(Minghui.org) Luego de las audiencias sobre la sustracción forzada de órganos del partido comunista chino a prisioneros de conciencia del 30 de junio de 2016, se realizó una reunión con el mismo tópico en el Palacio de Westminster el 4 de julio. La Baronesa Finlay de Llandaff, miembro de la House of Lords, estaba conmocionada al escuchar sobre la sustracción de órganos de un número tan grande personas que aún se lleva a cabo en China. Ella sintió que el Reino Unido y la sociedad internacional deberían tomar acciones sólidas para detener la persecución.

Una reunión sobre la sustracción forzada de órganos del PCCh a prisioneros de conciencia se llevó a cabo el 4 de julio de 2016 en el Palacio Westminster.

El Sr. Daniel Zeichner, miembro del Parlamento, organizó la reunión. El Dr. David Matas, abogado de derechos humanos presentó una actualización sobre su investigación. Ethan Gutmann, experto en China y periodista investigador, presentó los libros, Cosecha Sangrienta y La Carnicería. Este fue el tercer viaje que hicieron al Parlamento Británico para exponer los crímenes de la sustracción de órganos en la semana pasada. El Dr. Enver Tohti y la practicante de Falun Gong, Sra. Song dieron sus testimonios.

Sr. Zeichner, Parlamentario: “Nuevo reporte expone la sustracción de órganos después de diez años de negación por parte de China

Daniel Zeichner organizó la reunión en el Palacio Westminster el 4 de julio.

Daniel Zeichner dijo durante su presentación que la sustracción de órganos en China comenzó a emerger hace diez años, con evidencia nueva surgiendo mientras los funcionarios chinos la negaban, pero el nuevo informe contiene más datos para probar que aún continúa.

Zeichner presentó a los internacionalmente renombrados oradores quienes presentaron sus descubrimientos en audiencias en el Congreso de los Estados Unidos, y ante el Parlamento Europeo hacía solo unas semanas. Comentó que este es un asunto muy serio dentro de su partido y que merecía otras audiencias adicionales para responder por la sustracción de órganos y la función de las prisiones con mayor detalle.

Miembros de la House of Lords preocupados conque las restricciones al turismo de trasplante no serán suficientes para detener la persecución

La Baronesa Finlay de Llandaff.

La Baronesa Finlay de Llandaff, profesora de medicina y miembro de la House of Lords, asistió a la reunión con su asistente. Expresó su preocupación de que con solo imponer restricciones al turismo trasplante no será suficiente para detener la persecución.

Ella dijo: “Nosotros tenemos la NHS (Sistema de Salud Nacional), pero la mayoría de los países no tienen un sistema unificado. No es difícil saber de una lista quienes están tomando inmunosupresores post trasplantes, para obtener un número, pero tengo la preocupación de que esto no colocará ninguna presión real en China. La gente de todos lados del mundo se hace trasplantes de órganos…

“Mi preocupación está en tomar una medida que es solo para decir que el Reino Unido está haciendo algo. Pero en realidad no protege a aquellos que en China quieren practicar su libertad de creencia sin ninguna persecución. Es una persecución terrible la que hemos escuchado. La gente está arriesgando sus vidas. Tengo la preocupación de que en realidad todas las naciones occidentales han sido demasiado tímidas como para poner en los acuerdos, por ejemplo, que el acuerdo dependa de que los turistas no se hagan trasplantes… tenemos que ser más audaces”.

Además espera que la Sociedad de Trasplantes contribuya en detener la sustracción de órganos, y planea enviar una consulta relacionada al gobierno británico para más acciones.

Testimonios en la reunión para exponer la sustracción de órganos

El Dr. Matas señaló durante su discurso: “Llegamos a la conclusión de que en vez de la cifra oficial de 10.000, se está en el rango de los 60.000 a 100.000. Esto era solo mirando los 146 hospitales autorizados. Pensamos que es un número bastante más alto de trasplantes. Este número era solo por un año. Con los años, estamos en un número mayor al millón. Es una cifra enorme, lejos la más alta en todo el mundo… es a escala industrial.

“Las estadísticas individuales de los hospitales están en la superficie, aunque no son necesariamente más confiables que las estadísticas chinas. No estamos solo mirando lo que dicen, si no cruzando la información. Miramos la cantidad de camas en los hospitales, el personal auxiliar, el tiempo de espera, el dinero gastado en fármacos anti rechazo, sus boletines internos, sitios web, los informes de las publicaciones de los médicos, y otros”.

El Sr. Gutmann declaró en sus hallazgos sobre los crímenes genocidas del estado, la sustracción de órganos de practicantes de Falun Gong vivos: “En 1999, la seguridad del estado lanzó una campaña para eliminar a Falun Gong. En 2001, más de un millón de practicantes de Falun Gong fueron encarcelados en Laogai (reeducación a través del trabajo), o en cárceles negras, centros de detención, campos de trabajo, y hospitales psiquiátricos. Y allí los sometieron a pruebas específicas de órganos…” A pesar del encubrimiento de las autoridades, “en 2012, la fina tela se rompió con la revelación de Wang Lijun y Bo Xilai”. Él dijo que siempre le pareció que esto no está limitado a Falun Gong, sino a un genocidio histórico.

La Sra. Song, una practicante de Falun Gong, relató la persecución que experimentó personalmente en China. Estuvo dos veces encarcelada, en 2010 y 2012, y fue sometida a torturas. Dijo: “Durante mi detención, me hicieron exámenes médicos muy detallados, como rayos x de mis pulmones y pruebas de sangre. Incluso si mi piel tenía cicatrices. También me hicieron exámenes médicos muy detallados y pruebas de sangre cuando estaba en un campo de trabajo forzado en Beijing. Nunca me explicaron para qué me hacían estas pruebas médicas”.

El Sr. Enver Tohti solía ser cirujano en Xinjiang, China. Relató su experiencia de haber sido forzado a terminar la vida de un prisionero condenado a muerte, sacándole los órganos, hace 18 años. Él usa su propia experiencia para contar sobre la educación vía lavado de cerebro que usa el PCCh y el control del pensamiento para poder llevar a cabo la sustracción de órganos. Dijo: “Mucha gente me pregunta: ‘Como médico, ¿acaso no es su responsabilidad salvar vidas?’ Mi experiencia me dice que ellos nacieron en esa sociedad y se convirtieron en una herramienta del mecanismo del partido. Yo estaba incluso contento de ser parte del mecanismo”. Contó que una vez que alguien es denominado enemigo del estado, esta persona será tratada como propiedad del estado y se despojarán de ella de la manera en que les plazca. El Sr. Tohti sintió pena de haber estado del otro lado de las víctimas, y estaba conmovido con el discurso de la practicante.