[Minghui Net] Recientemente y con el pretexto de los próximos Juegos Olímpicos, el Partido Comunista Chino (PCCh) ha intensificado la persecución a Falun Gong. De acuerdo con estadísticas incompletas, desde finales del año pasado hasta el 30 de junio de 2008 se han producido 8.037 arrestos relacionados con practicantes de Falun Gong e informes de practicantes torturados hasta la invalidez permanente o la muerte no dejan de aflorar. Durante el mes de julio de este año se ha registrado un incremento constante de informes publicados en el sitio web Clearwisdom referente a estos acontecimientos y el régimen gobernante esta tornándose cada vez más desenfrenado en términos de arrestos masivos.

Aproximadamente 10.000 practicantes de Falun Gong han sido ilegalmente detenidos durante los últimos seis meses, sumándose así a las decenas de miles que están en prisión, campos de trabajos forzados, campos de concentración y hospitales psiquiátricos. Todo esto constituye el mayor desastre mundial en cuanto a derechos humanos. Todo esto sucede en el centro de la sociedad china y justo debajo de las narices de los responsables del Comité Olímpico Internacional. Esta situación ha sido comunicada una y otra vez a las personalidades políticas y oficiales que planean asistir a los Juegos Olímpicos de Pekín. Además esta persecución está siendo financiada con la sangre y el sudor del pueblo chino y con constantes inyecciones de capital provenientes de grupos financieros de distintos países en la economía del régimen comunista. Aún peor es que los principales objetivos de la persecución son practicantes de Falun Gong que siguen los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, personas que se han ganado el respeto, los elogios y el reconocimiento en todo el mundo.

Ante la evidencia de semejante desastre en términos de derechos humanos, muchos espectadores todavía hacen oídos sordos. Con el objetivo de proteger sus intereses económicos, barnizan la maldad del PCCh y la embellecen, estimulando su valor e inyectando los fondos que les permita sobrevivir durante su constante declinación. Mucha gente en China, ciegamente condicionados por el PCCh, siguen absolutamente decididos al malvado régimen en la persecución a Falun Gong. Odian a Falun Gong y están poseídos por espíritus malignos. Han perdido por completo todo sentido común y han quedado reducidos a meros lacayos del violento régimen. Otros, a pesar de simpatizar con Falun Gong y aterrorizados por el poder despótico, hablan en contra de su conciencia y voluntad. No se atreven a dar un paso adelante para exponer los hechos y pedir justicia.

La situación fuera de China es diferente, la mayoría de los gobiernos, grupos e individuos de muchos países disfrutan de libertad de expresión y tienen canales a través de los cuales ejercer presión. Tienen el poder necesario para parar la persecución, pero se contentan con una idea superficial de los derechos humanos y una falsa fachada de libertad y justicia. Como sólo se preocupan de sus propios intereses nacionales, hacen oídos sordos a las atrocidades cometidas por el PCCh.

Por ejemplo, las autoridades y la policía de Macau actuaron como si fueran a la guerra sólo porque un grupo de personas quería llevar a cabo la protesta de "La Antorcha de los Derechos Humanos". La deplorable conducta de las autoridades y policía fue más que suficiente para revelar cuán rápida y profundamente se han posicionado junto al régimen comunista. "Eutelsat", con el objeto de obtener un supuesto beneficio monetario procedente del PCCh, conspiró para usar New Tang Dinasty Televisión (NTDTV) como un títere desde el principio, e incluso fue tan lejos como para cortar repentinamente la emisión de NTDTV en China en Junio de 2008 alegando anomalías técnicas como excusa. El calibre moral, ético y los principios empresariales de Eutelsat han quedado reducidos a la nada. Cuando los oficiales africanos acudan a la "extravagancia" y cuando el PCCh ofrezca un alto precio, gustosamente pasarán a formar parte de la camarilla. Los asiáticos son el siguiente blanco de los comunistas y aquellos han estado inquietos ante el enorme monstruo con el que no es nada fácil lidiar. Es posible que realmente no haya alternativa real para ellos más que congraciarse con el régimen comunista. Pero ¿que hay de los responsables políticos de Europa y EE.UU.? Ellos tienen plataformas e influencia suficiente como para presionar a los comunistas y una bandera de justicia y libertad suficientemente grande como para influir en otras partes del planeta. Pero eligen ayudar al villano en sus maldades y están muy ocupados en ganarse el favor del régimen ligándose así con los Juegos Olímpicos de Pekín, los matones del PCCh y la ultima dinastía roja.

