[Minghui Net] En el verano de 1997, un colega me dijo, “Te ves ansioso. No hay nada que hacer en el verano. Te voy a dar un libro para que leas. Puede que te beneficie”. Tomé el libro. Era Zhuan Falun. Dije: “¿Es un tipo de qigong?”. Me dijo: “Si, es Falun Gong”. Perdí el interés. Había practicado qigong por varios años, pero mi salud no mejoraba. Pensé que todas las prácticas de qigong eran iguales y que no había diferencia. Tenía el libro sagrado en mis manos pero no lo reconocí en aquel entonces.

En junio de 1998, el mismo colega nuevamente me animó a leer el libro y compartió muchas de sus experiencias conmigo. Mientras hablaba, su sinceridad y comportamiento pacífico me conmovió. Pensé que había muy poca gente como ella hoy en día. Le importaban los demás sinceramente y me dio el libro sin pedir nada a cambio. Por curiosidad, leí por encima Zhuan Falun. Mi impresión inicial fue que hablaba sobre seguir los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia y explicaba cómo ser una buena persona.

Tenía poco entendimiento sobre el libro. Mi colega me dijo: “Te llevaré a una serie de conferencias de 9 días”. Quería matar tiempo así que la seguí a la casa de un practicante a 10 millas de donde estábamos. Ese fue un día que no olvidaré. Mi vida cambió mientras entré por la puerta hacia una vía de cultivación-refinamiento recta.

De sorprendido a maravillado

Cuando llegué al patio, noté que había varios vehículos bien aparcados. Las bicicletas, triciclos y motocicletas estaban estacionados separadamente. No veíamos a nadie y estaba todo muy tranquilo. Me preguntaba por qué no había nadie por allí. Abrimos la puerta y lo que vi me impactó. Había como 100 personas dentro que llenaban tres cuartos. Estaban sentados con respeto. Una persona estaba leyendo la escritura del Shifu en voz alta. Encontramos un lugar vacío y nos sentamos en silencio. Me costó recomponerme porque nunca había visto tanta gente portándose bien en un mismo sitio. En la escuela donde trabajaba, siempre escuchábamos susurros cada vez que los profesores estaban en reunión. Había mucha gente de diferentes regiones en el cuarto. Me sentí feliz de estar en un grupo de gente altamente calificada.

Estudiando el Fa y compartiendo experiencias

Cada día de las 7:30 a.m. a las 11:00 a.m. estudiábamos una lección del Zhuan Falun, y desde las 1:00 p.m. hasta las 5:30 p.m., estudiábamos las otras lecciones del Shifu. Veíamos las 9 conferencias del Shifu a las 7:00 p.m. Este fue mi primer estudio del Fa grupal y la primera vez que escuché a los practicantes compartir experiencias. Mi corazón se conmovía de vez en cuando. 

Todos nos sentábamos con la espalda recta y nos turnábamos para leer las lecciones del Shifu. Cuando escuché por primera vez a un practicante corregir la pronunciación de un lector, me conmovió lo serios que fueron. Nadie excepto mis profesores habían corregido mi pronunciación desde que me gradué de la escuela primaria. Era un problema mío si no usaba la pronunciación correcta, pero los practicantes se tomaban el tiempo de corregirse entre ellos. No entendía por qué estaban haciendo eso, y sentí que eran respetuosos. Luego me di cuenta que era una manifestación del respeto de los practicantes hacia el Shifu y el Fa. Lo que más me impresionó durante el estudio del Fa era cuando los practicantes compartían sus experiencias. La gente reconocía los méritos de otros y examinaba sus propias fallas de acuerdo con Dafa. Contaban historias sobre pasar pruebas de xinxing. Me conmoví profundamente y tuve un mayor conocimiento sobre la práctica de cultivación.

Recuerdo claramente que un practicante masculino lloró cuando estaba compartiendo sus experiencias. Tenía alrededor de 30 años. Dijo que era un joven renegado. La policía del condado lo había arrestado varias veces y no podían arreglar su comportamiento. Nunca había pagado los impuestos a su equipo de producción. Los oficiales de la brigada no se atrevían a hablar con él. Luego que obtuvo el Fa, percibió el significado de la vida y un código de conducta más apropiado. Estaba determinado a corregir completamente sus fallos anteriores, pagar los impuestos que debía, y nunca hacer maldades. Lloró, y todos también lloramos de la emoción. Estábamos agradecidos que Dafa limpiaba los corazones de los practicantes verdaderos y agradecidos de la ardua y misericordiosa salvación del Shifu.

Si no hubiera estado allí en persona para escuchar estas historias, no habría creído ninguna de ellas. Me volví más determinado a seguir el camino de cultivación refinamiento.

Comidas

Encargarse de la comida para 100 personas era difícil, especialmente en julio. Había vivido en una comunidad por mucho tiempo, pero nunca había experimentado una como esta. Comimos de los platos principales y secundarios. A veces había sobras de la comida anterior. Los primeros en la fila siempre se comían las sobras. Los practicantes hablaban entre ellos pero en voces bajas. Luego de la comida, ayudamos a limpiar los platos.

Quisiera mencionar que varios practicantes del área prepararon las comidas. Para ahorrar dinero para el grupo, cocinaron la comida ellos mismos en el calor del verano e invirtieron su propio tiempo de estudio del Fa. No tenían ninguna queja o arrepentimientos. Siempre estaban de buen humor y jugaban un rol de apoyo. La calle frente a la casa del practicante anfitrión estaba limpia en todo momento.

Pagando nuestras comidas

La última noche de la sesión de 9 conferencias, el practicante a cargo anunció que cada comida costaría medio yuan. Cuando fui a pagar por mis comidas, había una caja en un escritorio en el patio. Los practicantes soltaban el dinero en la caja, y nadie le prestaba atención. Me sorprendió la manera en que se recolectaba el dinero.

Luego de la sesión de 9 días, entendí que el comportamiento de los practicantes venía de su práctica de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, altruismo y considerar a los demás primero. Estas son las enseñanzas de Dafa. Fue el poder del Fa y la manifestación de los corazones de los practicantes fundiéndose en el Fa. Esta tierra pura que apareció en un mundo caótico era la manifestación del gran Fo Fa en el mundo humano.

Con la protección compasiva del Shifu, he estado siguiendo mi camino de cultivación por más de 10 años. La sorpresa y deleite que sentí cuando obtuve el Fa por primera vez todavía es una memoria clara.