[Minghui Net]

1. Síntomas de infarto cerebral desaparecen milagrosamente después de 7 días de cultivación

Mi hermano menor, Zhiming, sufría desde hacía dos años un infarto cerebral causado por hipertensión. Él no podía cuidar de sí mismo, y fue muy difícil porque estaba en un estado vegetativo y no daba indicios de mejoría aunque le inyectaban y tomaba medicinas todos los días. Fue un milagro que cuando él me vio al regresar a casa, se puso consciente y su cara se mostró sonriente. Juntos regresamos a nuestro pueblo en el campo.

En la noche, mi hermano escuchó la cinta grabada con las conferencias del Maestro y se sintió mejor. Al siguiente día, comenzó a estudiar «Zhuan Falun». Cada vez que finalizaba de leer un párrafo, se detenía para compartir conmigo su entendimiento acerca de ese párrafo. Luego le enseñé los ejercicios. Haciendo los ejercicios y estudiando el Fa, el benevolente Maestro purificó el cuerpo de su estudiante. Después de haber practicado Falun Gong por sólo una semana, se recuperó completamente de la enfermedad que había sufrido por varios años. Pudo montar en bicicleta e incluso ayudar a otros en sus trabajos. A quien quiera que veía le decía que ¡Falun Gong es verdaderamente fantástico!

Cada día antes del amanecer, se levantaba para hacer los ejercicios. Durante la luz del día, trabajaba y estudiaba el Fa cada vez que tenía tiempo libre. En la noche, escuchaba las cintas de grabación de las conferencias del Maestro y fue muy diligente. Toda la familia le agradece al Maestro desde lo profundo de sus corazones por haber salvado la vida de mi hermano.


2. El Maestro hace desaparecer la lluvia

Un día, nuestra familia salió al campo para cosechar el arroz, y sólo mi hermano y yo nos quedamos en casa. Dejamos que el arroz se seque al sol, y cuando no teníamos nada que hacer, entrábamos a estudiar el Fa. Vimos que el día se tornaba oscuro y estaba por llover. Una inmensa nube negra estuvo suspendida sobre el lugar donde estaba la cosecha. Mi hermano estaba tan preocupado que iba de acá para allá. En ese momento, me calmé y junté mis manos. Le pedí al Maestro que nos ayudara, diciéndole en mi corazón: "¡Maestro! Nos sería un pesar si la cosecha es estropeada por la lluvia. Maestro, por favor aleja la lluvia hasta después que hayamos cosechado el arroz". Tan pronto terminé mis palabras, escuché un ruido "bang", y las nubes de lluvia se dispersaron en todas las direcciones. Sobre el campo de cosecha había un sol brillante. Mi hermano y yo ubicamos el arroz cosechado en canastos y los pusimos dentro de la casa. Justo cuando terminamos de poner en orden todo el arroz cayó una fuerte lluvia. Pusimos nuestras manos juntas y le agradecimos al Maestro.

(Versión en chino: http://www.minghui.ca/mh/articles/2004/11/23/89783.html)
(Versión en inglés: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2004/12/9/55403.html)


Fecha de edición: 25/6/2006Fecha del artículo original: 23/11/2004