Las guardias y reclusas engañan a las practicantes diciéndoles que si "se transforman" su pena se verá reducida. Pero llegado el momento, se les explica que tienen que escribir "tres declaraciones" censurando la práctica, o tal reducción no será aprobada. Cuando las practicantes firman las declaraciones, la guardia dice: "Usted quiso hacerlo sin que la obligáramos".

Política de implicación y odio

La sección 12 se divide en cinco grupos menores. Si cualquier practicante de un grupo se niega a ser "transformada", todas las componentes son castigadas. No las dejan ver la televisión o las obligan a escribir las reglas de la prisión tres veces. Como resultado, las reclusas maldicen a las practicantes y al Maestro de Falun Gong. Esto produce gran agonía a las practicantes.

A las que se niegan a ser "transformadas" no les permiten comprar comida ni artículos de uso cotidiano en la prisión. Tampoco les permiten recibir las visitas de sus familiares, hacer llamadas telefónicas ni enviar cartas. Se encuentran totalmente aisladas del mundo exterior.

Las guardias usan el lenguaje más ruin, que se pueda imaginar, para maldecirlas, aunque algunas sean ancianas. Muchas se rinden porque no pueden soportar este maltrato verbal y tanto sufrimiento. Una vez que son "transformadas", las guardias y reclusas, inmediatamente, cambian su actitud y les sonríen. La atmósfera también cambia y se vuelve muy relajada.

Si una practicante volviera a tomar conciencia, y a retomar su creencia en Falun Gong con decisión, las guardias y reclusas volverían a abusar verbalmente de ella.

Debido a que a las internas de la división de castigo no se les asigna tanto trabajo como a otras divisiones, hacen todo lo posible por quedarse allí. Sus familias sobornan a cualquiera que pueden, para que eviten tener que someterse al trabajo esclavo requerido en las demás secciones.

Las guardias encargan a las prisioneras adineradas tareas como lavar ropa, alfombras, alfombrillas de coches, cortinas (incluso las de sus propios hogares o las de sus amigos), y muchas otras cosas. Las internas cocinan y hacen las camas de las guardias. Incluso el papel higiénico que usan las guardias se lo suministran esas reclusas. Pero aún así, las guardias no las tratan con respeto, por lo que las reclusas se quejan en privado. Pero para no encontrarse con problemas y que el ambiente no empeore, halagan a las guardias, les sonríen y cooperan con ellas persiguiendo a las practicantes.

Persecución en otras divisiones

En otras secciones de la prisión, las guardias también instigan a las reclusos para que golpeen e insulten a las practicantes que se niegan a ser "transformadas".

También siguen la política de "implicación". Por ejemplo, si encuentran a alguna practicante leyendo, en secreto, los artículos de Falun Gong, las guardias castigan a todas las reclusas de su celda y no les permiten comprar productos de aseo. Esto genera que las internas odien a las practicantes.

Si alguna practicante no termina las arduas tareas asignadas durante el día, será castigada tras regresar a la celda. Quizás la obliguen a permanecer sentada dos o tres horas sobre la caja que contiene sus ropas o no se les permita hablar.

La Sra. Zhang Wei y su hermana la Sra. Zhang Xiaoping de la ciudad de Donggang

La Sra. Zhang Xiaoping estuvo en el octavo grupo pequeño de la tercera sección y la Sra. Zhang Wei en el séptimo grupo pequeño de la primera sección. El oficial Shuai Jing era el líder de la sección a cargo de la persecución a Falun Gong en la 1.ª división y el líder del grupo pequeño era Liu Yu. Las hermanas fueron víctimas de una intensa persecución. La Sra. Zhang Wei comenzó una huelga de hambre durante varios días en señal de protesta, y fue confinada en una celda pequeña que las reclusas usaban como vestuario y para guardar sus almuerzos.

