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Este es un artículo publicado el 28 de mayo de 2008, en el LEst Republicain, un periódico de la parte del este de Francia.

El artículo fue escrito después de una conferencia en Nancy sobre Falun Gong el 19 de Mayo de 2008. Invitaron a Feng Yajun una practicante de Falun Gong que se escapó de la persecución en China, también invitaron a Michel Wu, ex jefe de la rama china de Radio Francia Internacional, y Alain Tong, Presidente de la Asociación Falun Gong en Francia.

LEst Republicain

27 de Mayo de 2008

Una práctica reprimida

Las emociones son fuertes. Las memorias reviven las cicatrices frágiles dejadas por la tortura, la prisión, y la muerte. Pero a pesar de todo, Feng Yajun, de 39 años, nacida en la provincia de Liaoning en China, está firme en su nueva lucha como testigo del genocidio de una práctica que ahora está prohibida en China.

Es difícil mantenerse indiferente

La historia comienza en 1992 con la introducción de Falun Gong, un movimiento espiritual inspirado en el budismo. "Mi familia y yo practicábamos este método tradicional de qigong similar al Tai Chi y al Yoga. En 1997 mis padres compraron la Librería Paraíso, en donde almacenábamos documentos ligados al método que es practicado por más de 100 millones de personas alrededor del mundo.

El entusiasmo general sin embargo incomodaba al Partido Comunista Chino (PCCh). Los practicantes eran más numerosos que los miembros del PCCh. Había además, miembros del PCCh que también practicaban. Con la prohibición en julio de 1999, la Librería Paraíso se volvió un infierno. La Oficina 610 fue establecida por las autoridades con una meta: suprimir a todos los "disidentes" en el país.

"Nuestra librería se fue a la bancarrota, nuestro hogar fue saqueado, mis padres fueron encarcelados y torturados hasta la muerte, mi hermano buscado, y yo he pasado dos años de trabajo forzado en un lugar manchado con sangre. "

Su voz es consumida por la emoción, Yajun continúa contando su historia con palabras muy reales: persecución, detenciones, tortura, traficantes de órganos y lavado de cerebro. Los hechos son aplastantes.

A su lado, para la conferencia de la tarde organizada por la asociación de Maitreya, se encuentra Michael Wu de China RFI, y Alain Tong, Presidente de la Asociación de Falun Gong en Francia, que dice, "Hasta el día de hoy, han torturado a 3150 personas hasta la muerte. Al movimiento lo llaman una secta. Es pura difamación por el régimen para justificar su represión. Una de nuestras misiones es luchar contra la injusticia y clarificar la verdad. Con tales actos, los derechos humanos son pisoteados y mucha gente inocente sufre. Esto tiene que parar. "

Es difícil seguir manteniéndose indiferente frente a tales hechos, una lucha que defiende tres valores fundamentales: Verdad, Compasión, Tolerancia.

Fuente: http://clearharmony.net/articles/200806/44744.html

Fecha de artículo original: 12/06/2008

Categoría: Referencias