(Minghui.org) Cinco personas de mi ciudad natal en la provincia de Hebei fueron operadas de cáncer de estómago en el Hospital del Puerto de Qinhuangdao en julio de 2014. Uno de ellos era el señor Zhao, que se consideraba en el estado más grave. Los médicos pensaron que le quedaba menos de un año. De hecho, las otras cuatro personas hace tiempo que fallecieron, y solo el Sr. Zhao sigue vivo y sano.

El Sr. Zhao tiene 63 años y tres hijos. Ha trabajado duro toda su vida para mantener a su familia. Hace siete años, le empezó a doler el estómago después de comer, y luego empezó a vomitar después de comer. Le diagnosticaron un cáncer de estómago en fase terminal, que ya se había extendido a los órganos cercanos.

Entonces solo tenía 56 años, y su familia sintió que el cielo se caía. Para intentar salvarle, vaciaron su cuenta de ahorros y pidieron un préstamo para que le operaran.

Después de la operación se sentía fatal y no podía comer, se mantenía vivo solo con una sonda de alimentación nasogástrica. Estaba débil y tenía mucho dolor. Tomó muchos analgésicos, pero apenas le aliviaron. Fue a ver a un adivino que le dijo que le quedaban unos seis meses de vida. Comenzó a prepararse para su descanso final.

Un día, fue a una farmacia con su familia. Los propietarios eran una pareja que practicaba Falun Dafa. Al verle en tal miseria, le aconsejaron que recitara sinceramente las frases auspiciosas "Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno". Le hablaron de muchas personas que se habían recuperado de todo tipo de dolencias recitando las frases.

El señor Zhao y su esposa se alegraron mucho al oírlo. Volvieron a sentirse esperanzados. Los dueños de la farmacia también dijeron: "Es el destino que nos hayamos encontrado hoy. Esperamos que se recupere pronto".

El señor Zhao y su esposa fueron a la farmacia muchas veces después de eso. Aprendieron más sobre Falun Dafa y la persecución del Partido Comunista Chino (PCCh). Renunciaron al PCCh y a sus organizaciones. El Sr. Zhao había estado diciendo diligentemente las frases diariamente cada vez que tenía la oportunidad y su mejora era notable. Era capaz de comer sopa de arroz y podía tragar sin problemas.

Un día, un jefe de policía llegó a su pueblo para investigar a un practicante de Falun Dafa. El señor Zhao respondió: "¡Tienen que irse! Los practicantes de Falun Dafa no hacen nada ilegal. ¿Por qué los persiguen todo el tiempo? No puedo ayudarlos con ninguna información. Adiós".

Volvió al hospital para un seguimiento en el otoño de 2019. El oncólogo se quedó boquiabierto: "¡Sigues vivo después de seis años! ¡Tienes un aspecto saludable! ¿A qué hospital has ido?¿ Qué te han recetado?".

El Sr. Zhao se rió a carcajadas: "No tomé nada; me mejoré diciendo: 'Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno'". Su esposa añadió: "Sigue diciendo las frases con diligencia. ¡Realmente funciona! Es capaz de trabajar como antes". Todos los médicos quedaron impresionados.

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