(Minghui.org) Un artículo en Minghui me hizo pensar. En “No cultivarnos seriamente en Dafa es algo verdaderamente peligroso”, el autor dijo: “A lo largo de los años, los campos de trabajos forzados y las prisiones de China intentaron "transformar" a los practicantes con la ayuda de "personas altamente educadas" y "expertos". Muchos practicantes se confundieron con sus falacias, porque, después de que el Partido Comunista Chino (PCCh) les lavara el cerebro, la gente en China, incluidos muchos practicantes, malinterpretaron el dicho tradicional: "El valor de todas las actividades es pequeño si se compara con la buena erudición". Admiran a los "eruditos superdotados, las damas de buen ver" y las "élites intelectuales", pensando que solo los que tienen una buena educación pueden "dar gloria a sus antepasados" y que son las personas "sensatas””.
Shifu nos dijo: “Ser famoso no necesariamente significa ser verdaderamente sabio” (Octava Lección, Zhuan Falun). De hecho, muchos de los practicantes “transformados” que se extraviaron o se iluminaron siguiendo un camino perverso son miembros de esa clase “élite” a los ojos de la gente común. ¿Por qué traicionaron a Dafa y se encaminaron por el camino sin retorno?
Querer ser diferente y mejor que los demás
Cuando una expracticante comenzó su plataforma mediática, decía cosas poco convencionales para llamar la atención de la gente común. Cuando los practicantes la contradecían, se enojaba con ellos y atacaba a Minghui y a los practicantes para promocionarse más. Desafortunadamente, algunos practicantes se interesaron mucho en sus puntos de vista y alentaron a otros practicantes a escucharla, hasta que Shifu escribió un artículo advirtiéndonos sobre ese tipo de comportamiento.
Me pregunto si estos practicantes alguna vez se preguntaron por qué tenían más curiosidad por lo que ella decía que por las enseñanzas de Dafa. Quizás sus puntos de vista se ajustaban a su apego a querer ser diferentes y mejores que los demás. Sugiero que estos practicantes prescindan por completo de sus puntos de vista y eliminen los apegos que los atrajeron hacia ella. Si no lo hacen, las viejas fuerzas tendrán una excusa para ir tras ellos y destruirlos.
Apegados al ego y a los principios seculares
Cuando surgían conflictos, esta expracticante reaccionaba para proteger sus sentimientos y su ego, e incluso llegaba a cuestionar a Shifu y traicionar a Dafa. Justificaba lo que hacía diciendo que era “consciente” y que quería “proteger los valores universales”. Sus puntos de vista en Internet iniciaron una ola de ataques viciosos contra Shifu y Dafa.
Ella no es la única apegada a los talentos mundanos triviales y a los asuntos mundanos. Una cosa que estos practicantes tienen en común es que, aunque están físicamente presentes entre los practicantes, sus corazones no lo están. Nunca creen genuinamente en Dafa, y su búsqueda de ganancias ordinarias supera a la cultivación. Les gusta pensar que son diferentes de los demás, ven la cultivación en Dafa igual que otras formas de cultivación convencionales y traen lo que han aprendido en sus profesiones a la cultivación en Dafa. Cada noción es como un muro entre ellos y Dafa. Aunque estudian el Fa todos los días, prestan más atención a ciertas partes del Fa que les agradan y nunca ven verdaderamente el significado más profundo del Fa.
Shifu nos advirtió hace mucho tiempo:
“Cuando uno fracasa en pasar una prueba o no puede dejar un apego fuerte de la gente común, probablemente irá en sentido contrario, tomando el terreno opuesto. Hay muchísimas lecciones en la historia. Sólo después de haber caído empezará uno a arrepentirse, pero entonces será demasiado tarde” (Dafa no puede ser usurpado, Escrituras esenciales para mayor avance).
En busca de fama y ganancia personal
Una graduada de una universidad de primer nivel trabajó mucho para validar el Fa, pero nunca se cultivó sólidamente. Fue encarcelada después de que comenzó la persecución y rápidamente renunció a su fe. Comenzó a ayudar a los guardias a lavar el cerebro de los practicantes en la prisión. Más tarde se convirtió al budismo y publicó muchos libros y videos budistas.
Ya sea que estuviera entre los practicantes, en la prisión o en el budismo, siempre trató de mostrar su talento y ser la mejor en el juego. Los guardias a menudo usaban su ejemplo para lavar el cerebro y “transformar” a los practicantes en las cárceles porque eran buenos con las palabras, ingeniosos, inteligentes y muy educados. Dondequiera que van, atraen a practicantes que los admiran.
Incapacidad para renunciar al estatus social
Un practicante de edad avanzada con un alto estatus social solía promover positivamente Falun Dafa. Después de que comenzó la persecución, le resultó difícil cortar los lazos con el PCCh porque había sido muy adoctrinado con la cultura del PCCh y estaba muy apegado a su estatus especial.
Cuando se publicó Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista, no estuvo de acuerdo con que los practicantes lo promovieran, creyendo que era político. Le resultó difícil aceptar lo que dijo Shifu después del 20 de julio de 1999, y creía que Shen Yun era solo “un grupo de niños saltando por ahí, no cultivándose”. Finalmente abandonó la práctica y murió poco después.
Conclusión
Shifu dijo :
“Cualquiera que haya venido a estudiar el Fa, sin importar cuánta sabiduría tenga, o cuán grande sea su negocio, o cuán prominente sea su posición oficial, o qué habilidad especial tenga, o qué capacidades de gong posee, debe practicar la cultivación genuinamente. La práctica de cultivación es extraordinaria y solemne. En cuanto a si puedes abandonar tu mentalidad particular de la gente común o no, eso es una gran prueba que tendrás dificultad en pasar, pero tienes que pasarla. Después de todo, como discípulo practicando genuinamente la cultivación, debes renunciar a este apego, puesto que nunca obtendrás la perfección si no abandonas esta mentalidad” (Abandonar los apegos de la gente común y perseverar en la cultivación real, Escrituras esenciales para mayor avance).
Sugiero que los practicantes que tienen un alto nivel educativo y se consideran expertos, talentosos y/o intelectuales (es decir, “élites”) lean nuevamente el artículo de Shifu y abandonen la noción de sentirse especiales. De lo contrario, seguirán siendo personas comunes sin importar cómo se cultiven. Incluso pueden tener interferencia demoníaca de su propia mente o, peor aún, engañar a otros practicantes y perturbar el Fa. En cuanto a los demás practicantes, por favor no dejen que el estatus social, el nivel de educación o la elocuencia de una persona los influyan. Dafa es el único criterio para discernir lo correcto de lo incorrecto.
Por favor, señalen cualquier cosa que no esté basada en el Fa.