(Minghui.org) ¿De dónde venimos y adónde vamos? ¿Cuál es el significado de la vida? Cuando todo se haya disipado como nubes de humo en el aire, ¿qué quedará tras de toda una vida de búsqueda? Éstas eran algunas de las preguntas que alimentaban mi frustración. Me gustaría compartir mi historia con ustedes.
Shifu nos dijo:
“Si quieren curar sus enfermedades, eliminar sus tribulaciones y disolver el ye, estas personas tienen que pasar por el xiulian y volver al origen y retornar a la verdad; todos los diferentes tipos de vías de xiulian lo ven de esta manera. El hombre debe volver al origen y retornar a la verdad, este es el verdadero propósito de ser un humano; por eso, una vez que esta persona quiere el xiulian, se considera que su naturaleza fo ha emergido” (Primera Lección, Zhuan Falun).
Afortunada de encontrar a Falun Dafa
Las personas viven muy ilusionadas por los intereses materiales y el deseo; es todo lo que les importa. Como se apegan cada vez más a las emociones, acaban extraviándose.
Yo era una persona malhumorada. Debido a la presión del trabajo y de mi familia, y al hábito de competir con los demás, me volví de mentalidad cerrada. Estaba deprimida y mi salud comenzó a deteriorarse. A pesar de que solo tenía 30 años, comencé a sufrir un problema cardíaco que no dejaba de empeorar. Mi hijo todavía era muy pequeño. No sabía qué hacer.
Viendo mi situación, una colega, me prestó el libro Hong Yin donde leí:
“Asimilación y perfección
En la inmensidad del cosmos,
una rueda de luz dorada.
El iluminado desciende al mundo,
el Cielo y la Tierra le encara.
El universo es claro y brillante,
asimilándose a la luz del Fa.
Vuela y asciende después de la perfección,
retornando juntos al mundo celestial" (Asimilación y perfección, Hong Yin).
Cuando leí “una rueda de luz dorada”, este valioso libro me elevó de verdad. Aquello sucedió el 8 de noviembre de 1998, un día que recordaré para siempre.
Cuando leí el libro Zhuan Falun se tornaron claras algunas cosas que nunca había entendido antes. Aprendí a ser una buena persona, lo que significaba ser una buena persona y cómo mejorar asimilándome a los principios guía de Falun Dafa: Verdad-Benevolencia-Tolerancia.
Cuando mis colegas de trabajo se reunían durante el descanso, siempre hablaban de chismes. De forma natural, participaba. Poco después de que empecé a leer Zhuan Falun, perdí el interés en los asuntos mundanos. Dejé de expresar mi opinión. Con el estudio constante del Fa, poco a poco aprendí a mirar hacia adentro cada vez que tenía conflictos, y a resolverlos. Antes de aquello, todo lo que hacía era desahogar mi ira contra mi marido.
Después de empezar a practicar, aprendí a disculparme y dejé de desahogar mi ira. Antes odiaba profundamente a mi cuñada y siempre la miraba con desprecio. Bajo la guía de los principios de Falun Dafa, aprendí a ser tolerante. Solté mi odio y comencé a ser amable con ella.
A medida que mi xinxing mejoraba, mis enfermedades desaparecían. Sentía mi cuerpo ligero y sin enfermedades. Mejoré gradualmente, a medida que transitaba el camino de vuelta a mi ser original y verdadero.
Mis tribulaciones comienzan
En pocos años, millones de personas por toda China, y en el extranjero, practicaban Falun Dafa. Me sentía muy afortunada de ser una de ellas.
Envidiando tal popularidad, Jiang Zemin, el exlíder supremo del partido comunista chino (PCCh) lanzó una cruenta persecución contra Falun Dafa el 20 de julio de 1999. Todos los programas de televisión y periódicos de China se llenaron de calumnias contra esta práctica espiritual.
