(Minghui.org) Después de haber cumplido dos condenas en un campo de trabajo y una en la cárcel, un exprofesor de matemáticas de Beijing fue condenado de nuevo por su fe en Falun Dafa, una disciplina espiritual perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.
El Sr. Li Lanqiang, de 58 años, fue detenido el 23 de abril de 2021, después de ser denunciado por distribuir material informativo sobre Falun Dafa. Recientemente, el sitio web Minghui.org ha confirmado que ha sido condenado a cinco años por el Tribunal del Distrito de Fangshan. No están claros más detalles de su reciente sentencia.
El Sr. Li Lanqiang
Antes de su última condena, el Sr. Li fue detenido, encarcelado y torturado repetidamente durante las dos últimas décadas por mantenerse firme en su fe.
Fue detenido por primera vez en agosto de 1999 cuando protestaba contra la persecución en la plaza de Tiananmen. A su regresó al trabajo tras 15 días de detención, su empleador, la Escuela Media Taipinglu del distrito de Haidian, en Beijing, no le permitió seguir dando clases y lo reasignó a trabajar como portero.
A principios de diciembre de 2001, lo llevaron a una sesión de lavado de cerebro y lo mantuvieron allí durante 20 días. La escuela pagó 8.000 yuanes por su "inscripción" y gastos de manutención. Como se negó a renunciar a Falun Dafa, la policía saqueó su casa en febrero de 2002, se llevó sus enseñanzas de Falun Dafa copiadas a mano y le impuso una condena de un año y medio en un campo de trabajo.
fue golpeado por los guardias del Campo de Trabajo Forzado de Tuanhe el 5 de diciembre de 2002, cuando se negó a someterse al registro corporal. El guardia Yue Weihua le dijo: "Te estoy golpeando. ¿Qué hay de malo en hacerlo? ¿Puedes hacerme responsable de ello?".
Poco después de ser liberado, fue detenido de nuevo en noviembre de 2004 y le impusieron otros 2,5 años en el mismo Campo de Trabajo Forzado de Tuanhe. Los guardias ordenaron a los reclusos que le vigilaran, le hicieran pasar hambre y le restringieran el uso del baño. Cuando se negó a renunciar a Falun Dafa, le obligaron a sentarse en un pequeño taburete durante más de diez horas al día sin moverse. Como consecuencia de ello, se le enconaron las nalgas. A veces, otros tres reclusos se sentaban cerca de él, lo que le impedía moverse. En el caluroso verano, los guardias cerraban la ventana de la habitación de 8 metros cuadrados en la que se encontraban el Sr. Li y tres reclusos, que se negaban a proporcionarle agua.
Fue detenido el 20 de abril de 2016 y compareció ante el Tribunal del Distrito de Fangshan el 9 de febrero de 2017. Mientras esperaba a ser llevado de vuelta al centro de detención, un oficial no le permitió hablar. El Sr. Li preguntó qué ley le prohibía hablar. El oficial le dijo: "No hables de la ley conmigo. Yo soy la ley". Ordenó a los alguaciles que le dieran descargas eléctricas con picanas eléctricas. El Sr. Li sufrió graves quemaduras en el lado derecho del pecho. El agente también le golpeó la cabeza contra la pared y le hizo sangrar al caer como consecuencia del dolor de las descargas eléctricas.
El 27 de octubre de 2017 fue condenado a tres años y a una multa de 7.000 yuanes. Apeló ante el Tribunal Intermedio de Beijing y este decidió mantener su sentencia original el 14 de diciembre.
Lo llevaron a la prisión N.º 2 de Beijing a finales de enero de 2018, antes de trasladarlo a la Prisión de Qianjin el 28 de febrero. Fue liberado el 19 de abril de 2019.
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