(Minghui.org) El Sr. Yang Guoxian, analista de sistemas informáticos en Houston, habló de cómo la práctica de Falun Dafa le ayudó a ver el verdadero propósito de la vida.

Se graduó en la Universidad Nacional Yangming Jiaotong de Taiwán y luego obtuvo su maestría en ingeniería industrial en la Universidad del Sur de California en 1994. La primera vez que conoció Falun Dafa fue a través de un folleto que recogió en un supermercado chino en 1997. Esto plantó la semilla para su viaje de cultivación.

Guoxian hace el quinto ejercicio de Falun Dafa, la meditación sentada.

Guoxian y su hijo leyendo Zhuan Falun.

Cuando Guoxian y su esposa visitaron a su familia en Taiwán en el año 2000, se celebraba en Taipéi una Conferencia de Intercambio de Experiencias de Falun Dafa. Más de 3.000 practicantes de 18 países asistieron a esa conferencia del 23 al 26 de diciembre. Muchos medios de comunicación de Taiwán informaron del evento y de cómo el PCCh (Partido Comunista Chino) perseguía a los practicantes de Falun Dafa en China.

Guoxian se sorprendió al saber que Falun Dafa se practicaba en tantos países. Pensó que debía ser una práctica extraordinaria, por lo que se interesó en aprenderla. De regreso a Estados Unidos, Guoxian y su esposa conocieron a dos practicantes de Falun Dafa en el mismo vuelo que les dijeron dónde podían aprender los ejercicios.

Antes de que comenzara la persecución a Falun Dafa en China, en 1999, solo había unos cientos de practicantes en Taiwán. Después, el número se disparó a más de 50.000. Guoxian dijo: «Me pregunté: "¿Por qué el PCCh ataca y persigue a un grupo de personas tan pacífico?”. También pensé: “Porque las cosas que el PCCh suprime suelen ser cosas buenas”».

«Estaba en la escuela primaria cuando Taiwán inició una campaña para restaurar la cultura tradicional china a finales de la década de los setenta. Leí la mejor literatura de diferentes dinastías de la historia china. Durante ese mismo periodo de tiempo, vi en la televisión cómo el PCCh lanzaba la Revolución Cultural. Destruyeron templos, criticaron a Confucio y promovieron el ateísmo. El fuerte contraste entre Taiwán y China me hizo comprender claramente la verdadera naturaleza del PCCh».

En cuanto Guoxian regresó a Houston, compró el libro Zhuan Falun y lo leyó. También vio en Internet los vídeos de enseñanza de ejercicios de Shifu. Unos meses después, empezó a participar en los estudios locales del Fa y en las prácticas de los ejercicios.

Luego de comenzar a cultivarse, Guoxian se volvió más tolerante y tranquilo. Se esfuerza en su trabajo, pero no se centra en su propio interés. Una vez, cuando un compañero encargado de las operaciones de la fábrica tuvo que viajar durante una semana, varios servidores que controlaban el flujo de trabajo de la fábrica dejaron de funcionar, lo que detuvo la producción en varias fábricas. El compañero no podía volver de inmediato, y no era el área de experiencia de Guoxian, pero igualmente decidió ayudar. En dos días, Guoxian pudo sustituir las piezas defectuosas, restablecer la información borrada y hacer que los servidores volvieran a funcionar.

En su informe a la administración, su jefe elogió a Guoxian por su excelente trabajo y por haber evitado a la empresa la pérdida de millones de dólares. El director general de la empresa dio las gracias a Guoxian en persona.

Guoxian dijo que Falun Dafa le ha mostrado el verdadero significado de la vida y lo ha guiado para mejorar su carácter basándose en los principios Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Cuando lee Zhuan Falun, su cuerpo se siente cálido, como si se estuviera limpiando. Después de eso, se siente lleno de energía. A medida que continúa estudiando las enseñanzas, va adquiriendo una comprensión más profunda de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Antes se impacientaba con los demás cuando pensaba que tenía razón, pero la cultivación lo ha hecho más tolerante y ahora mira primero dentro de sí mismo.

Guoxian dijo: «Falun Dafa me enseñó la esencia de la cultura tradicional, la Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Y que el propósito de la cultivación es volver a nuestro verdadero origen».

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