[Minghui Net] El 3 y 4 de septiembre de 2011 cualquiera que fuera el fin de semana al mercado en Ritterhude se encontraría con una escena bulliciosa. Aunque también se hubieran encontrado con la tierra pura de los practicantes de Falun Gong presentando la práctica a los visitantes y contándoles sobre la persecución en China.

Visitantes leyendo los carteles con información sobre la persecución


Firmando la petición contra la persecución

“¿Están seguros que no quieren aceptar donaciones?” Una joven madre de Kosovo preguntaba sorprendida. Luego escuchó cuidadosamente a una practicante que le contó sobre la práctica de los ejercicios. La practicante le dijo que Falun Gong es gratis, y que todos los materiales y libros de Dafa están disponibles para bajar gratis de Internet. A la pregunta de la joven, la madre contestó: “Sí, no aceptamos donaciones y no colectamos dinero ni bienes. Si estás interesada, puedes venir a aprender los ejercicios. No tenemos membrecías, no hay que pagar nada, y no hay restricciones en cuanto a quedarse o irse”.

La joven madre quería registrarse para la clase y esperaba que su hija pudiera aprender los ejercicios. En ese momento ya había dos niños aprendiendo los ejercicios en el lugar.  

 

Dos niños aprenden el quinto ejercicio de Falun Gong

 

El niño de diez años de edad, quería leer Zhuan Falun, libro escrito por el fundador de Falun Gong, el Sr. Li Hongzhi. Abrió la primer página y comenzó a recitar Lunyu. En una conversación con otra practicante, aprendió que los principios básicos de Falun Gong son Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Escuchó seriamente y asintió con entendimiento. “Si todos pudieran ser así, habría paz en el mundo”, exclamó el niño. Dijo que Verdad-Benevolencia-Tolerancia de Falun Gong son muy buenos.

El dueño del puesto de al lado estaba muy interesado en la información sobre Falun Gong. Se llevó algunos materiales y dijo que los leería con mucho cuidado en su casa. Luego le preguntó a una practicante por qué practicaba Falun Gong. Ella contestó: “Sufría de migrañas desde niña y practiqué muchos otros qigong. Aunque mi cuerpo estaba relajado, las migrañas no mejoraron. Luego intenté con la medicina occidental, medicina tradicional china y terapias naturales, como también otros métodos, pero ninguno funcionó. El único beneficio que obtuve fue dejar el alcohol, aunque no pude dejar de fumar.

Después de comenzar a practicar Falun Dafa, las migrañas desaparecieron en solo unas semanas. Aunque luego reaparecieron varias veces, pero eran muy livianas, así que ya no tuve que depender más de los analgésicos. El segundo cambio más grande fue que dejé de fumar. Antes, incluso durante mi embarazo, no pude dejarlo”. El niño preguntó: “¿Cuál es el secreto?”. La practicante contestó: “Falun Gong tiene una energía muy poderosa. Puede hacer posible lo imposible. Es difícil de explicar, es algo que tienes que experimentar tú mismo”.