(Minghui.org) Cualquiera que fuera a su casa habría visto a su padre, que tiene 89 años, y a su suegro, de 92.

Ella tiene cinco hermanos y su esposo tiene seis, por lo que había mucha familia con la que los dos ancianos podrían haber vivido, pero querían vivir en la casa de Lian, de 50 años. ¿Por qué? Porque tanto ella como su marido practican Falun Dafa.

La persecución perturbó dos veces a su pacífica familia

Comenzó a practicar Falun Dafa en 1994, y su esposo en 1995. Fue en 1995 cuando trajo a sus suegros del campo para vivir con ellos.

Lian era muy respetuosa con sus suegros. Su suegro no tenía buena higiene cuando venía del campo, escupía en el balcón, se limpiaba la nariz con las manos y tiraba basura por todas partes. Ella nunca se quejó. Ayudaba a su suegra cortándole las uñas y el cabello. También la llevaba al baño público a bañarse. (La mayoría de las personas en China no tienen instalaciones para bañarse donde viven). Alguien le preguntó a su suegra con envidia: "¿Es esta tu hija?" Ella dijo con una sonrisa: "¡Ella es mi nuera y es mejor que mi propia hija!" Los suegros se ocupaban de las tareas del hogar mientras ella y su marido iban a trabajar. La familia estaba contenta.

Hasta 1999, cuando el partido comunista chino (PCCh) comenzó a perseguir a Falun Dafa. El esposo de Lian fue encarcelado ilegalmente por no renunciar a su fe en los principios Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Ella iba a trabajar durante el día y cuidaba a sus suegros cuando llegaba a casa.

Un año después, fue detenida ilegalmente y llevada a un campo de trabajos forzados porque se negó a renunciar a sus creencias. Por culpa de esta cruel persecución esta familia feliz quedó destrozada. En 2001 su suegra murió de tristeza al no poder soportar estar separada de su hijo y su nuera. Su suegro fue recogido y cuidado por su hija mayor.

Después de haber cumplido su tiempo en el campo de trabajo, ella regresó a su hogar, limpió y fregó su casa polvorienta y trajo de vuelta a su suegro desde la casa de su hija mayor. Lo cuidó sola, cocinó la comida que le gustaba, le compró ropa cómoda y conversó con él para consolar su corazón solitario. Bajo su afectuoso cuidado, comenzó a sonreír de nuevo. Cuando su marido regresó a casa de la prisión, el anciano se sintió muy reconfortado al ver a la pareja reunida.

Cuidadosamente atendido por ambos, el cuerpo y la mente del anciano regresaron al buen estado en el que se encontraba antes de que comenzara la persecución. Tanto Lian como su esposo encontraron buenos trabajos y reanudaron sus vidas pacíficas.

Menos de cinco años después, en vísperas de los Juegos Olímpicos de 2008, los funcionarios del PCCh temían que ambos practicantes hicieran una petición a favor de Falun Dafa y los arrestaron por cargos injustificados. Ella estuvo recluida en un campo de trabajos forzados durante dos años y él fue encarcelado ilegalmente. ¡Esta buena familia se rompió de nuevo!

De hecho, ella fue arrestada mientras esperaba en el hospital a que su suegro fuera operado de cataratas. El no supo que la policía se la había llevado hasta que su hija llegó al hospital al día siguiente. El anciano lloró, extrañando mucho a su hijo y a su nuera.

Cuando ella regresó después de haber cumplido su tiempo en el campo de trabajo, recogió a su suegro y lo llevó de vuelta a su casa. Los aldeanos sabían que el anciano tenía una nuera cariñosa que practicaba Falun Dafa. Estaban impresionados, y algunos incluso tenían envidia.

Los padres de Lian vivían en la casa que había quedado vacía de su hija mayor. Unos días después su marido fue liberado de prisión, el vio un aviso para pagar la factura de la calefacción publicado en la puerta de la casa de sus suegros. Sabía que no tenían ingresos y no querían molestar a sus hijos, así que reunió todo el dinero que tenían (alrededor de 2500 yuanes) y pagó la factura de la calefacción sin dudarlo. Cuando su suegro se enteró de esto, se conmovió y le dijo a su esposa: “Este hombre acaba de regresar de la prisión. No tiene trabajo ni ingresos, pero pagó nuestra factura de calefacción”. Varias otras familias se enteraron de esto y también se sintieron muy conmovidas.

