(Minghui.org)

Saludos Shifu, saludos compañeros practicantes.

Me llamo Sonja y soy practicante de Falun Dafa. Este año cumplo 13 años. Nací en una familia de practicantes, así que naturalmente me convertí en una pequeña practicante cuando nací.

La importancia de estudiar el Fa y hacer los ejercicios

Una noche, cuando tenía unos nueve años, descubrí un bultito óseo en uno de mis dedos. Me sorprendí y de inmediato fui a preguntar a mi mamá. Mi madre lo miró, y me dijo que cuando era un bebé, también tuve un bultito como ése, pero en mi mano. En aquel entonces se había preocupado ya que tan sólo tenía un mes de edad. Me llevó al hospital, pero el médico tampoco sabía que era y por eso quería examinarlo.

Mi madre optó por dejar el apego al bultito y creer en Shifu y Dafa. Dejó de preocuparse y me ponía los audios de Shifu. Después de un tiempo, desapareció. Así que mi madre me dijo que no me preocupara y agregó que la vez pasada había sido una prueba para ella, esta vez era una prueba para mí. Si quería romper esta tribulación, entonces tenía que tomar la iniciativa de estudiar diligentemente el Fa y refinar gong.

Lo sabía de corazón, pero no podía hacerlo bien. El bulto no picaba ni dolía, después de un tiempo lo olvidé. Me volví perezosa, no estudiaba más el Fa ni refinaba gong con diligencia.

Un día, el bulto comenzó a doler. Lo miré y, para mi sorpresa, vi que había crecido. Ahora, estaba muy ansiosa y pensé que debía estudiar diligentemente el Fa y refinar de nuevo. En ese entonces, hacer el quinto ejercicio en la posición de loto era muy doloroso. Prácticamente lloraba durante toda la hora, pero seguí todos los días. De repente un día mi madre me preguntó por el bultito, lo miré y había desaparecido.

Los peligros de los video juegos

Casi todos los niños de mi edad han tenido contacto con dispositivos electrónicos como teléfonos inteligentes, televisión, computadoras, etc. Como todos los niños, mi hermano y yo también jugábamos en secreto cuando estábamos en casa, y los maestros nos dejaban jugar en la computadora en la escuela. Cuando terminaba la tarea, jugaba. Cuando mis amigos venían a la casa o iba a la casa de un amigo, jugábamos en línea. Si nuestra familia tenía invitados, jugaba horas y horas, porque mis padres estaban ocupados. Me perdía en el juego.

Una vez, un amigo y yo estábamos jugando Super Mario en la televisión, y estábamos tan emocionados que saltábamos como locos en el sofá y casi nos golpeamos. Cuando mi mamá se dio cuenta de que no podía parar de jugar, comenzó a ponerme límites. Nos dio muchas razones, y no nos dejó jugar más.

Si jugábamos de nuevo nos castigaría. Tuvimos que escribir 100 veces que “cumpliríamos con nuestra palabra y no jugaríamos”.

Desgraciadamente, era adicta a los videojuegos y no pude cumplir mi promesa. Con tal de jugar, aprendí a mentirle a mis padres. No cultivé “Zhen”. Los demonios detrás de los juegos me controlaban, y me hicieron hacer muchas cosas malas. Por jugar estos juegos electrónicos, mi vista se deterioró, dije mentiras, y perdí mucho tiempo.

Un día, un practicante con el tianmu abierto nos dijo que veía extraterrestres detrás de las espaldas de las personas que jugaban los videojuegos. Finalmente, comprendí el peligro de jugar video juegos y decidí dejarlos. A veces, mi estado de xiulian era bueno y a veces malo, no podía simplemente dejar este apego. Fue muy difícil. Si bajaba la guardia un segundo jugaría otra vez.

