[Minghui Net] Soy Xiao Hui (seudónimo) de la localidad de Lalin, ciudad de Wuchang, en la provincia de Heiolongjiang, y he sido una trabajadora inmigrante durante años. Dejé mi pueblo natal en 2001 y encontré un trabajo en otra ciudad. Un día en el trabajo sentí un agudo dolor en mi abdomen. No pensé mucho en ello y continué trabajando. Unos días después sentía dolor en la espalda. Esta vez fui a ver a un doctor. Este me dijo que tenía apendicitis y un quiste en el ovario, en el lado izquierdo. Me operaron. Un doctor me dio una receta para antibióticos, y pensé que mi problema se había acabado.

En mayo de 2005 me fui a trabajar a otra ciudad. Poco después de agosto volví a sentir un dolor en mi abdomen. Tuve que volver a mi pueblo natal para ver a un doctor en el hospital. Los doctores encontraron cuatro quistes en el ovario, en el lado derecho, que quitaron operando. Pero sólo tres días después de la operación sufría de una infección del tracto urinario, e ingresé en el hospital por tercera vez.

En 2006 fui a trabajar a la ciudad de Dalian. Poco después sentí dolor en el abdomen nuevamente, esta vez peor que las dos veces anteriores. A pesar de las enormes dosis de pastillas e inyecciones, mi estado no mejoraba. Tuve que volver a mi pueblo y visité varios hospitales. El diagnóstico indicaba muchos problemas: una aguda infección pélvica, inflamación del endometrio y el cérvix uterino, erosión cervical, leucocitos anormales, una infección del tracto urinario, quistes cervicales, y un cáncer de ovario. Después de 18 días de tratamiento y habiendo pagado 20.000 yuanes de gastos médicos, los doctores me dijeron que operar no era una opción. Todo lo que podían hacer era recetar fármacos anti-cáncer, esperando que el cáncer no creciera demasiado rápidamente. Una vez en casa, apenas podía salir de la cama. No podía comer una comida normal, y ni digamos trabajar.

Estaba hundida y desesperada. Afortunadamente, en enero de 2007, uno de mis parientes, practicante de Falun Gong, me habló del increíble poder de Falun Gong y me invitó a probar la práctica. Decidí intentarlo. Primero vi un CD de aclaración de la verdad y me gustó. Luego leí el libro Zhuan Falun.

Había terminado de leer los tres primeros capítulos de Zhuan Falun y no sentía nada inusual, pero después de terminar el cuarto, un escalofrío atravesó todo mi cuerpo. Era como una gripe: estaba mareada y me dolía la cabeza, tenía náuseas, y me dolía el estómago y la espalda. Después de leer las nueve lecciones, me encontré completamente cambiada. Todos mis síntomas habían desaparecido. Me sentía genial. ¡Era tan increíble!.

Después de sólo diez días de leer y hacer los ejercicios me sentía como una persona nueva. Todas mis enfermedades desaparecieron sin dejar rastro. Podía comer normalmente y hacer trabajo manual como antes, y me sentía energética incluso cuando andaba. No podía imaginarme el increíble efecto que Dafa tendría sobre mí. Todos mis problemas de salud se solucionaron sin gastar un céntimo. Era realmente un milagro.

Mi familia y yo estamos muy agradecidos a Dafa y a los practicantes. Agradecemos a Shifu por darme una segunda vida.

Fecha de edición: 11/1/2009
Fecha del artículo original: 9/1/2009
Versión en inglés: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2009/1/9/103750.html