(Minghui.org) Hace unos dos años, el hermano de mi esposo me llamó una noche y me dijo que llevaba dos días con una fiebre de 39°C (102°F). Me preguntó: "¿Qué crees que debo hacer? ¿Debo ir al hospital?". Me sorprendió que me llamara para pedirme consejo, ya que no éramos tan amigos. Pensándolo bien, me di cuenta de que era muy arriesgado para un hombre mayor, tener fiebre alta, así que yo debía tomarlo con cuidado. Le pregunté cuál era la causa de la fiebre. Me dijo que la fiebre había aparecido después de regresar de nadar.

Como mi cuñado tiene un cuerpo muy sano, le dije: "Hermano, no te preocupes. Esta noche es un poco tarde. Descansa bien y bebe más líquidos. A ver qué pasa mañana. Tal vez mañana se te pase la fiebre, pero si sigues teniendo fiebre, deberías ir al hospital". Estuvo de acuerdo.

Mi cuñado no me llamó al día siguiente, así que supuse que le había bajado la fiebre. Sin embargo, hacia las siete de la noche volvió a llamarme y me dijo que seguía teniendo fiebre alta. Empecé a tomarme el asunto en serio, ya que tenía más de 70 años y llevaba tres días consecutivos con fiebre. Le dije: "Espérame, iré a visitarte ahora mismo". Hice la maleta, tomé el libro Zhuan Falun y me dirigí a su casa.

Mi cuñado era un destacado funcionario de alto nivel del Partido Comunista Chino (PCC) y llevaba decenas de años en el Partido. Estaba adoctrinado con muchos ideales del Partido, como el ateísmo y la teoría de la evolución. Ya le había aclarado la verdad, pero en aquel momento no pareció tomarlo seriamente y se veía desinteresado. Tanto mi cuñado como su esposa se preocupaban mucho por su salud y compraban muchos productos para mejorar la salud.

Aun tras utilizar numerosos productos para la salud, a mi concuñada le diagnosticaron atelectasia, una falla parcial del funcionamiento pulmonar, y hace un par de años fue hospitalizada en numerosas ocasiones. Cuando me enteré de su estado, la visité y la consolé. Parecía muy débil y me dijo: "He tomado diferentes tipos de medicamentos y ninguno parece funcionar bien. Dejaré mi destino en manos de los dioses".

Le dije: "Mírame. En el pasado tenía un cuerpo débil. Durante más de 20 años he cultivado Falun Dafa, y me convertí en alguien saludable y no he ido a ver a los médicos. No necesito ninguno de esos productos de salud. Estoy sana y en forma porque cultivo Falun Dafa. Falun Dafa se basa en los principios universales de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Esta práctica es beneficiosa para la salud.

Mi concuñada me escuchó atentamente mientras le aclaraba la verdad. Después de ayudarla a renunciar al PCCh y a sus organizaciones juveniles, le pregunté si deseaba practicar las cinco series de ejercicios de Falun Dafa. Quiso aprender los ejercicios y realizó el primer ejercicio de pie. No podía hacer los movimientos correctamente debido a sus malestares. Le dije que recitara sinceramente "Falun Dafa es bueno. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Después de esta experiencia, mi cuñada empezó a recitar "Falun Dafa es bueno. Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno" todas las mañanas al despertarse. Cuando volví a visitarla, se había convertido en una persona diferente y se veía mucho más sana. Cuando los médicos la revisaron de nuevo no le detectaron ningún problema y me dijo que no necesitaba tomar más medicamentos.

Tal vez mi cuñado estaba impresionado por los cambios físicos de mi concuñada. Me imaginé que esa era la razón por la que me había llamado para pedirme consejo. Creo que las maravillas y los milagros de Dafa le ayudarán si tiene una relación predestinada con Dafa.

Eran las 8 de la noche cuando llegué a su casa. Las mejillas de mi cuñado estaban todavía muy rojas y rosáceas, lo que indicaba que todavía tenía mucha fiebre. Le pedí que comprobara su temperatura, y todavía era de 39,3 °C (102 °F). Le dije: "No te preocupes. ¿Por qué no te sientas y te leo el libro Zhuan Falun?". Se sentó en el sofá y me escuchó mientras leía Zhuan Falun. Le dije que despejara su mente y relajara su cuerpo. Mientras leía, se sentía muy tranquilo y calmado.

Mi cuñado se tomó la temperatura después de que yo leyera varias páginas de Zhuan Falun. Había bajado a 38,5 °C (unos 101,3 °F). Mi concuñada se alegró mucho al ver que estaba mejorando. Leí otras 20 páginas y su temperatura disminuyó a 37 °C (98,6 °F). Mi cuñado estaba muy contento, se levantó del sofá y dijo: "Qué bueno. Ya estoy bien".

El proceso entero para que su temperatura volviera a ser normal, duró aproximadamente una hora. Mi cuñado no tomó ninguna medicación ni fue al hospital. Esa noche, mientras me preparaba para salir, pude ver que mi cuñado de verdad creía en Dafa. Le dije que descansara bien y que recitara sinceramente "Falun Dafa es bueno". “Verdad- Benevolencia-Tolerancia es bueno". Aceptó felizmente.

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