Shifu dijo en el Fahui de Nueva York 2016:

“Acabo de decir, cualquier cosa en este mundo te está atrayendo, no te deja obtener el Fa. No solo ustedes, todos los padres y gobiernos de este mundo saben de esta situación, ¡nadie puede hacer nada! No solo es la cuestión de que los humanos obtengan el Fa, ha impulsado a la gente para que tampoco haga más el trabajo bien, tampoco puede estudiar bien, usa gran cantidad del tiempo en la computadora, juegos electrónicos, tentándote a que veas y juegues con estas cosas. Ya no es el estado humano. Desde la antigüedad hasta hoy, los humanos no tuvieron este estado. Esto es la técnica de extraterrestres, y los demonios están usando esto, seduciéndote, haciendo que abandones todo lo que tienes, y te tiran adentro. Malgastas tu vida, ¡sin embargo ni quieres dejarlo! Desde el ángulo del comportamiento humano, ya estás mal, y aun más desde el ángulo del xiulian”.

Mi madre y yo estudiamos en particular esta parte del Fa muchas veces, y lo memoricé. Después de eso, mi estado de xiulian mejoró mucho. El proceso de eliminar mi apego a los videojuegos me permitió entender que los juegos electrónicos son la tecnología de los extraterrestres. Los demonios hacen a la gente adicta a estos juegos, después los controlan, para que actúen cada vez menos como seres humanos.

Algunos niños se vuelven adicto a los videojuegos, y los padres los regañan diciéndoles que “ya no parecen personas”. Sin embargo, es realmente difícil dejar de jugar una vez que se empieza. Por eso, debemos estudiar constantemente el Fa, sólo entonces podemos asimilarnos al Fa, ser diligente, y no ser afectados por la interferencia demoníaca.

Soltando los apegos

Debido a que comencé a cultivar desde muy pequeña, pensé que mi apego a la fama, al egoísmo, y a la mentalidad competitiva no eran muy fuertes. Si alguno de mis compañeros sacaba el primer lugar, no me importaba. No me importaban las calificaciones de los demás ni las mías, y entré en la clase de los intelectualmente dotados.

Cuando entré en la secundaria, mis compañeros de clase se preguntaban qué notas habían sacado en los exámenes o las tareas. Poco a poco, también comencé a preguntar por las calificaciones de los demás. Si sacaba algo mejor, me sentía muy feliz por dentro. Junto con esos sentimientos, comencé a sentirme superior a los demás, y a veces no podía evitar el decir: “¡Ja, tengo una calificación más alta que tú!”.

Por otro lado, si otros obtenían una calificación más alta que yo, me sentía mal por dentro y me daba envidia. Si un compañero de clase me decía que había sacado 100 en una materia, lo felicitaba, pero en realidad no me sentía feliz por ellos. Pensaba: “y qué si saca el 100%, ¿no es tan solo un número?”.

Shifu dijo:

“Si esto ocurre en China, él está acabado. «¡Saqué cien puntos! ¡Saqué cien puntos!», este niño corre desde la escuela hasta la casa, y aun sin abrir la puerta, dentro de esa casa ya comienzan a refunfuñar: «¿Qué tiene de extraordinario?, meramente has sacado cien puntos, ¿de qué presumes? ¡Quién no ha sacado nunca cien puntos!»”. (Zhuan Falun)

Había desarrollado un fuerte apego a la envidia, pero no lo sabía. Mi apego a la fama y mi mentalidad de competencia se volvió más prominente.

Antes de un examen, estudiaba mucho con la esperanza de obtener una buena calificación, lo que a veces me dejaba sin tiempo para refinar gong o estudiar el Fa. Después de un examen, constantemente me conectaba para ver si ya habían subido las calificaciones. Mi madre me preguntó: “¿Por qué siempre te conectas para revisar tus calificaciones? Si realmente aprendes y entiendes la materia, naturalmente sacarás una buena calificación. ¿Qué tienes que ver? No pierdas el tiempo en esas cosas, ve a estudiar el Fa, refina gong y danza más”.

También sentí que mi estado no estaba bien, así que diligentemente miré al interior. Me pareció que, en estos dos años, me importaba mucho que mis notas fueras altas o bajas. No iba a la escuela a aprender, y hacer la prueba no era para ver si tenía una buena comprensión de la materia, al contrario, era para comparar calificaciones. Al hacerlo, mostraba mi mentalidad competitiva, apego a presumir y envidia.

