(Minghui.org) Un señor de 52 años tuvo múltiples episodios de insuficiencia cardíaca y presión peligrosamente alta, y fue hospitalizado varias veces durante sus siete años en prisión por no renunciar a Falun Gong.

Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una disciplina espiritual de mente-cuerpo que es perseguida por el régimen comunista chino desde el año 1999.

El Sr. Miao Fu se encuentra esquelético y débil, y suele sufrir alucinaciones desde que fue liberado el 2 de febrero de 2019.

Él es un residente de la ciudad de Mudanjiang, provincia de Heilongjiang, fue arrestado el 2 de febrero mientras acompañaba a los familiares de siete practicantes de Falun Gong detenidos a la estación de policía para pedir que los liberaran.

Lo interrogaron y torturaron en custodia policial. Sus brazos y su cara quedaron cubiertos de cicatrices y moretones. La tortura le ocasionó un desorden mental que causó que pareciera confundido y se durmiera durante su juicio el 27 de junio de 2012.

Menos de dos meses después fue sentenciado a siete años en la prisión de Mudanjiang.

Continuó siendo torturado por guardias de la prisión por no renunciar a Falun Gong. Lo golpearon, le dieron cachetadas, lo electrocutaron con picanas eléctricas y no le permitieron dormir.

Una noche los guardias lo arrastraron al baño y le echaron agua fría. Lo golpearon tan fuertemente que perdió los dientes frontales.

Se negó a escribir los reportes de pensamientos como se le requería [parte del lavado de cerebro]. El guardia Fu Zhanjun lo golpeó en la cabeza con un bastón eléctrico, causando que su cabeza sangrara continuamente. También lo alimentaron forzosamente con aceite de mostaza, y le insertaron agujas en su pierna izquierda. La punta de una aguja se rompió y nunca la removieron de su pierna.

Poco antes de ser liberado, fue enviado a la “sala de control severo” en dos ocasiones, porque los guardias agudizaron sus esfuerzos para forzarlo a renunciar a Falun Gong.

Los guardias rellenaron su boca con medias y se la taparon para evitar que dijera en voz alta “Falun Dafa es bueno”. También lo ataron al banco de tigre, le rociaron la cara con agua con pimienta, y electrocutaron su pierna con picanas eléctricas, porque lo encontraron haciendo la meditación de Falun Gong.

Entre octubre y finales de noviembre de 2018, los guardias lo dejaron confinado en un pequeño cuarto sin cama. Durmió en el piso por casi dos meses.

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