La Sra. Liu Shuling torturada hasta la muerte en el campo de trabajo forzado de desintoxicación de la ciudad de Harbin

Nombre: Liu Shuling (刘术玲)
Sexo: Femenino
Edad: 55 años
Dirección: Localidad Nº 57, pueblo de Hongwei, ciudad de Qitaihe
Fecha de la muerte: 3 de julio de 2010
Lugar de detención más reciente: Campo de trabajo forzado de desintoxicación de la ciudad de Harbin（戒毒劳教所）
Ciudad: Harbin
Provincia: Heilongjiang
Persecución sufrida: Descarga eléctrica, palizas, tortura, limitación física, detención

[Minghui Net] La Sra. Liu Shuling y otros once practicantes fueron torturados en la quinta planta del campo de trabajo forzado de desintoxicación de la ciudad de Harbin, en la provincia de Heilongjiang desde el 1 hasta el 3 de julio de 2010. La Sra. Liu murió el 3 de julio. Según un testigo, estaba atada a una silla de hierro y murió después de que le aplicaran descargas con picanas eléctricas.

En 2008 la enviaron al campo de trabajo forzado de desintoxicación de la ciudad de Harbin, y se suponía que iba a ser liberada el 26 de julio de 2010.  Tenía moretones en su oreja izquierda y en el cuello. Su familia solicitó poder ver su cuerpo entero, para investigar más a fondo pero la policía no se lo permitió, y les dijo: “Si quieren ver todo el cuerpo, tiene que ser aprobado por un forense. Si siguen con una investigación, no pagaremos los gastos de su funeral y tendrán que pagar más de 8.000 yuanes de gastos médicos.

Durante ese periodo doce practicantes fueron torturados: Sra. Liu Shuling, Sra. Yu Xiaohua, Liu Hui, Ma Shufen, Liu Yanhua, Cheng Li, Wang Fengxia, Men Qiuyin, Ren Shuxian, Xie Wei, Gao Yumin y Sra. Tong Yaqin.

A continuación se expone un informe personal de un practicante, describiendo lo que ella experimentó y atestiguó en el campo de trabajo forzado de desintoxicación de la ciudad de Harbin, cerca de la muerte de la Sra. Liu.

 

Doce practicantes torturados en la quinta planta

Alrededor de las 13.00 h del 1 de julio, un grupo de guardias me tiraron al suelo, me esposaron y me patearon las piernas. Un guardia llamado Hei Jialun seguía escupiéndome en la cara. Luego me llevaron arrastras hasta la quinta planta.  

En el hall de la quinta planta, vi a la Sra. Yu Xiaohua. Tenía las manos esposadas detrás de la espalda a una silla de hierro. Le habían metido en la boca un trapo y estaba sellado con cinta adhesiva, la cual estaba muy bien puesta por alrededor de la cabeza.

Luego un guardia varón llevó arrastras a la Sra. Tong Yaqin hasta la quinta planta, la tenía agarrada del brazo mientras las manos las llevaba esposadas detrás de la espalda. Sentía muchísimo dolor, tenía la cara pálida y los ojos estaban cerrados herméticamente mientras lidiaba con el dolor.

Después de torturar a la Sra. Tong y a la Sra. Yu, los guardias vinieron hacia mí, y me esposaron a la silla de hierro que habían usado para torturar a la Sra. Yu. Empecé una huelga de hambre del 1 al 5 de julio. Otros practicantes únicamente hacían dos comidas al día, que consistían en un bollo seco al vapor y un vaso pequeño de agua. Los practicantes se quejaron de que en los vasos de agua había drogas desconocidas.

El 3 de julio, a todas las practicantes torturadas les hicieron un corte de pelo “fantasma”, lo cual significaba que le afeitaban la mitad de la cabeza. Esta era una táctica de humillación dejada por la Revolución Cultural. La guardia Zhang Chunjing ordenó a Li Dongxue, una reclusa culpable por prostitución, para que intencionalmente fuera poco cuidadosa al cortarle el pelo.

Gritos horribles

Las habitaciones de la quinta planta estaban precintadas, los cristales de las ventanas y las puertas estaban tapados con periódicos y todas las ventanas estaban cerradas. Me dijeron que la Sra. Liu Shuling estaba en la habitación contigua a la mía.

Probablemente fue el 2 ó el 3 de julio cuando escuché un grito horrible que venía de la habitación de Liu. Le pregunté a la guarda Zhang CHunjing qué era, y me contestó: “La puse en la silla de hierro”.

Entonces escuché un gemido desgarrador. Aunque las puertas y las ventanas estaban herméticamente cerradas, el sonido todavía se podía escuchar. La reclusa que me supervisaba y yo nos miramos una a la otra. Estábamos bastante nerviosas, y sabíamos que algo había pasado. Después de un rato, escuché a mucha gente haciendo mucho ruido entrando y saliendo de la habitación de Liu. Luego todo se quedó en silencio.

El doctor vino para informarse sobre mi estado físico. Pensé que era raro que de repente se preocuparan por mi salud. De imprevisto el 4 de julio me liberaron de la silla de hierro. Cuando me enteré de la muerte de Liu, me di cuenta de que los guardias tenían miedo de cualquier repercusión por su muerte, y por ello soltaron a los demás practicantes.

Más de 100 mujeres practicantes de Heilongjiang han sido brutalmente torturadas en el campo de trabajo forzado de desintoxicación de la ciudad de Harbin en casi diez años. Más de 90 practicantes siguen detenidas.

La Sra. Jiang Rongzhen, de 42 años, de la industria de maquinaria de carbón de la ciudad de Jixi, murió en noviembre de 2002 por tortura. Tenía moratones por todo el cuerpo, y marcas debido al maltrato por descargas eléctricas. Tenía un agujero en su frente, y un bulto en la parte posterior de la cabeza.

Versión en inglés: http://clearwisdom.net/html/articles/2010/11/30/121690.html