Cuando encontré esos apegos, supe que debía elevar mi xinxing. Primero que nada, necesitaba restringirme. Ya no revisaba mis calificaciones tan a menudo como antes, ya no iba por ahí preguntando las calificaciones de los demás, ni esperaba hasta el último minuto para estudiar una materia antes de una prueba. Ahora estoy realmente aprendiendo en la escuela, y estoy en el proceso de eliminar mis apegos.

Promocionando Shen Yun

Desde que llegué a los Estados Unidos, fui inseparable de Shen Yun. Cuando era pequeña, iba con mis padres a colgar folletos de Shen Yun puerta a puerta, a repartir volantes, pegar pósteres, etc.

Durante las vacaciones de verano del año pasado, mi madre necesitó ir al centro comercial a vender boletos para la Orquesta Sinfónica de Shen Yun. Era tan alta como ella, pero aún no cumplía los 13 años, no podía quedarme sola en casa. Así que, mi madre me llevó al centro comercial. Los primeros días, mi madre vendía los boletos mientras yo hacía la tarea y estudiaba el Fa. A veces me quedaba sola mientras mi mamá iba al baño, y me felicitaba al regresar.

En realidad, estaba muy nerviosa y asustada por dentro. Sabía que la promoción de Shen Yun es algo muy sagrado y valioso, pero no podía hablar con extraños. Las primeras veces, me repetía mentalmente: “No venga por aquí, no me hable; mamá, date prisa y regresa. No quiero estar aquí”, etc. Después de un tiempo, progresé mucho. No estaba tan asustada como antes, y tuve el valor que quedarme en el estand.

Luego, mi madre me dijo: “Ya que te gusta bailar, tienes que ser más sociable y extrovertida. Es una buena oportunidad de quitarte el apego al miedo. Además, tu inglés es bueno, justo lo que necesitamos en la promoción de Shen Yun”.

A regañadientes caminé hasta la TV y tomé algunos volantes. No pude evitar sentir un poco de pánico. Entonces me quedé congelada ahí y tímidamente susurraba a los que pasaban: “Hola, esta es la Orquesta Sinfónica de Shen Yun que tocará en el Carnegie Hall el 15 de octubre”. Pasaban de largo, y recibían los folletos de mi madre. Me confundía la razón por la cual tomaban los volantes más lejanos a ellos y no los más cercanos.

Cuando nadie venía hacia nosotros y teníamos un poco de tiempo para conversar, mi madre me preguntó: “¿Con qué tipo de persona te gustaría interactuar? ¿Con una muy amistosa, cálida y educada? o ¿Con una marioneta de madera sin expresión?”.

Entendí este principio, pero ¿cómo iba a hacerlo? Al día siguiente, traté de sonreír, sonreí tanto que mi madre sonrió y me dijo que se notaba que forzaba mi sonrisa, y agregó: “Lo haces mucho mejor que ayer. Deja los deseos egoístas y solo piensa en las personas predestinada que irán a ver a la Orquesta Sinfónica de Shen Yun si reciben un volante, piensa en cuántos seres conscientes podrán salvarse. ¿Por qué tener miedo o sentir vergüenza?”.

La esperanza de los seres conscientes

De hecho, somos la esperanza de todos los seres conscientes. ¡Que mi timidez desaparezca! Siempre me animaba tratando de mejorar. Mi apego al miedo desapareció lentamente. Pude moverme con más libertad y decir en voz alta: “Hola, es la Orquesta Sinfónica de Shen Yun que tocará en el Carnegie Hall el 15 de octubre”. Después, pude hablar un poco más de la orquesta cuando aceptaban el volante.

Estoy realmente feliz de ser capaz de presentar Shen Yun con más confianza a la gente. Ahora es mi voluntad decirle a mi madre que, si tengo tiempo, voy con ella a promocionar Shen Yun.

Sé que cada vez que me elevo es gracias al poder de Dafa.

Shifu dijo:

“El Fa puede revelar todos los apegos, el Fa puede erradicar todas las perversidades, el Fa puede exponer y eliminar todas las mentiras y el Fa puede fortalecer los pensamientos rectos”. (Eliminen la interferencia, Escrituras esenciales para mayor avance (II))

¡Gracias Shifu! ¡Gracias compañeros practicantes!

Presentada en el Fahui de Nueva York de 2017