Una vez, la señora Zhang Wei fue llevada al séptimo grupo pequeño, y Liu Yu junto con otra líder de la sección, Guo, le propinaron una brutal paliza. La encerraron en una celda pequeña e instigaron a la reclusa Liu Li y a otras, para que la golpearan por turnos.

La Sra. Zhang Wei permaneció 12 días en estado crítico. Los informantes vieron a la interna Liu Li llegar a la oficina del guardia Liu Yu para tomar una pequeña botella de medicamentos para el corazón. Cerraron la celda donde la Sra. Zhang había sido torturada, y a nadie se le permitía entrar sin permiso.

Antes de golpear a la Sra. Zhang Wei, la guardia y las reclusas fueron a la sala de video cámaras para investigar los ángulos de visión y los puntos muertos que no recogían las cámaras.

La Sra. Zhang Wei no podía ponerse de pie cuando la sacaron de la celda. Pasó más de un mes antes de que pudiera sentirse mejor.

Poco tiempo después de eso, el líder de la sección Guo se marchó, y Shi Jing, de 40 años, asumió el cargo. Continuó persiguiendo a la Sra. Zhang Wei. El jefe de la sección 1, Zhang Xiaobing, y el líder de la división Liu Yili, quien estaba a cargo del trabajo esclavo, también participó en la persecución de la Sra. Zhang Wei. Ella comenzó otra huelga de hambre y tuvo que ser trasladada al hospital penitenciario.

Recreación de la tortura: Paliza.

Sras. Wu Yuping y Zhang Wenqing

Shi Jing instigó a Zhang Meiyan y Lang Min, reclusas del décimo grupo, para que golpearan, maldijeran, y "transformaran" a las Sras. Wu Yuping y Zhang Wenqing, practicantes de Falun Gong.

La Sra. Zhang Wenqing fue golpeada brutalmente por Zhao Jinhong y Xu Yi, internas del grupo n.º 13, por leer artículos de Falun Gong en secreto.

Otras practicantes

La Sra. Liu Pin, detenida en el sexto grupo, quedó muy debilitada debido a las torturas. La encerraron en una celda pequeña durante 15 días.

Liu Yili, jefe de sección a cargo del trabajo esclavo, obligaba a las practicantes a permanecer en determinadas posturas, a no moverse en toda la noche, después de trabajar duro todo el día.

Una mañana, cuando las presas iban de camino al taller, vieron a una guardia arrastrando a una practicante al suelo. Incluso, algunas expresaron que aquella guardia era malvada y no tenía corazón.

Cuando la practicante Liu Yanping fue llevada a prisión en abril, Li Wenbo, guardia en el 4.º grupo de la división 4, instigó a las presas Jiang Fang, Fan Waning y Wang Yujie para que la golpearan y no la dejaran dormir, comer ni usar el baño. Sus muslos estaban amoratados debido a los pellizcos que se el infrigieron. Jiang Fang instigó a todas las reclusas que formaba el pequeño grupo para que golpearan a la Sra. Liu Yanping y a la Sra. Hu Zhehui, practicante de Panjin. Las dos fueron puestas bajo "estricta vigilancia".

Zhao Xiaohong, un guardia del tercer grupo instigó a las reclusas a "transformar" a Wang Li, una practicante de 68 años, de la ciudad de Benxi.

La reclusa Cai Liyan ya ha torturado a las practicantes en el pasado. Maniató a la Sra. Song Guixiang de la ciudad de Dandong y le introdujo un edredón en la boca para que no pudiera gritar "Falun Dafa es bueno". La líder de la división 4, Zhang Yantong, decidió ignorar lo que sucedía.

Persecución en secreto

La prisión se presenta como un organismo "civilizado". Pero en secreto, en habitaciones pequeñas y aisladas, la persecución a los practicantes de Falun Gong nunca ha cesado. Las guardias establecen muchas restricciones para las practicantes. No les permiten hablar entre ellas. Las guardias temen que su despreciable comportamiento sea expuesto, por lo tanto, no permiten a las practicantes que tomen contacto con el exterior y las vigilan de cerca, incluso cuando están usando el baño. Nunca permiten que establezcan contacto con los funcionarios que visitan las instalaciones.

