(Minghui.org) Un practicante anciano de Falun Dafa (disciplina también conocida como Falun Gong) de mi región era admirado y considerado por otros como un practicante 'excepcional'. Era culto y tenía un título universitario. Parecía tener un entendimiento profundo de los principios del Fa y estudiaba bien el Fa.

Escribía artículos para Minghui.org y también ayudaba a otros practicantes a escribirlos. Trabajaba duro para validar Dafa. Trabajaba muy estrechamente con un coordinador local que se encargaba de suministrar materiales de Falun Dafa. Aunque tenía 70 años nunca se quejaba y era capaz de trasladar paquetes grandes de materiales, subiendo y bajando varios tramos de escaleras. Hablaba activamente a la gente sobre Falun Dafa y la persecución.

Pero repentinamente, un día, la mitad de su cuerpo sufrió una parálisis. Estaba aturdido y no podía expresarse con claridad. No podía estudiar el Fa ni practicar los ejercicios. Cuando lo llevaron al hospital, los médicos fueron incapaces de averiguar qué le pasaba. Los compañeros practicantes se quedaron desconcertados ante tal situación y enviaron pensamientos rectos hacia él. Permaneció así durante una semana, y luego falleció.

Los compañeros practicantes fueron a su casa para recuperar sus libros de Dafa y los materiales. Cuando vieron los libros se sorprendieron al darse cuenta que había escrito sobre todos ellos, incluyendo en Zhuan Falun. Había rodeado con círculos algunas frases o añadido símbolos srivatsa (del budismo tibetano) invertidos. Algunas páginas tenían partes subrayadas en varios colores.

Los practicantes se quedaron conmocionados al comprobar que trataba los libros de Dafa como si fueran libros de texto comunes y había rodeado con círculos o subrayado las frases que creía importantes.

El Maestro nos enseñó en la Lección Novena de Zhuan Falun:

“La cualidad de iluminación de algunas personas simplemente no se eleva; algunos marcan al azar palabras o frases de este libro mío. Aquellos de nosotros que tienen el tianmu abierto pueden ver que este libro brilla con ‘cinco luces y diez colores’ y es de oro resplandeciente, y que cada símbolo es la imagen de mis Fashen. Si yo dijera mentiras, estaría engañándolos a todos; una marca tuya luce como una borrosidad negra, ¿cómo te atreves a hacerlo así a la ligera?”.

No sabemos por qué este practicante no siguió las enseñanzas del Maestro.

El Fa del Maestro es una escalera para ascender hasta reinos elevados. Estudiar el Fa bien es la garantía de que alcanzaremos la consumación. Pero para estudiar bien el Fa debemos respetar al Maestro y al Fa. Escribir en los libros del Maestro es irrespetuoso, especialmente cuando el Maestro nos ha dicho claramente que no lo hagamos. Las viejas fuerzas advirtieron esta brecha del practicante y por eso se atrevieron a llevárselo.