(Minghui.org) Una residente de 77 años de la ciudad de Ma'anshan, provincia de Anhui, fue sentenciada en agosto de 2024 a un año y medio de prisión y a una multa de 5.000 yuanes (aprox. 700 USD) por su fe en Falun Gong, una disciplina espiritual perseguida por el Partido Comunista Chino desde julio de 1999.
La Sra. Yang Yuping fue detenida a la entrada de su complejo de apartamentos a principios de mayo de 2024 por dos agentes de policía y dos trabajadores comunitarios. Allanaron su casa y la llevaron para hacerle un examen físico. Fue puesta en libertad bajo fianza tras descubrirse que tenía una infección pulmonar.
El 14 de mayo de 2024, cuatro agentes del Departamento de Policía del distrito de Yushan detuvieron a la Sra. Yang en la entrada de su complejo de apartamentos y la obligaron a llevarlos a su casa. Saquearon su casa y la llevaron al departamento de policía para interrogarla. Un agente la acusó de “utilizar una organización de culto para socavar la aplicación de la ley”, un pretexto habitual utilizado para incriminar a los practicantes de Falun Gong.
La Sra. Yang fue puesta en libertad bajo fianza esa noche después de que un examen físico mostrara que también tenía una enfermedad cardíaca y presión arterial alta.
La Procuraduría del distrito de Huashan acusó a la Sra. Yang el 13 de junio de 2024. Al tomarle declaración, el procurador Hu Xiaobo alegó que los libros y materiales informativos de Falun Gong que le confiscaron eran evidencia de que había infringido la ley. Refutó que ninguna ley en China penaliza a Falun Gong y se negó a admitir la culpabilidad como exigió Hu.
El Tribunal del distrito de Huashan juzgó a la Sra. Yang el 2 de agosto de 2024. El juez Zhu Lingling le preguntó si admitía su culpabilidad. Ella dijo que no. Zhu se acercó a ella y repitió la pregunta. Ella respondió nuevamente que no había violado ninguna ley al practicar Falun Gong.
Zhu aplazó la audiencia y sentenció a la Sra. Yang a un año y medio de prisión días después (se desconoce la fecha exacta). Esta no es la primera vez que ha sido objeto de persecución por su fe. Anteriormente estuvo tres años en un campo de trabajo y otros tres años en prisión.
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