(Minghui.org) Una situación causada por las viejas fuerzas sobre mí ha sido una tribulación por un largo tiempo. Después de hacer los cinco juegos de ejercicios cada mañana experimentaba fatiga, mareo y mi cabeza se sentía pesada.

Además, estaba agotado y carecía de energía mientras estudiaba el Fa en las tardes. Siempre que estaba enviando pensamientos rectos, me sentía soñoliento y exhausto. Después de unos pocos días de esto, estaba cerca del final de mi resistencia.

Si no participaba en los ejercicios de la mañana, las viejas fuerzas tomarían ventaja de mi brecha y llenarían mi mente con apegos humanos. También crearon ilusiones para mantenerme ocupado e intentaron controlar mi mente y pensamientos, así como no permitirme despertarme a tiempo. A pesar de todos mis esfuerzos, fallé en salir del círculo vicioso.

Esto era impuesto sobre mí por las viejas fuerzas. Tenía que avanzar  firme sobre su control.

El Maestro dijo:

“¿Han ustedes pensado en el hecho de que la práctica de cultivación es la mejor forma de descansar? Ustedes pueden obtener la clase de descanso que no pueden lograr por medio de dormir. Nadie diría: “Mi práctica me está causando tanto cansancio que no puedo hacer nada hoy”. Uno sólo diría: “Mi práctica está haciendo que todo mi cuerpo esté relajado y descansado. No siento sueño después de una noche sin dormir”. (“Exponiendo el Fa en el Primer Fahui de Norteamérica”)

Debí haber estado lleno de energía y renovado después de hacer los ejercicios y enviar pensamientos rectos.

Era hora de que negara esta ilusión y eliminara mis nociones humanas que me cansaban durante el día si me levantaba muy temprano a la mañana. También necesitaba vencer la pereza que evitaba que me levantara de la cama para hacer los ejercicios de la mañana. Estaba decidido a negar las viejas fuerzas, negar el círculo vicioso y abandonar las nociones humanas.

Envié pensamientos rectos cada atardecer antes irme a la cama para eliminar la pereza, todos los factores materiales que eran las causas de mi pereza y la oscura inercia que me mantenía sujeto a la cama.

Cuando la alarma de reloj sonó a la mañana siguiente me recordé los pensamientos rectos que envié la noche previa e inmediatamente salté fuera de la cama. Sin embargo me sentía débil con fatiga en las tardes cuando estaba yendo a estudiar el Fa.

Mi reacción inmediata fue hacer la meditación sentada, pero de media hora, estaba muy cansado y soñoliento para continuar. Caí en la cama y me dormí inmediatamente. Cuando me desperté, miré al reloj y entonces caí dormido de nuevo.

Parecía que mi mente y mi cuerpo no podían moverse, como si estuviera siendo controlado por alguna cosa. Pero mi conciencia principal era absolutamente clara: “Maestro Li Hongzhi, por favor ayúdeme”, llamaba. “Por favor ayúdeme Maestro”.

Sentía que el Maestro estaba eliminando ciertas sustancias de mi cuerpo y me desperté después de una feroz lucha.

En los siguientes días, me levanté temprano en la mañana a hacer los ejercicios e hice la meditación sentada por más de media hora en la tarde antes de estudiar el Fa. Como resultado, mi mente se sintió mucho más nítida y mi cuerpo se volvió más fuerte, produciendo más energía.

Sé que el Maestro me dio una mano y me salvó del círculo vicioso arreglado por las viejas fuerzas.