[Minghui Net] Un día después del trabajo volví a mi alojamiento y encontré a mi compañero de trabajo con quien compartía piso viendo un documental sobre la arqueología de Tíbet. Me giré para echarle un vistazo y apareció una imagen en frente de mí. Era un templo en una montaña. Aunque era un templo, su estructura era la de una simple y raída cabaña de piedra. Han quedado muchos lugares históricos y reliquias de este antiguo reino perdido, las cuales son tanto misteriosas como fascinantes. Lo que vi era simplemente una casa de piedra entre ruinas, pero me tocó en lo profundo y me trajo a la memoria un recuerdo remoto.

Durante el periodo en el que Fo Fa fue difundido ampliamente en el antiguo Tíbet, se construyeron muchos templos en todas partes para que la gente rindiera culto y para que los monjes se entregaran a la práctica y a la cultivación. La construcción de esos templos era un magnífico y exquisito trabajo de arte. La sagrada cultivación de fo y los asuntos seculares estaban entrelazados el uno con el otro, sin embargo, la magnificencia de los templos no podía cegar a aquellos cultivadores que eventualmente los abandonaban para buscar el verdadero Fo Fa.

Algunos cultivadores caminaron un muy largo camino hasta lugares remotos y distantes buscando el templo más sagrado, que pudiera ofrecerles una práctica genuina. Después de numerosas decepciones uno de ellos, un hombre joven, de repente vio una casa que se alzaba en la cima de una montaña que no estaba muy lejos de donde él se encontraba. La casa estaba rodeada de nubes de luces sagradas. El joven estaba tan contento que se apresuró a escalar la montaña. Pensó que fue por su corazón sincero que los dioses le dirigieron a este templo sagrado. Después de mucho esfuerzo, alcanzó la cima de la montaña. Miró a su alrededor. A parte de una cabaña de piedra raída, sólo había un monje viejo que llevaba unas ropas harapientas, sentado en meditación. No encontró ningún templo sagrado en absoluto. Pero antes de llegar, había sido testigo de las nubes auspiciosas y las luces sagradas en la cima.

El hombre joven juntó sus palmas para ofrecer respeto budista al viejo monje y dijo: “Quiero cultivarme de verdad. He caminado una larga distancia para buscar un templo sagrado para la cultivación devota. Las luces sagradas me guiaron hasta aquí, pero no veo un templo magnífico. Por favor deme alguna pista sobre dónde puedo encontrar un templo tan sagrado”. El viejo monje lo escuchó en silencio y respondió calmadamente: “Está justo en tu corazón”. El hombre joven no entendió y quería hacer más preguntas. De repente, las nubes auspiciosas y las luces sagradas aparecieron y el viejo monje desapareció como un arco iris. La voz sagrada del viejo monje sonó como un eco y se repitió en el cielo: “Está en tu corazón”. La voz lentamente desapareció.

El hombre joven tenía muchas dudas, pero pensó que esta era su predestinación y no quería ir a ningún otro lugar. Se puso respetuosamente las ropas harapientas del viejo monje y fue al sitio donde el viejo monje había desaparecido y comenzó su cultivación. Aunque no entendía el significado, recordó firmemente las palabras del viejo monje. Reforzó su práctica con esas palabras y se quedó en la cabaña templo raída para practicar diligentemente. Día tras día y año tras año, su mente se abrió gradualmente y su sabiduría se incrementó enormemente.

Un día durante la meditación, se iluminó de repente a que el templo más sagrado se encuentra en el corazón del cultivador y que fue la fe recta la que hizo ese templo magnífico. Esos templos mundanos estaban llenos de rico incienso y estaban decorados con oro caro y plata. Sin embargo, el templo sagrado en el corazón de uno está decorado por la mente de cultivación diligente de uno. Llegó a entender claramente que hay un templo incompleto en el corazón de cada uno. La diferencia para un cultivador es cómo cultivarse para completar el templo en su corazón. Un cultivador es capaz de usar sus pensamientos rectos para construir poco a poco el magnífico templo en su corazón. Es lo más importante para un cultivador para que sus seres conscientes obtengan bendiciones eternas e infinita protección.

Versión en inglés:  http://pureinsight.org/node/6209

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