(Minghui.org) Recientemente, el New York Times publicó tres artículos seguidos, atacando a Shen Yun Performing Arts, la Academia de las Artes y la Universidad Fei Tian, y Falun Dafa. Me gustaría compartir con ustedes mi entendimiento personal sobre el tema.

Actitud mental

Con respecto a los informes del New York Times, Shifu lo dejó muy claro en su artículo «Las tribulaciones del Fa» publicado el 5 de junio de 2024. Al volver a leer el artículo, me di cuenta de que Shifu ya había dado a todos los seres conscientes la mayor oportunidad por adelantado con respecto a este incidente, incluyendo a algunos practicantes de Dafa que no son muy diligentes en la cultivación, o a aquellos que ya están siendo interferidos.

Es extremadamente crucial en nuestra cultivación que, en primer lugar, tengamos un fuerte deseo de cultivarnos bien, y mantengamos al ciento por ciento la firme creencia en Shifu y en Dafa.

Shifu dijo:

«La cultivación depende de uno mismo, el gong depende del shifu» (Primera Lección, Zhuan Falun).

«Shifu te conduce a entrar por la puerta, mientras que el xiulian depende del individuo» (Cuarta Lección, Zhuan Falun).

Cuando salvamos a la gente aclarándoles los hechos o persuadiéndolos para que renuncien a las organizaciones del Partido Comunista Chino (PCCh), sólo estamos haciendo cosas en la superficie. La verdad es que es el Shifu quien está resolviendo todos los complejos factores detrás de la salvación de esas personas, mientras elimina y soporta un enorme yeli para esas personas. Aún así, Shifu nos da todo el crédito a nosotros y utiliza esas oportunidades para que completemos nuestros propios mundos.

Cuando empezamos a cultivar Dafa, Shifu ya ha eliminado nuestro inmenso yeli más allá de lo descriptible, y también ha arreglado oportunidades en varias etapas en nuestro camino de cultivación para eliminar el yeli restante, con el fin de purificarnos y mejorarnos. Cuando encontramos pruebas y tribulaciones en nuestra cultivación, debemos tener claro que son causadas por nuestro propio yeli. Sólo podemos estar eternamente agradecidos por la gracia salvadora del Shifu, ser diligentes en la cultivación y salvar a tantos seres conscientes como sea posible, para que podamos ayudar al Shifu en la rectificación del Fa y cumplir nuestro voto prehistórico.

A través de la lectura de un gran número de artículos compartidos por compañeros practicantes, me di cuenta de que para aquellos que son verdaderamente diligentes en la cultivación, la mayoría de ellos sentirían que no lo han hecho suficientemente bien en la cultivación y están lejos de los estándares del Fa. Ninguno de ellos se jactaría de lo capaz que es; están agradecidos al Shifu y aprecian la oportunidad eterna de ser discípulo de Dafa. Para mí, ésta es la mentalidad correcta.

Los que sienten que ya han trabajado muy duro y están muy cansados, y piensan que los demás no son lo suficientemente buenos y les deben algo, están en una situación muy peligrosa. Deben mirar hacia dentro y ponerse al día rápidamente en su cultivación. Si se sienten agraviados e insatisfechos, ése es exactamente el apego que hay que eliminar, ya que no está en consonancia con los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia. Si no miran en su interior, sino que en su lugar descargan su insatisfacción deliberadamente, entonces no logran reconocer que esos malos elementos no son ellos mismos y son fácilmente interferidos por ellos. Si siguen comportándose así, su xinxing se degenera y se alejan aún más del nuevo universo rectificado por Shifu.

Somos los seres más afortunados de tener la oportunidad de practicar el Fa del universo. No importa cuán diligentes seamos, no podemos ser lo suficientemente diligentes. No hay nada más serio que esto. Por mucho que hagamos para salvar a los seres conscientes no es suficiente.

Entrenamiento de danza

Confundido por la propaganda que circula por ahí, hace poco escuché algunas preguntas sobre el entrenamiento de danza de Shen Yun. Como bailarín profesional que soy, me gustaría compartir con ustedes lo que realmente supone un entrenamiento de danza.

Soy una estudiante extranjera originaria de China. Llevo aprendiendo danza desde que era niña y empecé a formarme profesionalmente en la escuela secundaria. Me matriculé en un instituto de arte y empecé a bailar de forma profesional. Más tarde, me admitieron en una universidad, con especialización en danza china.

Durante la formación de danza en el instituto, el día empezaba con una clase matinal a las 6.30, con una hora de descanso para desayunar, antes de seguir entrenando hasta las 12.00. Cada clase duraba unas dos horas, con un descanso de diez minutos, y luego una pausa para comer de una hora y media a dos horas. Después, todo el mundo acudía más temprano al aula para calentar y prepararse para seguir entrenando. Por la tarde, teníamos que entrenar hasta las 18:30, hacer un breve descanso y continuar con la clase de baile vespertina a las 19:40, que duraba hasta las 22:40, a veces incluso más tarde.

En total, teníamos al menos once o doce horas diarias de entrenamiento. Además, los profesores profesionales nos hacían controles de peso cada semana o al azar para llevar un registro de nuestro peso, porque mantener una forma corporal estándar era el requisito de calidad más básico para un bailarín profesional, y lo que nosotros hacíamos estaba aún en el nivel más bajo de exigencia.

