(Minghui.org) David Kilgour, ex diplomático canadiense, presentó los resultados de sus investigaciones en el 2015 en el Congreso de las Humanidades y las Ciencias Sociales en Ottawa, Canadá, el 5 de junio. Destacó el hecho de que los practicantes de Falun Gong son el blanco principal de la sustracción forzada de órganos en China.

El Sr. Kilgour dijo que al ser Jiang Zemin la persona que lanzó la persecución a Falun Gong en China en 1999, debe ser llevado ante la Corte Penal Internacional por crímenes de lesa humanidad y "debería ser el primero en ser acusado formalmente".

"Como ex fiscal que he sido, eso sería el sueño de un fiscal llevarlo a la Corte Penal Internacional de La Haya", agregó. "Y estoy seguro de que hay miles de fiscales de todo el mundo que estarían encantados de hacerlo. Y, probablemente, muchos fiscales en China estarían encantados de hacer eso..."

El Sr. David Kilgour, ex diplomático canadiense

Maria Cheung, profesora asociada en la Facultad de Trabajo Social de la Universidad de Manitoba, llegó a la misma conclusión con respecto a la sustracción forzada de órganos, "Con el volumen de trasplantes en China, la tasa de donación extremadamente baja y el corto período de espera, los practicantes de Falun Gong están siendo utilizados como la gran fuente de órganos de personas vivas, disponibles para cumplir con la demanda".

Según la Dra. Cheung, existe una cadena de operaciones del negocio de la sustracción de órganos en China: el partido comunista chino (PCCh), el sistema penitenciario (incluyendo los campos de trabajos forzados, y las cárceles negras), los hospitales (principalmente los hospitales militares), y los intermediarios para conectar a los clientes.

Dra. Maria Cheung, profesora asociada de la Universidad de Manitoba

El Sr. Kilgour y el abogado internacional de derechos humanos David Matas comenzaron a investigar el asunto en el 2006, poco después de que la noticia sobre la sustracción forzada de órganos saliera a la luz. Sus nueve años de investigaciones independientes concluyeron que la extracción forzada de órganos sigue ocurriendo en China. El Sr. Kilgour presentó un cuadro escalofriante de los asesinatos masivos contra practicantes de Falun Gong: son asesinados por sus riñones, hígados, corazones y córneas para lucrar con los trasplantes de órganos.

El Sr. Kilgour dijo que la carta de Jiang al comité permanente del politburó, después de la protesta pacífica de los practicantes de Falun Gong cerca de la sede del PCCh el 25 de abril de 1999, es una pieza clave de evidencia que lo implica como responsable de iniciar la persecución. "Esa carta es suficiente como evidencia razonable de que es culpable de este delito que continua".

"Los hospitales militares están muy involucrados en el trasplante de órganos. Muchas cirugías realizadas en los hospitales militares son también para el turismo de trasplantes. No están bajo el control del ministerio de salud. Los cirujanos militares con frecuencia también practican en los hospitales civiles. Algunos hospitales militares se jactaban en sus sitios web de que los trasplantes de órganos eran su fuente número 1 de ingresos”, dijo la Dra. Cheung.

Ella declaró que Jiang Zemin, ex líder del PCCh, lanzó personalmente la persecución en 1999, y planeó destruir física, mental, y financieramente a los practicantes de Falun Gong. Jiang y el PCCh han apuntado hacia los practicantes de Falun Dafa en los últimos 15 años, con formas que imitan el genocidio, según la Dra. Cheung.

Hizo hincapié en la importancia de ayudar desde fuera de China, "Siendo científicos sociales, sabemos que la neutralidad sólo significa tomar partido con el poder dominante. En el caso de Falun Gong, la potencia dominante, el PCCh, ha desplegado una gran cantidad de recursos para difamar y fabricar la desinformación acerca de Falun Gong. Ser neutral sólo dará lugar a la indiferencia y perpetuará el genocidio".

"Como ser humano, mi derecho fue violado porque cualquier ser humano tiene derecho a la vida", dijo Macy Demissie, investigadora de ciencias sociales de Quebec. Ella dijo que las presentaciones estuvieron muy buenas porque no eran sólo teóricas.

La conferencia se celebró en la Universidad de Ottawa, del 30 de mayo al 5 de junio. Este es el encuentro académico más grande en Canadá, y en él participan cerca de 8.000 académicos, investigadores y políticos cada año.