En octubre de 2001, con el fin de proteger mi creencia espiritual y facilitar que los funcionarios del gobierno y la gente supieran la verdad, tomé un tren a Beijing para apelar por la práctica. Me condenaron ilegalmente a cumplir tres años en un campo de trabajos forzados. Después de tres meses, me enviaron a un centro de detención. Me liberaron por motivos de salud y luego regresé a casa. Me despidieron del trabajo. Mi hijo de seis años quedó traumatizado. Por miedo al PCCh, a sus brutales castigos, mi esposo me golpeó en un intento por obligarme a dejar la práctica. También me impedía leer los libros de Dafa y hacer los ejercicios.
¿Por qué tenía que renunciar a una práctica tan maravillosa? ¿Por qué éramos objeto de persecución? La creencia espiritual reside en los corazones, ¿de qué servía aplicar medios violentos para tratar de cambiar a las personas? Si todos se comportaran de acuerdo con los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, ¿no se beneficiaría la sociedad?
Alentada por mi fe, y a pesar del hecho de que me sentía bajo una enorme presión, logré hacer bien lo que se suponía que debía hacer, sin albergar ninguna queja ni odio. Seguí despertando la conciencia de mi marido y exponiéndole los hechos. Después de más de seis meses, finalmente entendió y dejó de interferirme. Se fue volviendo cada vez más solidario.
Debido a que ayudé a otro practicante a contratar a un abogado justo antes de los Juegos Olímpicos de Beijing, me arrestaron y saquearon mi casa. Confiscaron mi computadora, impresora, libros de Dafa y materiales de aclaración de la verdad.
No hice declaraciones ni firmé ningún documento, sin embargo, me condenaron a seis años de prisión. Durante el proceso de ser interrogada ilegalmente, cuestioné al personal de la comisaría, procuraduría, tribunal intermedio y tribunal supremo. Dije: "Como ciudadana, ¿no tengo derecho a contratar a un abogado? ¿No tengo derecho a ayudar a alguien a contratar a un abogado?". La mayoría respondían: "Tenemos que comprobar eso". Pude ver que estaban tratando de eludir su responsabilidad. Les dije: "Trabajan en un departamento legal, pero ni siquiera pueden responder a mis preguntas. ¿Tienen derecho a interrogarme? No cometí ningún crimen, así que ¿por qué debería responder a sus preguntas?”.
Cuando estuve recluida en un centro de detención, durante cinco meses, me comporté de acuerdo a los estándares de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Muchos prisioneros vieron la belleza de Dafa a través de mí. Varios, entre los cuales se cuentan algunos guardias e instructores políticos, decidieron renunciar al PCCh y a sus organizaciones afiliadas. Doce reclusos comenzaron a hacer los ejercicios conmigo a diario. Una reclusa de unos 30 años, cuyo apellido era Pei, había estado tosiendo durante un tiempo y tenía sangre en su flema. Ella creía que había contraído la tuberculosis. Cada vez que terminaba de hacer los ejercicios, su pecho dejaba de dolerle. Se recuperó en pocos días.
Otra reclusa, cuyo apellido era Jin, tenía 49 años y había recibido una buena educación. Había viajado a 16 países. Al principio, siempre me cuestionaba y me hacía preguntas muy difíciles. Con la sabiduría que me dio Shifu Li (el fundador), pude darle respuestas satisfactorias. Recitaba las nuevas conferencias de Shifu todos los días, y ella disfrutaba escuchándolas. Dijo que lo que Shifu enseñaba tenía sentido. Incluso le escribí varios poemas para que los recitara. Más tarde, su ojo celestial se abrió y vio muchas escenas increíbles. Por ejemplo, vio un gran ojo parpadeando, que era "el ojo verdadero" mencionado en Zhuan Falun. Fue realmente increíble.
El ambiente en la cárcel era muy duro. Me golpeaban e insultaban. No me dejaban dormir y me encerraban en celdas de aislamiento, donde me obligaban a ver videos y leer libros que difamaban a Dafa, para lavarme el cerebro. También me menospreciaron, torturaron, increparon y sometieron a trabajos forzados. Pero no importaba dónde estuviera, o en qué situación me encontrara, nunca olvidaba considerarme una practicante.
En un ambiente tan feroz, realmente presencié el lado negativo de la gente. Atraída por el interés propio, la gente puede volverse extremadamente agresiva. Sin embargo, ellos son los que van a ser eliminados. Mientras que los practicantes cuando se enfrentan al odio, a las torturas e incluso cuando son asesinados, manifiestan gran compasión y tolerancia, y usan sus vidas para validar "Verdad-Benevolencia-Tolerancia".
