[Minghui.org] He practicando Falun Dafa desde 1998. Durante más de diez años de altibajos, experimenté la naturaleza extraordinaria y maravillosa de Dafa. Antes de que empezara a practicar, estaba débil, enfermiza, y tenía una mentalidad negativa. Ahora tengo buena salud, y soy optimista. Mi familia, especialmente mis dos hijas, están muy de acuerdo con Dafa y me apoyan en mi cultivación. A veces también estudian y practican Dafa y se benefician mucho de ello. Como Shifu dijo: “La gente común que conozca el significado superficial será enormemente bendecida”. (“El viaje de Dafa” de Hong Yin II). A continuación narro las experiencias sobrenaturales que me han sucedido con mi familia:

En invierno, mi hija una vez me llamó del colegio y me dijo que tenía frío y que sentía que se había enfriado mucho, y tenía molestias y dolores por todo el cuerpo. Le dije: “No olvides lo que te dije, recita las palabras (refiriéndome a “Falun Dafa es bueno”). Me dijo: “Lo recuerdo”. Luego colgó el teléfono. Después de varios días, volvió a casa del colegio por vacaciones, y la primera cosa que me dijo fue: “Mamá, recité una vez ‘Falun Dafa es bueno’ cuando estaba enferma y al momento sentí fluir calor desde mi cabeza por todo mi cuerpo. Luego empecé a sudar y el dolor de las piernas se fue. Como resultado, pude sentarme en la clase para dar dos lecciones y me sentí muy a gusto”.

Además las notas que sacaba mi hija mejoraron desde tener la media a las mejores de la clase. Además hace dos años aprobó el examen para entrar y le admitieron en el instituto más prestigioso. La escuela incluso le concedió una beca.

Mi hija más joven tenía fimosis del clítoris cuando tenía menos de dos años. La llevamos a ver a un doctor y compramos algunos anti inflamatorios de vuelta a casa para ella. Después no pudo orinar en 12 horas por el dolor. Lloraba a voz en grito, y apresuradamente le dije a mi marido: “Recita ‘Falun Dafa es bueno’ rápidamente y pídele a Shifu que la salve”. Después de unos cuatro o cinco minutos sucedió un milagro. Orinaba sin dolor. Al atestiguar lo que le pasó a mi hija, mi marido dijo sinceramente: “¡Dafa es verdaderamente maravilloso!”

Mi familia posteriormente se mudó al centro, alquiló un apartamento y compartía tres habitaciones con la familia de la casera. Sabía que mis hijos eran disciplinados y que mi marido y yo éramos amables, así que la casera no cerraba la puerta cuando se iba. Poco a poco le fui aclarando la verdad, y aprobaba Falun Dafa e incluso llevaba un amuleto con ella. Además, les pidió a su marido e hijos que llevaran también el amuleto. Decía: “Tu familia vive de una manera armoniosa y todos sois amables. Aunque te vas cada día, (refiriéndose a la aclaración de la verdad), no tienes insolaciones en verano, no tienes frío en el invierno. Tal vez pueda tomar algunos amuletos más”.  Además toda la familia de la casera, vio el CD de la actuación de Shen Yun. Puesto que la casera era analfabeta, le leía yo las letras de las actuaciones. Dijo: “Sería maravilloso su todo el mundo hiciera lo que nos cuenta la letra”.