(Minghui.org) El Sr. Xie Ge, vive actualmente en los Estados Unidos y acaba de presentar una querella penal contra el exdictador chino Jiang Zemin por iniciar la brutal persecución a Falun Gong en julio de 1999.

El Sr. Xie fue arrestado, detenido y severamente torturado en un campo de trabajo durante tres años por no renunciar a Falun Gong.

El Sr. Xie había estudiado en la universidad de Shanghái antes de comenzar a practicar Falun Gong en enero de 1998, cuando comenzó a practicar sus problemas de salud, incluyendo insomnio y taquicardia, desaparecieron.

En mayo de 2015, entraron en vigor unas nuevas medidas legales por las que el tribunal popular supremo garantizaba las inscripciones y tramitaciones de todas las demandas penales y civiles. Esto llevó a miles de practicantes de Falun Gong a ejercer su derecho legal para demandar a Jiang Zemin, precursor de la persecución, la cual ha causado numerosos daños y tremendos sufrimientos a lo largo de los últimos 18 años.

El 23 de julio de 2015, el Sr. Xie envió su querella penal al tribunal popular supremo y a la fiscalía popular suprema.

Detenido y forzado a confesar

El Sr. Xie dijo en su querella: "Me arrestaron el 4 de diciembre de 2001 mientras caminaba por la calle. Cuatro o cinco policías vestidos de civil se abalanzaron sobre mí por detrás y me derribaron. Me esposaron con las manos detrás de la espalda, me cubrieron la cabeza con un saco negro y me obligaron a entrar en su auto. Ninguno presentó sus placas de identificación. Más tarde supe que pertenecían a la cuadrilla de la subcomisaría del distrito de Xicheng en Beijing".

El Sr. Xie declaró en su querella que fue llevado a una sala secreta de interrogatorios en la comisaría de Xicheng y que un oficial usó una barra de metal cubierta con goma para presionar su cuello y evitar que hablara. Al mismo tiempo otro oficial usó el mismo tipo de barra de metal para golpear su espalda y muslos.

"Intentaron forzarme a revelar los nombres y domicilios de los practicantes de Falun Gong con los que estaba en contacto. Me golpearon severamente durante dos horas con la barra de metal. Los golpes en el cuerpo fueron muy dolorosos, aunque al comienzo no quedaran señales. Dos días después de las agresiones sin embargo, mi espalda y mis muslos estaban completamente magullados", agregó.

Alimentación forzada

El Sr. Xie fue llevado al “centro de educación legal” de Beijing (como se denominan a los centro de lavado de cerebro) el 5 de diciembre después de haber sido sometido a la brutal paliza, y lo mantuvieron allí hasta el 23 de febrero de 2003.

Las alegaciones del Sr. Xie también decían: "Sabía que era ilegal arrestarme y torturarme por mi fe y comencé una huelga de hambre el 5 de diciembre en protesta. Luego comenzaron a alimentarme por la fuerza el 12 de diciembre de 2001".

Él continuó: "Estaba atado a una silla de hierro. Si me movía, incluso un poco, de siete a ocho policías me daban patadas y golpes. Introdujeron un tubo de goma de 1 cm de diámetro en mi garganta por la nariz”.

"Cuando me introducían el tubo en la nariz, sentía mi nariz ardiendo. Al sacarlo, mi nariz comenzaba a sangrar. A veces tenían dificultad para introducir el tubo, así que lo sacaban y metían repetidamente", dijo Xie.

El jefe de la policía le dijo: "Te sientes mal, ¿verdad? Seguiremos torturándote hasta que hagas lo que te dicen”.

El Sr. Xie dijo: "En ocasiones, el tubo no llegaba a entrar en mi estómago, sino en mi pulmón. Estuve al borde de la muerte por esta tortura”.

El Sr. Xie fue forzado a comer más de 200 veces durante su detención.


Ilustración de la tortura: Alimentación forzada.

Sumergido en agua fría, congelada, y privado de sueño


Ilustración de la tortura: Sumergido en agua congelada.

El Sr. Xie estuvo en huelga de hambre por más de 50 días en enero de 2002, quedando muy débil. El clima en Beijing en ese momento era extremadamente frío. Alrededor de las 8 de la madrugada, siete agentes de policía entraron en su habitación y le ordenaron permanecer de pie durante un tiempo muy prolongado.

Comenzaron a injuriar y calumniar al fundador de Falun Gong, frente al Sr. Xie. Después de eso, pusieron su foto en suelo y la pisaron.

Luego vertieron agua fría sobre la cabeza del Sr. Xie y abrieron la ventana. El señor Xie se estremeció por el frío y fue privado de sueño durante tres días.

Tres días después, vomitó sangre.

La tortura de la “cama de la muerte”

Hu Zihui, jefe de la división local de seguridad nacional, amarró al Sr. Xie a una cama conocida como la cama de muerte en abril de 2002 para forzarle a renunciar a sus creencias.


Ilustración: Atado a la cama de la muerte.