Así que de joven recibí una formación básica en danza y durante tres años hice un entrenamiento intensivo en la secundaria. Sólo los que destacaban podían ser admitidos en las escuelas profesionales de danza, y además sus familias debían tener suficientes recursos económicos para mantenerlos. Sólo los que tienen las condiciones físicas más ventajosas y han entrenado duro desde la infancia pueden ser admitidos en las mejores instituciones de danza de China, como la Academia de Danza de Beijing y la Universidad Minzu de China. Se trata de estudiantes más profesionales, que sudan y pagan mucho más dinero que nosotros. El siguiente nivel son los bailarines de primera clase de China, que pueden entrar directamente en los teatros o grupos de danza de primera clase de China para convertirse en bailarines contratados oficialmente, algo muy difícil de conseguir.

Todos conocemos el dicho: «Un minuto en el escenario equivale a diez años de duro trabajo fuera de él». Detrás del brillante segundo de gloria en el escenario hay un sinfín de trabajo duro y sudor. La intensidad del entrenamiento al que se someten es diez veces o decenas de veces superior a la que nosotros habíamos experimentado. Se dice que muchos bailarines profesionales a menudo sólo comen una manzana al día, o beben una taza de café, para mantener su forma y su peso. Aun así, tienen que seguir un entrenamiento muy intenso. Incluso a este nivel, sólo son bailarines de primera clase en China.

¿Y qué decir de los bailarines de categoría mundial? Uno puede imaginarse lo exigentes que son los requisitos para ellos. De hecho, a menudo siento envidia de los intérpretes de Shen Yun y de los estudiantes del Fei Tian College, que pueden mejorar constantemente bajo la dirección de profesores profesionales. Lo que aprenden son las técnicas más puras de la danza tradicional, y lo hacen en un ambiente tan bueno y sano, en el que los bailarines mejoran juntos y se ayudan mutuamente. Lo más importante de todo es que tienen la oportunidad de convertirse en bailarines de talla mundial, actuar en los mejores teatros del mundo y, al mismo tiempo, salvar a los seres conscientes. ¡Qué hermoso y magnífico es esto!

En vista de los recientes incidentes, yo también empecé a reflexionar sobre mí mismo. Después de mirar en mi interior, descubrí mi propio apego a la envidia e incluso los celos de los artistas de Shen Yun. Al calmarme y pensar en ello cuidadosamente, comprendí más profundamente sobre la seriedad en la cultivación de Dafa; somos constantemente probados en cuanto a si nuestra cultivación es sólida, y debemos cultivarnos a nosotros mismos en todo momento. No podemos perseguir la cultivación en ningún ambiente o forma particular, y no hay absolutamente ningún atajo en la cultivación.

También me he dado cuenta de que cada uno de nosotros debe apreciar verdaderamente el camino dispuesto por Shifu. No importa en qué proyecto estemos comprometidos, es una prueba para ver si tenemos un corazón puro para salvar a la gente, en lugar de usarlo para presumir o tratar de hacernos famosos a través de él.

Los que deciden emprender la carrera de bailarín, sean quienes sean, deben tener claro ante todo la dificultad que entraña. Sin la suficiente determinación, no se debe tomar el camino a la ligera.

Si uno tiene la suerte de ser estudiante de danza o artista de Shen Yun, ¿no es algo digno de valorar y agradecer? En Shen Yun, pueden presentar los auténticos 5.000 años de cultura divina china en el escenario ante decenas de miles de personas o más, al tiempo que salvan a seres conscientes: ¡qué hermoso es eso!

Si, como cultivador, el comportamiento o los pensamientos de uno no están en consonancia con el Fa y se ha hecho algo mal, o si un bailarín no cumple con las normas, entonces tendrá que ser sustituido por alguien que sea mejor, a fin de mantenerse a la altura de las normas de Shen Yun y lograr el objetivo de salvar a la gente. Por otro lado, si uno es sustituido debido a sus propios problemas, lo primero es mirar rápidamente hacia dentro para ver si hay alguna brecha y qué es lo que les impide hacerlo bien en la misión sagrada.

Deben sentirse agradecidos al compañero que se incorpora para garantizar el buen funcionamiento de Shen Yun. Sin embargo, si uno no corrige su propio error o sigue cometiendo los mismos errores, puede acabar causando un gran problema. Shifu ha dado oportunidades a todo el mundo una y otra vez, y tenemos que aprovecharlas. Quejarse de las cosas no ayuda en absoluto a resolver los problemas.

También he oído a algunos practicantes hacer comentarios sobre los precios de las entradas de Shen Yun, pensando que eran demasiado altos. Me gustaría compartir mi experiencia como bailarín. Cualquier espectáculo de danza conlleva gastos de alquiler del local, promoción, escenografía, vestuario y utilería, instrumentos musicales, comida, alojamiento y transporte de los artistas. Los costes suelen ser bastante elevados. Todos tienen que mantener un estándar mínimo, que ya es bastante alto. Teniendo en cuenta el altísimo nivel profesional y lo que Shen Yun, como compañía de danza de categoría mundial, presenta, así como la invaluable experiencia que disfrutan los espectadores, los precios de las entradas no son en absoluto elevados en ningún sentido.

Shifu nos ha ofrecido el precio más apropiado debido a su misericordia. Shifu lo ha explicado muy claramente en sus enseñanzas del Fa a este respecto. No creo que los practicantes deban preocuparse por el precio de la entrada. Pienso que esto es también una prueba de si creemos firmemente en Shifu y Dafa y si nos cultivamos sólidamente.

Esto es sólo mi opinión personal. Por favor, señalen cualquier cosa en lo que he compartido que no esté de acuerdo con el Fa.