Trabajo esclavo

Para obtener ganancias, las reclusas se ven obligadas a trabajar como esclavas, sin importar la edad. Si no pueden terminar el trabajo a tiempo, son castigadas. Siempre que se le asigna una nueva tarea de la prisión, la mayoría ni siquiera sabe cómo hacer el trabajo. Las guardias, en cambio, las obligan a terminar el trabajo lo antes posible. La jefa de sección y las guardias encargadas de la producción a menudo las insultan y las golpean a voluntad.

Para que el trabajo se haga a tiempo, solo pueden comer e ir al baño una vez al día. No se atreven a beber nada. Una recluso exclamó, en tono de queja: “¡No nos piden que hagamos el trabajo, nos están pidiendo nuestras vidas!”.

La situación empeora cuando alguien se enferma. Habitualmente, no hay una atención médica adecuada. Los medicamentos suelen llegar, casi siempre, demasiado tarde.

Es aún peor para las practicantes de Falun Gong. Son sometidas a sesiones de lavado de cerebro y, aparte del trabajo esclavo, son torturadas sin cesar. No se les permite hablar. Si lo hacen, las internas, que las vigilan de cerca, empiezan a gritar. No se les permite usar el baño cuando lo necesitan. Cada vez que van, alguien las sigue.

Lo arriba mencionado es solo una gota en el océano. Durante los 19 años que el PCCh lleva persiguiendo a Falun Gong, un número incontable de practicantes ha sufrido torturas. Algunos fueron perseguidos hasta la muerte. A otros les sustrajeron los órganos aun estando con vida. Gran cantidad de familias han sido destruidas. Al mismo tiempo, muchos agentes de las fuerzas del orden se han visto involucrados y han cometido enormes crímenes.

Es una verdad eterna que el bien es recompensado con el bien y el mal con el mal. Los responsables serán llevados ante la justicia y tendrán que pagar sus deudas.

Alentamos a las autoridades para que dejen de apoyar al PCCh. ¡Detengan la persecución a Falun Gong! Esa es la única salida posible para usted y su familia.

Personas responsables de la persecución descritas en este artículo

Prisión de mujeres de la provincia Liaoning

Yuxin Rd, aldea Baixintai, pueblo de Pingluo, distrito Yuhong, ciudad Shenyang, provincia Liaoning, CP 110145 Fax: +86-24-31236026.

Oficina de servicio: +86-24-31236026.

Oficina de guardia: +86-24-31236329, +86-24-88093217, +86-24-88092361.

Jia Fujun, presidente de la prisión: +86-24-31236001, +86-15698808121.

Xu Min, comisario político, encargado de perseguir a Falun Gong; oficina: +86-24-31236002 Celular: +86-15698806633.

Yao Bin, vicepresidente de la prisión; oficina: +86-24-31236007 Celular: +86-1569880805885.

División de castigo de la 12.ª división; Guo Xiaorui, jefe de sección; Chen Shuo, subdirector de sección y principal funcionario encargado de perseguir a Falun Gong; Li Han, policía, jefe de grupo pequeño# 2105503.

División 5, del 6.º grupo pequeño: Leng Lixin, Duan Hong, Liu Jinling, Pan Yunfei.

División 5, del 2.º grupo pequeño: Meng Meng, Wang Su.

Oficina de gestión penitenciaria: oficina: +86-24-86601800.

Centro de detención de la ciudad de Shenyang:

Aldea de Gaoli, pueblo de Zaohua, distrito de Yuhong, ciudad de Shenyang, CP: 110148 Tel: +86-24-89241894, ext. 8084, +86-24-89248084.

Zhang Botao, superintendente: +86-13940119229; Zheng Gang, superintendente: +86-24-89340098.

Oficina 610: +86-24-31236020.