Asegúrense de no aflojar en la cultivación durante la fase final

(Minghui.org) La más reciente conferencia de Shifu, "Enseñanza del Fa en el Fahui de San Francisco de 2014", dejó una profunda impresión en mí. Mi sensación inicial fue que el tiempo apremia.

Shifu ha hecho hincapié en que el tiempo es limitado, pero en esta ocasión Shifu dijo:

“…de ahora en adelante, cambien vuestro estado, ¡no son como cultivadores! Y dije hace tiempo, ¿hasta cuándo van a esperar? ¡¿Hasta cuándo van a esperar?! No hay más tiempo”.

Mi segunda impresión fue que no se debe aflojar en la cultivación de uno, sobre todo ahora, en la fase final de la rectificación del Fa.

Shifu nos dijo:

“Por eso se dice que al cultivarse como si recién se empezara seguramente se obtendrá el Fruto Recto”. (“Enseñando el Fa en el Fahui internacional de Gran Nueva York 2009”)

Ese momento es mencionado de nuevo por Shifu: “Desde el comienzo hasta el final, si puedes mantener este tipo de corazón de ese entonces al principio, seguramente vas a tener éxito”. (“Enseñanza del Fa en el Fahui de San Francisco en 2014”)

Entiendo que esto significa que no debemos relajar nuestra cultivación en la última etapa.

La siguiente es mi experiencia de cultivación en este sentido. Por favor, señalen cualquier cosa inapropiada.

Desechando el apego a las emociones

Leí un montón de novelas románticas cuando estaba en la escuela media, porque ese tipo de ficción era popular entre los estudiantes de secundaria. Me aprendí de memoria un montón de esas cosas y mi cerebro estaba lleno de ellas.

Más tarde, cuando empecé a practicar Falun Dafa, eso interfirió seriamente con mi cultivación, y yo no podía deshacerme por completo de ello. Cuando veía películas románticas, programas de televisión, o a ciertas actrices, me imaginaba que yo era el personaje masculino en la historia.

Shifu nos dijo en Zhuan Falun que un discípulo se arrepintió de no pasar la prueba de la lujuria en su sueño. También yo a veces tenía la prueba de la lujuria en mis sueños, pero siempre disfrutaba de ese tipo de sueño. Podía pasar la prueba en la vida real pero siempre fallaba en mis sueños. Incluso cuando me despertaba, me lamentaba de despertarme tan pronto. Más tarde fui encarcelado durante siete u ocho años, en parte debido a ese apego.

Mientras estaba en la cárcel, no dejé de mirar hacia dentro, pero mi estado de cultivación era a veces bueno, y en otros momentos era malo.

Encontré un trabajo como gerente en una empresa después de que me liberaron. De los 70 u 80 empleados, sólo tres éramos hombres. Tenía que lidiar con las mujeres durante todo el día. Yo sabía que era para quitar mi lujuria. Pude comportarme de acuerdo con el estándar de un practicante, pero no en mis pensamientos.

Tenía sentimientos por una empleada. Pronto ella me envió un mensaje: "Pensé que estaba sola pero puedo irme contigo". Examiné mis pensamientos para encontrar la causa. Pensé que surgía de mis pensamientos incorrectos. Me encontré con ella y le dije que yo era un practicante de Falun Gong. Le aclaré la verdad sobre Falun Gong y la ayudé a renunciar al partido comunista chino (PCCh).

Otra empleada estuvo enviándome mensajes con ideas indecentes. Me di cuenta que yo tenía aún un poco de apego a la lujuria que no había sido completamente desechado, así que utilicé pensamientos rectos para deshacerme de éstos. Pasé la prueba. Ahora ya no estoy interferido por este tipo de cosas que antes de vez en cuando afloraban.

Agradezco a Shifu y al poderoso Fa que me ayudaron a deshacerme del apego a la lujuria.

Eliminando el odio

Tres generaciones de mi familia fueron perseguidas por el PCCh, así que crecí con aversión hacia el malvado PCCh. Cuando el PCCh tomó medidas contra el movimiento estudiantil de 1989, odié aún más al PCCh.

