(Minghui.org) Una señora de 81 años de edad de la provincia de Shaanxi viajó cientos de kilómetros hacia la provincia de Shandong, para terminar siéndole negada una visita a su hijo, quien se encuentra sirviendo cuatro años de prisión por negarse a renunciar a su fe en Falun Gong.

El Sr. Ma Fujian, quien trabajaba en Shandong, fue arrestado en mayo del año pasado por contarle a la gente sobre la persecución a Falun Gong. Inició una huelga de hambre para protestar su detención ilegal, pero fue alimentado por la fuerza y torturado por guardias en la prisión de Xinkang.

Su hermano lo visitó a finales de marzo de este año y le entristeció ver que había perdido más de la mitad de su peso corporal. Actualmente está en el proceso de emitir un pedido para que el Sr. Ma reciba tratamiento médico.

Su madre se apuró a venir a Shandong al escuchar sobre la precaria condición de su hijo, pero la prisión ha prohibido las visitas luego que el Sr. Ma le contara a su hermanos obre las torturas que recibía en la reunión que tuvieron en marzo. Actualmente se encuentra protestando fuera de la prisión todos los días, pidiendo que liberen a su hijo.

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