[Minghui Net] Una imagen flotó hacia mi mente esta mañana mientras estaba haciendo los ejercicios de Falun Gong. Vi una imagen que se veía igual a mí. Su expresión era egoísta y envidiosa. Sentí que ese era mi “yo”.

Siempre pensé en el tema del “yo”. Sin embargo, no podía entender por completo lo que otros compañeros practicantes mencionaban en sus intercambios de experiencia acerca de esta cuestión. Expliqué que había soltado mi yo pero no podía entender por completo qué quería decir ese "Yo".

Esta mañana de repente comprendí lo que quería decir cuando pude verme. Ahora tengo una clara comprensión de su significado interno. Mi intención es compartir, con mis compañeros practicantes, a lo que me iluminé.

Una persona forma toda clase de nociones, apegos humanos y yeli durante el curso de su vida. Esas nociones, apegos y yeli forman un ser. La imagen de ese ser es la misma que la imagen de la persona, pero, el pensamiento del ser quiere satisfacer sus intereses personales, cumplir deseos y obtener beneficios. Así que cuando somos controlados por el ser, nos enojamos, sentimos envidia y odio, ostentamos y luchamos contra los demás.

Mi verdadero yo encerrado en una ostra

Es algo así como si el verdadero yo estuviera encerrado en una ostra. Cuando la conciencia principal o espíritu, no es lo suficientemente fuerte, estos estados posnatales controlan el pensamiento y las acciones de una persona, y poco a poco el verdadero yo es enterrado.

El verdadero ser o naturaleza innata, está alineado con las características del universo Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Shifu ya ha rectificado las partes de los practicantes que se han desviado de su naturaleza innata, de Dafa y del universo. Así que cuando volvamos a nuestro verdadero yo, estaremos totalmente alineados con los estándares del nuevo universo.

El significado verdadero de dejar ir el yo es deshacerse por completo de esa capa exterior que se compone de egoísmo, deseos y yeli. Entonces cuando regresemos a nuestro yo verdadero, todos nuestros pensamientos serán guiados por el verdadero ser.

Después de que me iluminé a esto, de inmediato fui capaz de reconocer los apegos humanos. Me dije que era mi falso yo, o que no era mi verdadero yo quien estaba causando problemas. También me pareció más fácil que antes deshacerme de esta mala sustancia.