(Minghui.org) La Subcomisión de Derechos Humanos Internacionales del Parlamento de Canadá emitió un comunicado condenando la sustracción de órganos de practicantes vivos de Falun Gong encarcelados por sus creencias en China, citando "informes reiterados y creíbles de la sistemática sustracción de órganos autorizada por el Estado sin el consentimiento de los presos de conciencia".

La Subcomisión, "... expresa su profunda preocupación por las denuncias creíbles de que los presos de conciencia y los miembros de grupos religiosos minoritarios y étnicos, incluyendo pero no limitado a los practicantes de Falun Dafa y uigures, en la República Popular de China, están siendo ejecutados con el propósito de sustraer y usar sus órganos para trasplantes".

Lo anterior fue publicado el 3 de febrero de 2015, en una declaración enmendada por la Subcomisión de Derechos Humanos Internacionales perteneciente al Comité Permanente de Asuntos Exteriores y Desarrollo Internacional del Parlamento de Canadá.

La declaración original fue aprobada el 6 de noviembre de 2014. La enmienda fue aprobada después de dos audiencias con el testimonio de David Matas, David Kilgour, Ethan Gutmann, y de “Doctores contra la Sustracción Forzada de Órganos”.

Parlamento de Canadá.

Viajar al extranjero para trasplantes ilegales y poco éticos

El subcomité aprobó la declaración enmendada después de escuchar el testimonio de que "la brecha entre la oferta y la demanda de órganos de donantes ha dado lugar a una serie de prácticas poco éticas e ilegales. Las personas en las listas de trasplantes a menudo tienen que esperar años para que un órgano esté disponible legalmente en Canadá o en otro lugar".

"Desesperados por vivir, estos individuos pueden decidir viajar al extranjero para un trasplante, a un país donde puedan adquirir un órgano. Tristemente, los órganos en este comercio mundial se toman a menudo sin el consentimiento de las personas más pobres del mundo y de los más vulnerables para la explotación".

"Los testigos indicaron que la policía, los militares y los profesionales médicos en varias regiones de China participaban en la sustracción ilegal de órganos, involucrando tanto a los médicos, investigadores, el hospital y el personal clínico, así como profesionales del sector de la justicia".

Poner fin a las atrocidades

En su llamado a terminar con el trasplante de órganos procedentes de donantes vivos o fallecidos sin el consentimiento, el subcomité:

"Alienta a los médicos profesionales canadienses, científicos, investigadores y sus organizaciones profesionales, así como a los organismos reguladores, a que continúen sus esfuerzos para poner fin a las prácticas ilegales y poco éticas de trasplante".

"Pide a los médicos y científicos profesionales y organismos regulatorios a identificar, denunciar y aislar a los individuos, instituciones y sus afiliados que participan en la sustracción forzada y el tráfico de órganos humanos".

"Insta al Gobierno de Canadá a considerar la manera de disuadir y prevenir a los canadienses de participar en el turismo de trasplantes, donde los órganos no se han obtenido de una manera ética, segura y transparente."