La prisión puede encerrar el cuerpo, pero no puede encerrar el corazón, ni puede cambiar la creencia de nadie. Mientras estaba detenida ilegalmente, aunque me sometieron a una estrecha vigilancia, siempre me inspiraba en mi fe en Dafa. Logré ignorar mi dolor y seguir tratando a los demás con bondad.
Shifu dijo:
“El rendimiento actual de ustedes como discípulos de Dafa es sobresaliente. Toda su conducta benevolente (Shan) es lo que más temen las fuerzas del mal, ya que aquéllos quienes atacan la bondad seguramente son malvados" (Racionalidad, de Escrituras esenciales para mayor avance (II)).
Sin importar lo mucho que sufrí y me atormentaron, siempre recordaba comportarme pacíficamente, ser sincera, tolerante y amable. Poco a poco, mi entorno cambió: los prisioneros que me vigilaban dejaron de participar en la persecución; muchos decidieron renunciar al PCCh y comenzaron a creer que Dafa era maravilloso. Ellos también me ayudaron a transmitir mensajes, así como nuevos artículos de Shifu. Algunos incluso recitaban los nuevos artículos de Shifu. Las personas que llegaban a conocer la verdad respetaban a los practicantes y confiaban en nosotros.
Mi familia se vuelve armoniosa
Cuando terminó mi pena de cárcel, mi esposo y mi hijo vinieron para llevarme de nuevo a casa. Mi marido se mostró muy silencioso y ni siquiera sonrió. Traté de conocer las novedades de la familia. El camino de regreso a casa duró seis horas. Cuando llegamos, mi marido no se bajó del auto. Me dijo que tenía que asistir a una boda.
Me senté en la sala de estar, cuando entró mi suegro. Lo saludé, pero apenas me miró y luego dijo: "Oh, has vuelto". Se dirigió a su habitación. Lo seguí y le dije: "Le hice preocuparse por mí todo este tiempo. Ahora estoy de vuelta, y voy a cuidar de usted”.
Aunque mis familiares no decían nada, sabían que yo no era una mala persona. Sus reacciones sugirieron que no solo no me entendían, sino que también me culpaban por no cuidar de mi familia, especialmente de mi hijo. Me culpaban por haber sido arrestada y luego encarcelada.
Incluso la mujer que tuvo una aventura con mi esposo, mientras yo estaba encarcelada, me cuestionó: "¿Qué estuviste haciendo todos estos años?". Cuando fui arrestada por el partido y perseguida, a pesar de que sabían que era inocente, nadie se puso de mi lado. Pensaban que, en cuanto renunciara a la cultivación, me liberarían. Así que, ¿por qué no dejaba de practicar?
También pensaban que los practicantes solo nos preocupábamos por nosotros mismos en lugar de hacerlo por nuestras familias. Pensaban que, al defender nuestra creencia, renunciábamos a nuestras familias.
Cuando un practicante es perseguido, tiene que soportar una tremenda presión mental. Lo ideal o lo que uno espera, es ser consolado por la familia, en cambio, por lo general la presión aumenta.
Mis suegros vivían en el campo. Mi suegro sufrió un derrame cerebral después de que me arrestaron. Para poder cuidarlo, mi esposo hizo que sus padres se mudaran con él. Más tarde, mi suegra murió de cáncer de hígado. Como mi suegro siempre había vivido en el campo, había desarrollado algunos malos hábitos.
Mi esposo no se encargaba de ninguna de las tareas del hogar. Usualmente comía, bebía y jugaba al mahjong. Cuando estaba en casa, veía la televisión, jugaba con su celular o dormía. Yo era la única que cuidaba de mi suegro. Muchos de mis apegos quedaron expuestos, como evitar la suciedad. No me gustaban sus malos hábitos, especialmente sus problemas de higiene. Por ejemplo, al principio, se quitaba los zapatos en cuanto llegaba a casa. Más tarde, lo hacía raras veces y, al final, dejó de hacerlo. Aunque le tenía un poco de resentimiento, traté de mantenerme al estándar del Fa. Traté de mirar hacia adentro.