Oficiales de la comisaría de Beijing colaboraron con el campo de trabajo forzado de mujeres de Beijing para torturarlo. Li Jirong, jefe del cuarto equipo del campo de trabajo forzado de mujeres de Beijing, ordenó reemplazar a los detenidos la cama de madera donde dormía el Sr. Xie por una de metal.

El Sr. Xie dijo en su querella: "Mis cuatro miembros estaban esposados a cada lado de la cama. Estaba atado las 24 horas del día sin poder moverme. Tuve que hacer mis necesidades en la cama.

"Li Jirong ordenó a los reclusos que me injuriaran. También hizo que otros detenidos me cubrieran la boca con una toalla, me taparon los orificios de la nariz y luego vertieron el agua sobre la toalla. Estaba casi asfixiado. El guardia Li me dijo: "Se nos da agua extra para ti".

A pesar de la tortura severa, el Sr. Xie no renunciaría a su creencia. El guardia Li entonces estiró su cuerpo al punto máximo y amaró con más fuerza su cuerpo a la cama firmemente infringiéndole un dolor extremo.

"Estuve atado a la cama de hierro desde abril hasta diciembre de 2002. Debido a las severas torturas, quedé piel y huesos y extremadamente débil. Los músculos quedaron atrofiados con una crisis miasténica. El pulso del corazón era débil y mi presión arterial cayó a 40 sobre 70. Me encontraba al borde de la muerte", declaró.

Aunque su cuerpo estaba en muy mal estado, el oficial Hu Zihui y otros continuaron golpeándolo. Abofetearon su cara, le dieron un puñetazo en el pecho y patadas en las piernas.

Hu le gritó: "¡No creo que no pueda hacer que te rindas! Una vez que lo hagas, te liberaré de esta cama. De lo contrario, morirás en esta cama. ¿Sabes quién soy? Soy el demonio".

"Estuve detenido en el centro de educación de Beijing hasta el 25 de febrero de 2003. Traté de apelar y encontrar un abogado, pero mi petición fue denegada", declaró el Sr. Xie en su querella.

Sometido a lavado de cerebro

"Desde el segundo día después de llegar al centro de educación de Beijing, la policía que trabajaba allí, algunos guardias del campo de trabajo forzado de Beijing y una docena de detenidos intentaron lavarme el cerebro. Utilizaron todos los medios para que renunciara a mi creencia”.

Los guardias y detenidos lo obligaron a escuchar y ver videos que calumniaban y atacaban al Sr. Li Hongzhi y Falun Gong durante horas cada día. También lo amenazaron conque no saldría de allí si no renunciaba a Falun Dafa.

La agente Cheng Cui'e, del campo de trabajo de mujeres de Beijing, también ordenó a los detenidos que pegaran muchos trozos de papel en la pared, suelo y cama con palabras que difamaban al Sr. Li Hongzhi y Falun Gong.

Torturado en un campo de trabajo

El Sr. Xie fue llevado al campo de trabajos forzados Tuanhe de Beijing el 4 de abril de 2003, y fue recluido allí hasta el 24 de enero de 2004.

Fue integrado en el quinto equipo. Se informó a los guardias que mantenía conversaciones con otro practicante de Falun Gong detenido y fue colocado en aislamiento como consecuencia. Debido a que persistió firme en su creencia, fue llevado al equipo especial conocido como la "unidad de ataque intensivo".

"Estaba aislado en una habitación individual y constantemente vigilado por otros detenidos en la unidad de ataque intensivo. No conseguí suficiente comida. Cada comida sólo tenía un pequeño bollo chino y un poco de caldo", dijo el Sr. Xie en su querella.

"Me obligaron a sentarme en un taburete de plástico de 20 cm de altura. La regla para sentarme era que las rodillas tenían que estar cerradas, con las manos descansando sobre las rodillas. Mi espalda y mi cuello tenían que estar rectos. Si me movía un poco, los detenidos me golpeaban".

"Este tipo de tortura parecía fácil de soportar, pero era muy cruel. Unos días más tarde la piel de mi espalda estaba herida y cubierta de sangre, ampollas y llagas. Al final del día, pies, rodillas, brazos y espalda estaban muy doloridos. Me torturaron así por más de 20 días", dijo.

Antecedentes

En 1999, Jiang Zemin, como jefe del partido comunista chino, ignoró a los miembros del comité permanente del politburó y comenzó una violenta persecución hacia Falun Gong.

La persecución ha provocado la muerte de muchos practicantes de Falun Gong desde hace 18 años. Muchos han sido torturados por sus creencias e incluso asesinados por sus órganos. Jiang Zemin es directamente responsable por el comienzo y la continuación de la brutal persecución.

Bajo su dirección personal, el partido comunista chino estableció un órgano de seguridad ilegal, la “oficina 610”, el 10 de junio de 1999. La organización pasa por alto a las fuerzas policiales y al sistema judicial llevando a cabo las instrucciones de Jiang respecto a los practicantes de Falun Gong: arruinar su reputación, cortar sus ingresos financieros y destruirlos físicamente.

La ley china permite a los ciudadanos ser demandantes en casos criminales, y muchos practicantes están ahora ejerciendo su derecho presentando sus demandas criminales contra el exdictador.