A los dos ancianos les gustaba vivir en la casa de Lian

En febrero de 2017, nació su segundo sobrino. Su hermano se hizo cargo del bebé y de su esposa, pero no podía cuidar también de sus padres ancianos. Como su madre estaba delicada de salud, llevaron a sus padres a casa para cuidarlos. En mayo, su madre falleció. Su hermana mayor quería llevarse al padre a vivir con ella, pero el anciano de 86 años quería vivir con Lian porque practicaban Falun Dafa y lo cuidaban bien.

Para facilitar las cosas a los dos ancianos, vendieron su apartamento en el cuarto piso y compraron un apartamento de tres habitaciones y dos salas de estar en el primer piso. Los dos ancianos tenían cada uno su propia habitación cómoda y soleada. Compartían un gran salón para ver la televisión.

Cuando las flores florecieron en primavera, el matrimonio llevaba a los ancianos al parque para disfrutarlas. A veces los acompañaban a ver los festivales al aire libre. El esposo de Lian los llevó al lugar donde vivían antes para cortarse el pelo, porque allí se hacían buenos cortes y eran económicos. Eso les hizo muy felices. En casa, su marido se turnaba para bañar a los hombres, y ellos lo supieron apreciar. Todos en la familia se llevaban bien y los vecinos los envidiaban. Sus hijos, nietos y sobrinos venían a menudo de visita. Motivados por la amabilidad y el respeto mutuo que vieron en la familia, compraron ropa, zapatos y regalos para los dos hombres cuando vinieron de visita. Las dos familias se llevaban bien. ¡Los vecinos dijeron que una gran familia armoniosa como esa era realmente inusual en estos tiempos!

El respeto filial es una tradición que viene de antiguas generaciones. ¿Cuántos jóvenes lo entienden ahora? Esos jóvenes que practican Falun Dafa sí lo entienden.

El año pasado, la familia regresó a su ciudad natal para asistir a la boda de un sobrino. Su suegro quería quedarse en la casa de la hermana mayor por unos días. Al tercer día, la hermana mayor llamó y dijo que su padre estaba resfriado. Unos días después, el esposo de Lian llevó a su padre a su casa y luego lo llevó al hospital. El doctor dijo que había tenido un infarto masivo. Como era muy mayor y tenía insuficiencia cardiaca, no se solicitó cirugía. Falleció a la edad de 92 años.

Los aldeanos dijeron que fue un funeral alegre. El anciano falleció en tan solo unos pocos días; su apariencia era pacífica y relajada.

De su pequeña pensión mensual, de los regalos de familiares y amigos en sus cumpleaños a lo largo de los años, había ahorrado casi 50.000 yuanes. Después del funeral, el matrimonio dividió el dinero en partes iguales entre sus hermanos y hermanas.

Más tarde, en una reunión familiar, su cuñada dijo en el banquete: “De ahora en adelante, toda nuestra familia aprenderá Falun Dafa”. Este año en la casa de su hermano mayor, su cuñada dijo con emoción a más de 20 familiares: “Nuestra gran familia está muy feliz. En el futuro, espero que las mujeres aprendan de Lian y los hombres aprendan de su esposo”. Lian agregó: “Todos aprendemos de Falun Dafa”. ¡Todos hablaron y se rieron, estaban felices!

Después de que Lian y su esposo aprendieron Falun Dafa, los cambios en ellos afectaron a toda la familia. Algunos leen libros de Falun Dafa y otros escuchan las enseñanzas del Fa en audio del Maestro Li (el Fundador de Falun Dafa). La hermana mayor originalmente se opuso a Falun Dafa, pero cambió mucho más tarde. Cuando fue a su casa, ella personalmente compró y ofreció fruta fresca al retrato del Maestro Li. Otros miembros de la familia admiran Falun Dafa desde el fondo de sus corazones y están agradecidos con Shifu.

¡Estoy tan feliz de que tanta gente entienda la verdad sobre Falun Dafa!

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