Shifu dijo:
“Si puedes lograr Ren pero en tu corazón no puedes dejarlo, esto tampoco va. Todos saben que después de alcanzar ese nivel de luohan, al encontrarse con cualquier suceso no se lo guarda en el corazón, no se guarda, en absoluto, ningún asunto de la gente común en el corazón, se está siempre alegre y sonriente, y por más que se salga perdiendo ampliamente, igual se está alegre y sin darle importancia. Si realmente puedes lograr esto, ya habrás alcanzado el grado elemental de la Posición de Fruto de luohan” (Novena Lección, Zhuan Falun).
Al mejorar mi xinxing, me volví cada vez más comprensiva con él: “Es viejo. Le resulta difícil agacharse para quitarse los zapatos”. Dejé de tener malos pensamientos, incluso si lo veía acostado en la cama y viendo la televisión con los zapatos puestos. Pensaba que, mientras se sintiera cómodo, eso era todo lo que importaba.
Mi suegro ahora dice todos los días: "¡Falun Dafa es maravilloso! Verdad-Benevolencia-Tolerancia es maravilloso". Ha leído varios libros de Dafa y actualmente está recitando Hong Yin y Hong Yin (II). Cuando se sintió enfermo, lo llevamos para que lo trataran de emergencia en un hospital. El médico y algunos pacientes pensaron que yo era su hija. Cuando alguien preguntó si yo era su hija, él respondió: “Es mi nuera ¡Es maravillosa!".
Mi marido es muy amable, recto y generoso, pero tenía mal genio. Antes de empezar a practicar, a menudo peleaba con él y nunca cedía. Era él quien tenía que disculparse. Después de empezar a practicar, pasaba al revés. Su actitud hacia Dafa cambió. Excepto por el hecho de que no entendía muy bien por qué yo era tan persistente, pensaba que Falun Dafa era bueno.
Shifu nos enseñó a ser compasivos. Así que tenía que eliminar las nociones humanas cotidianas. Es fácil cometer actos malos dentro de la ilusión. Solté mis preocupaciones, quejas y resentimientos y me volví cada vez más pacífica. Aunque él jugara al mahjong, dejé de enfadarme. Cuando se emborrachaba, dejé de quejarme. También dejé de verificar con quién estaba en contacto con su teléfono celular. Dejé de intentar cambiarlo. Incluso si yo no tenía la culpa, miraba hacia adentro incondicionalmente. Cuando me regañaba, me quedaba tranquila y hacía lo que se suponía que debía hacer en silencio, o le pedía disculpas. En ese momento, se daba vuelta y reconocía que estaba equivocado.
Poco a poco, mi esposo cambió y el ambiente en mi casa se volvió cada vez mejor. Durante los últimos años, me ha pedido que esté a cargo de la contabilidad de su compañía. Me contó muchas cosas antes de tomar una decisión. En cuanto nuestros amigos y clientes vieron que éramos honestos, todos quisieron trabajar con nosotros. Como resultado, las ganancias de nuestra compañía se han disparado. Porque mi esposo cree que Dafa es bueno, no ha resultado herido cuando ha tenido accidentes. Una vez, su coche se estrelló contra un gran árbol y se partió por la mitad, sin embargo, él salió ileso. Su temperamento también mejoró. Ahora le dice a la gente que tiene una gran esposa y que, sin mí, no tendría una vida feliz. Le dije que todo esto se debe a Shifu y a Dafa.
Nuestra familia se ha vuelto armoniosa bajo la gracia salvadora de Dafa y la protección benevolente de Shifu.
Espero que la gente atesore Dafa que ha beneficiado a decenas de millones de personas y recuerde albergar en sus corazones "Verdad-Benevolencia-Tolerancia". Falun Dafa se practica en todo el mundo y los libros se pueden descargar de forma gratuita.
Shifu dijo:
“Yo no deseo nada; sólo he venido a salvarlos. Sólo deseo que sus corazones sean virtuosos y quiero que se eleven” (Exponiendo el Fa en Sidney).