[Minghui Net] En la Escritura de los Tres Caracteres se dice: “El jade no se convertirá en jade sin ser esculpido y refinado”.  Ser esculpido es un proceso doloroso. Por tanto, después de una resistencia y paciencia de larga duración, normalmente se convertirá en algo de valor. Según la leyenda, hace mucho tiempo se construyó un gran templo en una ciudad. El templo era muy sagrado y tranquilo. Lo único que faltaba era una estatua de fo para que los creyentes veneraran. Así que los fieles invitaron a un famoso artesano del jade para que esculpiera una estatua de fo para que pudieran expresar su admiración. El escultor del jade vio que los creyentes eran muy devotos, así que fue personalmente a las montañas a seleccionar la piedra.

Su duro trabajo finalmente valió la pena porque encontró una piedra de muy buena calidad. Debido a que la piedra era muy grande, la partió en dos pedazos, tomó uno de ellos al azar, y comenzó a trabajar en él. A medida que iba siendo tallada, este pedazo de piedra apenas podía tolerar el dolor. Le dijo al artesano: “Duele terriblemente. ¿Puedes cortar más suavemente? He soportado el viento y la lluvia en las montañas, pero jamás había experimentado un dolor como este. ¿Realmente puedes convertirme en una estatua de fo?”. El escultor respondió: “La resistencia es un proceso. Mientras estés determinado, habrá una nueva vida al final de tu dolor. Confía en mí y por favor continúa soportando”.

La piedra pensó un momento y le dijo al escultor: “Lo consideraré. ¿Cuándo terminarás de esculpirme?”. El escultor bajó el cincel y le dijo a la piedra: “Acabo de empezar a trabajar contigo. Tendrás que continuar soportando 30 días más. Cuando haya acabado, si la gente no está satisfecha con mi trabajo, tendré que volver a trabajar y mejorarla. Pero si los demás están satisfechos, te convertirás en una estatua de fo”.

La piedra se quedó en silencio durante un rato. Por un lado, pensó en lo bien que se sentiría el día en que se convirtiera en una estatua de fo. Por otro lado, no podía soportar el agudo dolor de ser esculpida. Después de dos horas gritó: “¡Esto me está matando! ¡Esto me está matando! Por favor deja de usar el cincel para esculpirme porque en realidad ya no puedo soportar más el dolor”.

El escultor bajó la piedra que había esculpido sólo un poco y simplemente la rompió en cuatro bloques que colocó en el suelo del templo. Después tomó la otra mitad de la piedra y comenzó a trabajar en ella. Después de esculpir por un rato, el escultor preguntó a este pedazo de piedra: “¿No sientes ningún dolor?”. Este segundo pedazo de piedra dijo: “El otro pedazo de piedra y yo éramos originalmente un mismo pedazo. El intenso dolor es el mismo, pero no me daré por vencido tan fácilmente”.

El hombre preguntó: “¿Por qué no me pides que esculpa suavemente?”. La piedra contestó: “Si te pido que esculpas suavemente, la estatua de fo puede no resultar refinada, y será devuelta para ser trabajada de nuevo. Es mejor para ti hacerla perfecta la primera vez y no desperdiciar el tiempo de nadie”. El escultor estaba impresionado por el fuerte carácter de la segunda piedra y estaba feliz de continuar su trabajo. Después de 30 días de tolerancia, había esculpido con éxito una bella estatua de fo.

Poco después, se presentó una solemne y poderosa estatua de fo a los creyentes de la ciudad. Fue colocada en el altar, y la gente la admiraba y elogiaba. El templo se volvió cada vez más popular y dio la bienvenida a un interminable flujo de gente cada día. Un día, la primera piedra que se había convertido en bloques de piedra preguntó a la estatua de fo: “¿Por qué te han colocado tan alta para ser venerada, mientras que yo tengo que soportar ser pisoteada por miles de personas todos los días?”. La piedra que se había convertido en la estatua de fo sonrió y contestó: “Es sencillo. Tú solo tuviste que atravesar un proceso muy simple para convertirte en bloques de piedra. Yo tuve que soportar numerosos cortes para convertirme en una estatua de fo”.

A través de la historia y mirando la historia humana, esta situación es la misma para todo en este mundo. De hecho, la única diferencia entre elegir soportar y buscar comodidad es un pensamiento. Si uno pierde una oportunidad dada, uno puede encontrar un dolor interminable al final. Si uno cree en la promesa del futuro y soporta la prueba con tenaz perseverancia, uno tendrá un futuro brillante.