[Minghui Net] Un día mientras caminaba por la calle, una mujer me detuvo y me preguntó: “Pareces tan energética. ¿Qué practicas? ¿Cuántos años tienes? Yo contesté: “Tengo casi setenta y practico Falun Gong”. Ella dijo: “No tienes arrugas en la cara y pareces como alguien de unos cincuenta”. Le dije: “Falun Gong es realmente maravilloso. Antes de que empezara a practicar Falun Gong, aparentaba tener setenta años cuando en realidad tenía sólo cincuenta. Parezco más joven debido a Falun Gong”. Entonces le dije los hechos sobre Dafa y le hablé de la piedra que tiene la frase “El partido comunista chino colapsa” grabada, la cual está en la provincia de Guizhou. Después le pregunté si quería renunciar al partido comunista chino (PCCh) y a sus organizaciones afiliadas, y accedió.

Dos señoras jóvenes que tenían lupus eritematoso una vez vinieron a mí, después de oír que mis enfermedades habían desaparecido al empezar la práctica de cultivación de Falun Gong. Les dije que Falun Gong no es para curar enfermedades, pero que los verdaderos practicantes pueden recuperar la salud y mejorar su estándar moral, y que puede salvar a la gente fundamentalmente. Después les di dos folletos y les dije: “Recuerda las nueve palabras que pueden salvar tu vida, y ser bendecidas por el Cielo”. También las ayudé a renunciar al PCCh y a sus organizaciones afiliadas.

Una de mis antiguas compañeras del colegio vino a verme y dijo: “Pareces tan joven, pensé que tenías diez años menos”. Le contesté: “Es porque practico Falun Gong, la cual es una práctica para la mente y el cuerpo. Ciertamente ofrece muchos beneficios”. Le hablé sobre los hechos de Falun Gong y le di algunos folletos de aclaración de la verdad. Al mismo tiempo, envié pensamientos rectos para eliminar todos los factores malvados que la estaban bloqueando para que supiera la verdad. Pedí ayuda al Maestro para salvarla. Después de que leyó los folletos, le pregunté si quería renunciar al partido. Finalmente accedió y dijo: “Iba a convencerte para participar en un negocio de venta piramidal. Pero me convenciste tu a mi para renunciar al partido”.

Soy una enfermera retirada del extranjero. Quizá porque cometí muchas malas acciones en mi vida pasada, mis padres fallecieron cuando era muy joven. Mi marido murió en 1999 y mi hijo se volvió enfermo mental después de eso. He tenido problemas de vesícula biliar, cálculos en el riñón, arritmia, insomnio y lupus eritematoso. Cuando había perdido toda esperanza y pensaba en acabar con mi vida, fue Falun Dafa lo que me salvó. Después de obtener el Fa, mis más de diez enfermedades desaparecieron y mi hijo se benefició de ello.

Durante los últimos trece años, he creído en el Maestro y en Dafa, y he sentido la compasión del Maestro. No he sido lo diligente que debería ser en mi cultivación, pero con el propósito de contarle a le gente cuán poderoso es Dafa, quería compartir mis propias experiencias.