(Minghui.org) En 2015 busqué información en Internet sobre la medicina tradicional china. Una serie de programas de televisión de la NTDTV, cuya sede se encuentra en Nueva York, presentaba a dos médicos en algunos episodios. Ambos dijeron que practicaban Falun Dafa, lo cual atrajo mi interés.

Un amigo de mi padre me había regalado dos libros de Falun Dafa cuando cursaba sexto grado, uno era Zhuan Falun y el otro Falun Gong.

No obstante, a causa de la persecución de Falun Dafa en China, mi madre me exigió que regalara los libros. En cuanto leí Zhuan Falun sentí que el libro era bueno, así que los escondí.

Cuando recobré de nuevo mi interés por Falun Dafa, fui a buscar los libros y comencé mi camino de cultivación.

Eliminando sustancias negativas

He practicado Falun Dafa desde hace un año y medio. Pero no comprendí en qué consistía la verdadera cultivación hasta hace seis meses.

Por ejemplo, no comprendía qué significaba “mirar hacia dentro”, ni comprendía todo lo que abarcaba “cultivarse verdaderamente”. Pensaba que mientras estudiara el Fa e hiciera los ejercicios todos los días, estaba practicando la cultivación. También, “mirar hacia dentro” para mí, era solo algo como aprender a autoexaminarme.

Después de leer el primer capítulo de Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista, mi mente se aclaró sobre todo lo que significaba cultivación.

Durante algún tiempo, mi mente se vio manipulada por el miedo a las enfermedades y por sus síntomas. Entonces comprendí que todas éstas eran sustancias negativas generadas por mi miedo. En realidad, estas interferencias negativas que se reflejaban en mi mente, no eran mensajes de mi conciencia principal, sino que era la interferencia de nociones formadas durante mi vida, del ye de pensamiento y de otras fuentes externas.

Cuando estudié “La conciencia principal debe ser fuerte” en Zhuan Falun, obtuve un mayor entendimiento sobre estos mensajes negativos. Pero solo fui capaz de manejarlos más correctamente cuando aparecían, después de estudiar un párrafo de Exponiendo el Fa en el Fahui del Oeste de los Estados Unido, en el cual el Maestro decía:

“Ustedes deberían, antes de nada, eliminar los malos pensamientos a través de la cultivación. La razón por la que eres capaz de liberarte de esas cosas malas es que no las reconoces como tuyas; esto es extremadamente crucial. Como no las reconoces como tuyas, entonces puedes eliminarlas. En realidad éstas realmente no son tú. Son las varias clases de nociones, o hasta yeli, desarrolladas de las cosas que has hecho después de nacer; son esa clase de cosas”.

Basándome en el Fa del Maestro, empecé a rechazar los mensajes negativos. Sin importar si esto resultaba eficaz en ese momento o no, me mantuve rechazándolos durante más de un mes, casi dos. Incluso mi padre notó un cambio en mí, y me animó para que continuara mi camino de cultivación.

Si apartamos a un lado nuestras emociones cosecharemos éxitos

Después de editar imágenes para varios proyectos de aclaración de la verdad, me di cuenta de lo que implicaban las frases “desde el corazón” y “ser responsable”. Entendí que debo tomar en consideración al Fa y a los seres conscientes cuando edito las imágenes. Esto significa, que proporcionar dichas imágenes no debe convertirse en una mera formalidad.

Descarté las nociones humanas y cambié mi manera de pensar. Escuché cuidadosamente a los supervisores de imágenes, e hice cambios acorde a lo que se requería, en lugar de usar mis nociones humanas.

Cuando me invitaron a tomar imágenes para un equipo de redacción, tomé conciencia de que todavía tenía apegos a la envidia y a mostrarme. Aprendí a apartarlos a un lado y entonces fui capaz de completar lo que tenía que hacer.

En el trabajo, he optado por dejar a un lado los sentimientos. Cuando lo consigo, cada imagen que edito es una vida. Solo poniendo mis apegos a un lado consigo descartar las imágenes que no son apropiadas para cada proyecto.