Causa y efecto están predestinados de acuerdo con los principios celestiales, y no hay excepciones para culturas orientales u occidentales. Se puede predecir que todos aquellos que se hayan ganado el favor del régimen, tendrán que pagar doble, y todos los que esperan conseguir beneficios de él, al final, no conseguirán nada. Todos aquellos que directa o indirectamente reforzaron y ayudaron a intensificar la persecución serán vistos como cómplices a los ojos de los dioses y sufrirán el mismo destino que el régimen. Aun más aterrador es que algunos chinos residentes en China han oído o presenciado brutales ejemplos y aún así han actuado como matones a sueldo o han tomado una pasiva actitud ante las atrocidades. ¿Cómo posicionarán los dioses y la futura China a esta gente?

Mucha gente no entiende por qué frecuentes desastres sacuden no sólo China, sino al mundo entero. ¿Por qué es que entre la gente de China mueren cientos, decenas de miles o millones de personas en accidentes de tráfico, terremotos y epidemias? ¿Por qué advertencias celestiales se suceden no sólo en China sino a lo largo de todo el mundo? ¿Por qué hay que difundir los hechos acerca de Falun Gong en todo el mundo y a todos los seres humanos? Porque los dioses toman las actitudes y acciones de las personas hacia Falun Gong muy seriamente. Éste es un criterio clave para alcanzar el reino divino y los dioses miran en el corazón de las personas. Ésta es una oportunidad para las personas y para la humanidad como un todo para determinar si serán afortunados o desafortunados, si se hundirán o ascenderán. Durante este proceso, quien haya jugado un papel negativo atraerá hacia sí el desastre y también hacia su grupo o país, y estos desastres ya están sucediendo, uno detrás de otro. ¿Quién puede garantizar que desgracias aun mayores no seguirán ocurriendo? A los ojos del cielo, el mundo está en situación de emergencia y el desenlace dependerá del corazón de la gente.

Piénsenlo, casi 10.000 personas han sido ilegalmente detenidas en los últimos seis meses y decenas de millones perseguidas en los últimos nueve años. Practicantes de Falun Gong y gente con sentido de justicia han estado clarificando los hechos al mundo entero desde el principio, durante este tiempo augurios, señales inusuales y advertencias han aparecido para despertar la conciencia de la gente. Si tras estos avisos la gente aún no despierta y son incapaces de ver la perversa naturaleza del PCCh, o son reacios a dar un paso adelante y expresar su oposición a la persecución, entonces, ¿cómo serán valorados a los ojos de los dioses los países más relevantes, sus gobernantes y otros grupos e individuos?

Un buen consejo rechina al oído y la buena medicina sabe amarga. Para la gente que es testaruda e indiferente hacia estos hechos ciertamente habrá desastrosas consecuencias, éstas habrán sido elegidas por ellos mismos. Aquellos individuos insensibles y apáticos, que han sido envenenados por el lavado de cerebro comunista, que desprecian la moral en favor de la ganancia, que bailan con el mal y ayudan al poder tiránico a hacer perversidades, ¿qué pueden esperar al final, excepto una dosis de su propia fruta amarga? El número de este tipo de personas no es pequeño y su futuro preocupante. Los dioses son compasivos, pero no pueden esperar eternamente que los malhechores se iluminen.

Fecha de edición: 10/08/2008
Fecha del artículo original: 30/07/2008

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