(Minghui.org) Me encantó aprender Falun Dafa en 1996, cuando recién me graduaba de la escuela. Tenía pocas nociones o apegos en mi mente y prestaba poca atención a la fama y a las ganancias. Estudiaba el Fa y hacía los ejercicios de Dafa todos los días, ¡y vivía felizmente una vida sin preocupaciones! Eso fue hasta que comencé a tener problemas con nuestros vecinos.

Los practicantes que siguen los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia pueden comportarse verdaderamente de manera sincera, amable y tolerante, y ser verdaderamente puros y desinteresados, pero yo todavía estoy lejos de estos requisitos. Me gustaría compartir mis experiencias de cultivación de varios años de conflictos con nuestros vecinos, y espero exponer y desintegrar mis apegos al resentimiento, la ganancia y la lucha.

Mi difunto padre era un hombre amable que ayudaba mucho a los vecinos. Cuando la Oficina Forestal estaba demoliendo casas, mi padre ayudó a un vecino a conseguir la casa disponible que estaba justo al lado de la nuestra, a la izquierda. Este nuevo vecino acordó con mi padre construir su casa al mismo nivel del suelo que la nuestra. Sin embargo, después de que mi padre falleció, construyó la casa diez centímetros más alta que la nuestra. También solía arrojar basura, nieve y agua sucia frente a nuestra casa. En invierno, la carretera helada se volvía muy resbaladiza. Le pedí que dejara de verter agua sucia hacia nuestra casa, pero él consideraba que a seis metros desde su casa era verter en un área pública.

El año pasado, mi propiedad se redujo diez centímetros porque colocó ladrillos y piedras alrededor de la pared, lo que provocó que se inclinara, y luego clavó grandes tablas de madera para cubrir el espacio. Le pedimos al líder de la calle y al comité de construcción que hablara con él, pero se negó a quitarlo. Pensamos que estaba siendo irrazonable. Un amigo sintió pena por nosotros y dijo que el vecino había conseguido su casa con la ayuda de mi padre y que no debería intimidarnos a mi hermano y a mí luego de que nuestros padres fallecieron.

El vecino que estaba a la derecha de nuestra casa también era antipático a veces, a pesar de que le ayudaba cuando lo necesitaba e incluso le prestaba dinero. Quería reconstruir un cobertizo en el lado derecho de mi patio, en el mismo lugar en el que estaba. Este vecino se quejaba de que el cobertizo bloquearía la luz solar de su casa, por lo que no me dejó reconstruirlo. Ni siquiera me dejó poner una caja de madera de menos de un metro de alto fuera de mi ventana, diciendo que la caja bloquearía la luz solar.

En la primavera de este año, contraté a seis personas para que repararan un cobertizo en mi jardín. Los vecinos de ambos lados no lo permitieron. La esposa del vecino de la izquierda agarró una pala, la agitó frente a nosotros y maldijo en voz alta, exigiendo que ese era su lugar y que no se nos permitía repararlo. Mis parientes pensaron que era muy poco razonable tratar con ellos y sugirieron que vendiéramos nuestra casa y viviéramos en otro lugar.

Unos días después, las tejas de mi cobertizo estaban fuera de lugar, lo que provocó que el techo goteara cuando llovía. Un amigo vino a ayudar a ajustar las tejas. Mientras mi amigo estaba trabajando, la vecina a nuestra derecha salió y dijo que no podíamos hacerlo. Maldijo y golpeó la pared de tablas. No pude evitar pelearme con ella y finalmente llamé a la policía. Ella continuó maldiciendo después de que llegó la policía. La presión arterial de mi hermano subió debido a su enojo. La vecina finalmente dejó de regañarnos y se fue a casa después de que le dije que la presión arterial de mi hermano había aumentado y que necesitaba ir al hospital.

Me sentí muy enfadada y afloró mi resentimiento. Estos vecinos respondieron a la bondad de mi familia con sus malas acciones. Consideré pelearme con ellos, pero me di cuenta de que no debía comportarme como ellos y caer bajo el destructivo arreglo de las viejas fuerzas.

Recité este pasaje del Fa de Shifu más de cien veces:

“Cultivador practicante
Busca tú mismo los errores
Elimina todo tipo de corazones humanos
No te quedes atrás en grandes pruebas,
pequeñas pruebas, no pienses en caer
El que tiene la razón es él
El que está equivocado soy yo
¿Por qué contienden?”
(“Quién tiene razón, quién no”, Hong Yin III)

Al estudiar la pérdida y la ganancia en la cuarta lección de Zhuan Falun, me di cuenta de que la tribulación se debía a una deficiencia en mi cultivación y a mi apego a la fama, la ganancia y el sentimentalismo. Fue una experiencia realmente desgarradora y dolorosa de superar, además de tratar de dejar de lado el deseo de ganancia.

Varios practicantes se enteraron de mi situación y vinieron a compartir conmigo sus entendimientos sobre cómo mejorar según el Fa. Algunos enviaron pensamientos rectos para ayudar a limpiar mi campo dimensional eliminando los factores malignos que interferían con mi estudio del Fa y la realización de los ejercicios. Un practicante me contó una historia que me animó a mantener pensamientos rectos en mi mente, en lugar de centrarme en cosas y personas malas. Le conté la historia a mi hermano y estuvo muy de acuerdo.

A través del estudio continuo del Fa, comprendí que todo es resultado de una relación de causa y efecto. No importa cómo me traten ahora mis vecinos, no puedo resentirme con ellos porque podría haberlos lastimado en el pasado. Tengo que pagar todas las deudas de yeli que tengo de vidas pasadas. Debo apreciar que ellos crearon conflictos que me brindaron oportunidades para refinar mi carácter, me ayudaron a dejar de lado el apego a la ganancia y me hicieron más tolerante.

Después de que mi comprensión de la situación cambió, todo comenzó a mejorar. Los vecinos de ambos lados querían reconciliarse con mi hermano y conmigo. Dijeron que los parientes lejanos no son tan importantes como los vecinos cercanos, por lo que deberíamos llevarnos bien entre nosotros. El vecino de la derecha me dijo que podía construir un cobertizo, alto o bajo, en cualquier momento. Pedí disculpas y admití que me había equivocado al discutir con ellos ese día, y les di regalos para demostrarles mi amistad. Estaban muy contentos. Fue realmente como dijo Shifu:

“¡tras el verde oscuro del sauce, se hallan resplandecientes flores y otra nueva aldea!”. (Novena Lección, Zhuan Falun)

Comprendí que la cultivación y el xinxing se refinan en medio de las pruebas. Estoy muy agradecida a Shifu por enseñarme el Fa en mis 28 años de cultivación y por guiarme para eliminar el resentimiento y salir de las tribulaciones hacia un futuro brillante.