(Minghui.org) El 16 de diciembre de 2017, tuvo lugar una Conferencia de Intercambio de Experiencias en Serbia. Se celebró en Belgrado, la capital del país. Ha sido la primera vez que se organiza una conferencia de Dafa en lo que era la antigua Yugoslavia, que después de los conflictos de la década de los noventa se dividió en siete naciones. Muchos países como Croacia, Eslovenia, Bosnia-Herzegovina, Montenegro, Grecia y Austria, tuvieron representación en dicha conferencia.

Trece practicantes intercambiaron sus experiencias de cultivación en Falun Dafa. Explicaron cómo mejoraron su personalidad viviendo en concordancia con los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. También compartieron cómo asistían al Maestro Li (el fundador de Falun Dafa), difundiendo la práctica para que más gente llegue a conocerla, y generando conciencia sobre la persecución que padece esta disciplina espiritual en China.

Gordana Gosic, una nueva practicante, compartió cómo había detectado sus apegos a la indecisión, la lujuria, la comodidad, el miedo y la fama.

Gordana Gosic lee su experiencia durante la Conferencia de Intercambio de Experiencias en Serbia.

Tras tener un accidente de circulación que estuvo a punto de convertirse en fatídico, Gordana actuó como una practicante de Dafa, y consiguió serenar a la otra parte implicada. Recordó cómo el otro conductor: “…se detuvo, abrió la puerta de su automóvil furioso y empezó a maldecirla a voz en grito. Gritaba asustado dando explicaciones sobre lo que había estado a punto de suceder. Yo también comencé a temblar de miedo pero no le grité, ni le devolví los insultos, como hubiera hecho antes de convertirme en practicante de Dafa. Me di cuenta de que mi miedo se atenuaba poco a poco, y se iba transformando en compasión. Sentí pesar al ver a aquel señor tan enfadado. Así que le dije sencillamente: “Ha sido culpa mia, lo siento”. Después, se alejó abatido.

Marija Vojvodić, de Montenegro, estudiante de alemán y nueva practicante, compartió cómo afrontaba los obstáculos que encontraba mientras conseguía que su entorno se volviera estable.

Marijana Holjevac, dermatóloga de Serbia y practicante veterana, intercambió que retomó el impulso en su cultivación tras haber perdido su entusiasmo inicial.

Ioanna Tagari, de Grecia, coordinó la visita de David Matas (abogado de derechos humanos que expone la sustracción forzada de órganos de practicantes de Falun Dafa en China) al Parlamento, cuando fue a ofrecer un discurso. Enfocó su experiencia en lo aprendido durante la coordinación y cooperación durante dicho evento.

Ioanna recordaba: “Sentí que poseía poca tolerancia a los retrasos o a las ideas de los demás practicantes. Como había trabajado antes en el Parlamento, pensaba que sabía mejor que cualquier otro lo que necesitábamos hacer. Me creía muy competente. Pero no tiene ninguna importancia si somos hábiles o no. Comprendí que mis pensamientos negativos eran una señal clara de que poseía una mentalidad de envidia”.

Theresa Koerpf de Austria compartió los entendimientos que obtuvo cuando fue encarcelada junto a su hijo. Escribió una carta a su madre desde la prisión:

“Las cosas solo pueden mejorar si todos encaramos el futuro con confianza, tal como lo hizo usted. Estoy orgullosa de tener una madre como usted, que me enseñó que todo saldrá bien con solo mantener una fe firme en Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Obviamente, ahora puedo ver que Falun Dafa era lo que la fortalecía, y le brindaba todo lo que necesitaba. Desgraciadamente, no lo comprendí hasta que me encarcelaron”.

Theresa explicó: “Sus palabras me hicieron tomar conciencia de que todos mis apegos y deseos eran precisamente como una cárcel, que me detenían y no me dejaban avanzar diligentemente en la cultivación de Dafa”.

Mira Dozet, de Serbia, compartió cómo cambió a mejor su temperamento tras cultivarse en Falun Dafa. Por ejemplo, en una ocasión se encontró con una vendedora despiadada y sin escrúpulos, en una librería, pero ni siquiera se quejó. Al día siguiente, volvió a visitar la librería y le ofreció un folleto de Falun Dafa a la vendedora. Además le habló sobre la persecución que sufre Falun Dafa en China. Después, la vendedora le agradeció que hubiera sido tan paciente el día anterior.

Mira Dozet, practicante de Serbia.

Mira respondió: “Si nos hubiéramos encontrado antes de que empezara a practicar y a aprender Dafa, no habría tenido la paciencia suficiente y no habría acabado encontrando el libro que buscaba, en sus estanterías. Ahora con Dafa tengo solo pensamientos bondadosos”.

Olivera Milosevic, de Serbia, intercambió que había practicado muchas vías de cultivación antes, pero que una vez que encontró Falun Dafa, supo que no podía compararse con ninguna otra de las vías de cultivación que había conocido. Además contó cómo llegó a comprender la importancia de practicar solamente Dafa, sin mezclarlo con ninguna otra práctica o hábito del pasado.

Olivera Milosevic compartió sus entendimientos.

Igor Jancev, desarrollador de aplicaciones informáticas de Viena, explicó cómo da a conocer el Fa y cómo aclara la verdad, en Macedonia. Otro país que formó parte, en su día, de Yugoslavia.

El desarrollador de aplicaciones informáticas, Igor Jancev, intercambió sus experiencias.

“Viajamos hasta Ohrid, la vieja villa, que algunos llaman ‘La Jerusalén de los Balcanes’. Rodeada de unas 365 iglesias y construida a orillas de algunos de los lagos más antiguos del mundo. Una vez allí, pensaba en cómo aprovechar al máximo la oportunidad que se me brindaba [de dar a conocer Falun Dafa]. Era jueves y decidí organizar prácticas en grupo en el parque y publicarlo en Facebook. Realizaríamos los ejercicios de viernes a domingo, de 09:00 a 11:00 a. m. La mañana del viernes, cuatro mujeres de Ohrid vinieron al parque. Al sabado siguiente, a pesar del frío, siete personas vinieron a hacer los ejercicios. La respuesta fue muy positiva”.

Al concluir la conferencia, los practicantes coincidieron en que se sentían profundamente agradecidos por la salvación y la compasión del Maestro Li. También apreciaron poder aprovechar la oportunidad de asistir a este encuentro, donde podían inspirarse y alentarse mutuamente, y aprender los unos de los otros. Muchos practicantes dijeron sentirse inspirados, que redoblarían sus esfuerzos, trabajarían sus corazones y salvarían a más gente.

Los practicantes también dedicaron, al unísono, un cordial: “¡Feliz Año Nuevo!” al Maestro.