(Minghui.org) Arrestaron a la Dra. Kong Jie en la estación oeste de trenes de Beijing el 31 de agosto de 2017, por ser practicante de Falun Dafa. En ese momento se dirigía, junto a su marido, a cuidar de su anciana madre que reside en la provincia de Gansu.

Su documento de identidad la delató como practicante de Falun Dafa. La detuvieron y la cachearon. Los policías confiscaron un libro Zhuan Falun, una computadora portátil, un disco duro portátil y algunos billetes de curso legal con información sobre Falun Gong escrita en ellos. Acto seguido, la policía fue a su casa, la saqueó y confiscó un disco duro, DVD’s y su celular.

La trasladaron a la comisaría de Fengtai al día siguiente. La orden de su arresto se emitió el 1 de octubre. Su caso fue presentado ante la procuraduría el 9 de noviembre y enviado al tribunal del distrito de Fengtai. Actualmente permanece retenida en el centro de detención de Fengtai.

Tiene 62 años y es doctora en investigación, su anterior trabajo lo ejercía en el departamento de biología de la universidad regular de Xibei. Como practicaba Falun Dafa la asignaron a la central de datos, donde no podía desarrollar ninguna de sus habilidades profesionales. En 2013, la universidad regular de Xibei despidió a la Dra. Kong sin ningún motivo justificado. Desde entonces no tiene trabajo, aunque posteriormente, ella y su marido se mudaron a Beijing, donde encontró otro trabajo en su área. Pero su antiguo jefe se negó a ayudarla con los trámites administrativos, así que nunca pudo empezar a desempeñarlo.

La Dra. Kong ya había sido arrestada y condenada anteriormente en varias ocasiones. La primera vez en 2005, la condenaron a tres años de cárcel por practicar Falun Dafa. La segunda vez, en 2010, la encerraron en un campo de trabajos forzados durante dos años y medio. La arrestaron nuevamente en 2016, y la policía le rompió el brazo al hacerlo. Luego le concedieron la libertad bajo fianza.

Durante su encarcelamiento y detención en el campo de trabajos forzados, la vejaron verbalmente, le propinaron palizas, la torturaron y la sometieron a sesiones de lavado de cerebro.