Traté a todos los guardias de la prisión como enemigos mientras estuve en prisión. Después de que un guardia tomó mi copia de Zhuan Falun, lo odié, y ese odio duró mucho tiempo, incluso después de que me liberaron. Estuve pensando en cómo castigarlo o darle una paliza al menos una vez. Luego este pensamiento se hizo más fuerte. No dejaba de pensar en ello, incluso cuando estaba haciendo la meditación sentada. Ni siquiera podía concentrarme para memorizar el Fa.

Me di cuenta a través del estudio del Fa que los oficiales de policía y otros agentes del orden son seres conscientes que necesitan ser salvados. Ellos fueron engañados por la propaganda del PCCh. Solía ver a la policía como malhechores debido a mi odio. No los traté como personas comunes y por lo tanto no tenía ninguna compasión por ellos.

Debido a mi apego al odio no pude mejorarme y no lo hice muy bien cuando traté de salvar a los seres conscientes. En realidad, muchas de las oficinas de policía están siendo controladas por los elementos del mal para perseguir a los practicantes de Falun Gong. Si eliminamos a las viejas fuerzas, muchos policías aceptarían la verdad.

Shifu dijo en la "Enseñanza del Fa en el Fahui de San Francisco de 2014":

“Aunque sean esos de esa banda que participa en la persecución, o quienes fueron engañados y se han subido al barco de la maldad, también tienes que tratarlos con Shan”.

Después me di cuenta de lo malo que es el apego al odio, pensé en todas las personas en diferentes ámbitos de la vida que están esperando que los salvemos. Pude liberar todo mi odio y esa cosa que no era capaz de dejar ir previamente. Ahora tengo el deseo de ayudar a que todo el mundo sepa la verdad y se salven. Sentí la poderosa virtud del Fa. Mi confianza en el Fa aumentó, y sentí el deseo sincero de salvar a los seres conscientes.

Abandonando completamente el apego al interés propio

Pude ser más estricto conmigo cuando empecé a cultivarme. Me negaba a tomar regalos o los entregaba a otros si me veía forzado a aceptarlos. Pero ahora no lograba hacer eso. Yo estaba a cargo de la entrega de artículos de bienestar para nuestros empleados de la compañía, y la rotación del personal era alta. Nunca coincidía el número de artículos que recibíamos con el número de gente que los necesitaba. Si una persona necesitaba ayuda, para el momento en que finalmente la recibía a menudo ya no estaba más trabajando ahí. A veces me quedaba con los artículos sobrantes en la oficina. Hace poco me di cuenta de que esto estaba mal, que era como que yo usara estos artículos.

Este apego al interés propio creció debido a mis dificultades después de salir de la cárcel. Me di cuenta de que este apego era un gran obstáculo para los discípulos de Dafa y que teníamos que corregirlo para salvar a más personas. Me di cuenta de que este apego se conecta con la codicia. Shifu dijo:

“Para que cualquier cosa tome raíces en este mundo, que pueda mantenerse y establecerse, tiene que haber un factor esencial: tiene que formar un campo en esta dimensión, un campo que es de existencia material”. (“Exponiendo el Fa en el Fahui de Europa”)

La cultivación es extremadamente seria. Hay que controlar los pensamientos de uno en todo momento. Si algunos de nuestros pensamientos no son apropiados o no se derivan del Fa, tenemos que deshacernos de ellos inmediatamente. De lo contrario, pueden causar grandes problemas. Si relajamos aunque sea solo un poco y nos mantenemos cerca del lado humano, nuestra cultivación puede fracasar.

El mundo humano es un vasto lugar para la cultivación de los discípulos de Dafa, pero como fue arreglado por las viejas fuerzas, también contiene elementos nocivos para perseguir a Dafa. Si queremos escapar de este campo, cultivarnos, y así salvar a otros, tenemos que mantener los pensamientos rectos que estaban presentes cuando empezamos a cultivarnos. Tenemos que medir todo con los estándares del Fa y caminar bien nuestro camino.

Shifu dijo en la "Enseñanza del Fa en el Fahui de San Francisco de 2014":

“Por lo tanto espero que todos mantengan el estado del corazón de este momento, como un Dafa dizi. La situación es apremiante, tantas vidas están esperando que ustedes las salven. ¡Estoy muy ansioso!

Mirando hacia atrás en mi propia cultivación, puede que haya aflojado cuando comparo cómo era yo cuando empecé a cultivarme. Realmente tengo que cambiarme a partir de ahora.