(Minghui.org) Durante los últimos años, he hecho equipo junto con otra practicante para aclarar los hechos sobre Falun Dafa y animar a la gente para que renuncie al partido comunista chino (PCCh) y sus organizaciones afiliadas.

Ella maneja y nos detenemos tan pronto como vemos a alguien. Se queda en el auto y envía pensamientos rectos, mientras que yo distribuyo material informativo sobre Falun Dafa y la persecución y hablo con las personas.

Persuadiendo a los trabajadores migrantes para que renuncien al partido

En uno de nuestros viajes vimos un sitio de construcción. Esta era una oportunidad excelente para decirle a las personas sobre Dafa, ya que por lo general hay muchas personas en esos sitios.

El lado derecho de la carretera estaba bajo mantenimiento, y los trabajadores migrantes estaban dispersos en pequeños grupos de dos o tres personas cada uno, lo cual era perfecto para nosotras. No obviamos a ni uno solo.

Le dimos a cada trabajador un volante sobre el mercado chino de trasplante de órganos que “no puede estar justificado por la pena de muerte” y un DVD a quien quiera que tuviese un reproductor de DVD. Les hablamos brevemente de qué se trataba lo que les estábamos dando y les pedimos que compartieran la información porque ayudaría a otros como los ayudaba a ellos.

Los trabajadores parecían agradecidos y accedieron a renunciar al partido. Algunos nos señalaban a una persona en la distancia y nos decían que era un miembro del partido y que deberíamos ayudarlo a renunciar. Cuando miraba sus rostros honestos, era feliz porque habían entendido los hechos sobre Dafa.

Un trabajador tuvo una actitud negativa al principio. Enviamos pensamientos rectos y le aclaramos la verdad. Cuando ya habíamos terminado en el sitio de construcción, se nos acercó y quiso que le digamos más sobre Dafa.

Esta vez no discutió y aceptó el folleto. Le dimos un folleto adicional titulado: “Las mentiras que han engañado a cuatro generaciones de chinos” y le dije que lo lea cuidadosamente. El asintió.

El seudónimo es el nombre real de un hombre

Observamos que un hombre joven estaba llamando por teléfono. Le di un disco y le dije: “Joven, aquí hay un programa que puede utilizar para sobrepasar la barrera de Internet. Vea como es el mundo en el otro lado de la barrera”. Me preguntó: “A que se refiere con “sobrepasar la barrera””.

Le expliqué cómo el régimen comunista había gastado toneladas de dinero construyendo las barreras de Internet para evitar que información del exterior ingrese a China. Le dije: “Si solo escuchas un lado, estarás en la oscuridad. Si escuchas ambos lados, todo se volverá claro. Por favor sobrepasa la barrera y descubre por ti mismo qué es verdad y qué es falso”.

Nos dijo que estaba en el ejército y que era un miembro del partido. Le contamos sobre renunciar al PCCh y el estuvo de acuerdo.

Le pregunté cual era su apellido y me dijo que era Feng. Se me ocurrió un seudónimo para el: Feng Zhiyuan, y dijo: “¡Mi nombre en realidad es Feng Zhiyuan!”. Le dimos folletos y discos y lo pusimos en una bolsa bonita para que la cuelgue en su bicicleta.

Toma los pasos necesarios

Mientras conversamos con los trabajadores migrantes, hablé con un hombre que me dijo que estaba trabajando en una construcción cercana. Empecé a hablar con él y fui capaz de persuadirlo de renunciar al partido.

Me dijo que era de la provincia de Sichuan. Escuché que él y sus compañeros de trabajo se irían por unos cuantos días, y que docenas de ellos vivían juntos. La otra practicante y yo decidimos aclararle los hechos a sus compañeros de trabajo durante la noche y nos dio su dirección.

Antes de salir recogimos materiales informativos. Les dimos folletos, discos y amuletos para ayudarlos a renunciar al partido.

El hombre con quien nos encontramos esa tarde nos dio una bolsa de nueces y no aceptó que nos neguemos. Quisimos pagarle pero no dejó que lo hagamos.

Cuando le dijimos adiós, dejó de lado lo que estaba leyendo, nos acompañó hasta la carretera y casi contra su voluntad nos despidió. ¡A mi compañera practicante y a mi nos conmovió mucho y entendimos que nuestro Shifu nos había animado para salvar a más gente de mejor manera!

Compañeros practicantes, de hecho, actuemos con rapidez. Hablar a las personas los hechos y persuadirlas a renunciar al partido y sus organizaciones afiliadas no es difícil. Shifu ha preparado todo para nosotros. ¡Todo lo que falta es que demos los pasos necesarios!

Una bebé quiere ser sostenida en brazos

Vi a un hombre joven sosteniendo una bebé en un brazo y jugando con su teléfono celular en la otra mano. Le entregué un DVD con el programa para atravesar la barrera de Internet. Luego le di algunos materiales sobre Dafa y traté de decirle sobre renunciar al partido. Se fastidió un poco.

La bebé de pronto estiró sus pequeñas manos y quiso que la sostenga. Me di cuenta que Shifu me estaba ayudando a salvar a ese hombre, así que levanté a la bebé y continué hablándole al hombre. Su actitud cambió y renunció al partido.

Con la protección de Shifu, ¡ayudar a las personas a renunciar al partido y sus organizaciones afiliadas es sencillo! Creo que muchos compañeros practicantes sienten lo mismo. ¡Todo es hecho por Shifu! Todo lo que necesitamos hacer es usar nuestras bocas y piernas un poco.