(Minghui.org)

¡Saludos, Shifu! ¡Saludos, compañeros practicantes!

Soy un practicante de Toronto que trabaja para The Epoch Times en inglés. Me gustaría compartir algunas de mis reflexiones y realizaciones después de estudiar los artículos recientes de Shifu.

Como periodista, tengo que leer muchas noticias a diario. Para cubrir una historia más profunda, con frecuencia tengo que profundizar en los detalles de las políticas presentadas por los diversos partidos políticos. Fue fácil para mí cuando comencé, ya que no tenía ninguna noción de favorecer o resentir a nadie. Sin embargo, a medida que gané experiencia en mi trabajo, me di cuenta de que estaba más de acuerdo con los principios de un partido político importante. Mi apego al partidismo se hizo muy evidente cuando mi cobertura de noticias le dio más peso a ese partido.

Durante mucho tiempo, pensé que esto estaba bien porque los otros partidos tienen políticas que tienden a alejarse de los valores y la cultura tradicional, algo que, a mi entender en ese momento, no se alineaba con la búsqueda de “Verdad, Tradición, Esperanza” de nuestros medios. Además, después de haber leído “Cómo el espectro del comunismo rige nuestro mundo”, vi claramente cómo las viejas fuerzas se han organizado para inyectar ateísmo y materialismo en diferentes campos y estratos de la sociedad para destruir la naturaleza divina de la humanidad. Estaba decidido a exponer esas mentiras.

Algunas de mis historias obtuvieron muchas visitas, se compartieron y suscripciones. Cuando miré el cuadro de comentarios en el sitio web de nuestro medio, pude ver que los lectores estaban de acuerdo con lo que se presentaba, pero al mismo tiempo, atacaban a los partidos de tendencia izquierdista y a sus miembros. Aunque mis artículos no hacían ningún ataque personal a nadie, la gran cantidad de críticas de nuestros lectores contra esas personas me hizo reflexionar sobre si había presentado las noticias de una manera lo más neutral posible. En lo más profundo de mi corazón sabía que, aunque no escribía ni una palabra contra los izquierdistas en mis artículos, albergaba resentimiento hacia ellos. Sostenía la opinión de que eran agentes enviados por las viejas fuerzas para destruir el mundo occidental.

También noté que cada vez que pedía una entrevista o solicitaba comentarios de una persona de tendencia izquierdista sobre ciertos temas sociales, la mayoría de las veces no obtenía una respuesta. No veía nada extraño, ya que consideraba normal que la gente pudiera optar por no responder. Pero cuando investigué más tarde el contenido de otros medios de comunicación, vi que otros medios habían logrado obtener entrevistas de ambos lados.

Después de que se publicara el nuevo artículo de Shifu Despierta con un sobresalto, revalué si todo lo que había hecho se basaba en la cultivación y la compasión. Me di cuenta de que estaba lejos de los requisitos del Fa.

La realidad es que lo que tenía en mente se había manifestado en la superficie. Debido a que resentía a esas personas, de hecho las estaba alejando de la salvación, ya sea que el resentimiento se expresara o no en mis artículos. Shifu nos dijo:

"¿No dijimos que la materia no se extingue? Dentro de un espacio específico, cuando uno termina de hacer alguna cosa, o sea, apenas alguien agita su mano para hacer lo que sea, todo es de existencia material y cualquier acción efectuada deja una imagen y un mensaje. En otros espacios eso es inextinguible y existe allí dentro para siempre” (Segunda Lección, Zhuan Falun).

Llegué a comprender que la creciente división entre los dos principales partidos políticos de Canadá podría ser el resultado del apego de los practicantes de Dafa a las afiliaciones a partidos políticos, yo incluido. Además, la mentalidad de defender a un partido político e ir en contra de otro estaba alejando la compasión de mí. Shifu dice en Despierta con un sobresalto:

“...sus acciones hacen que la gente no pueda ver la misericordia de los cultivadores, especialmente no debemos usar las preferencias personales como estándar básico para comentar los asuntos. Ustedes han venido para salvar a la gente, tienen que usar Verdad, Benevolencia y Tolerancia como estándar para evaluar. Las cosas que redactan, las cosas que dicen, como mínimo, deben poder inspirar el efecto de salvar a la gente del mundo” (Despierta con un sobresalto).

La pregunta ahora es ¿cómo enfoco mi reportaje? A través de discusiones con compañeros practicantes en el equipo editorial, llegamos a la comprensión de que el punto de partida debería ser: ¿Cómo podemos abordar la historia como lo haría un cultivador de Dafa? ¿Cómo podemos presentar los hechos a nuestros lectores con la misma compasión que tenemos cuando aclaramos la verdad a los seres conscientes? De hecho, Shifu ya nos enseñó cómo hacerlo cuando explicó en La Primera Lección de Zhuan Falun cómo las prácticas de qigong son anteriores a la historia. Usando ejemplos de artefactos que datan de hace cientos de miles o millones de años, Shifu nos ayudó a comprender la existencia de civilizaciones prehistóricas y prácticas de qigong, -y cómo la teoría evolutiva de Darwin nos había confinado-, todo de una manera compasiva y tranquila.

No veo que haya alguna fórmula fija sobre cómo cubrir las noticias, porque cada noticia puede ser única y desafiante, pero tengo fe en Dafa. Shifu dice en Zhuan Falun:

“En cualquier nivel social se puede ser una buena persona, solo que en los diferentes estratos sociales existen diferentes conflictos. Los estratos altos tienen las formas de conflictos de los estratos altos, todas las cuales pueden ser tratadas de manera correcta” (Cuarta Lección, Zhuan Falun).

De la misma manera, para diferentes tipos de noticias, en mi opinión, hay formas apropiadas de cubrirlas.

En cuanto a los detalles de cómo manejarlas, podría ser elegir un ángulo de la noticia que otros medios de comunicación no hayan intentado, o podría ser pensar en las consecuencias de escribir un artículo antes de comenzar. Mientras sigo reflexionando sobre cómo manejar las noticias, recibí una pista de Shifu recientemente en un sueño.

En el sueño me vi bailando con bailarines de Shen Yun en el escenario. No entendía por qué, como reportero de noticias, querría bailar. Quiero decir que mi cuerpo está rígido, soy viejo y soy bajo. Pero luego me di cuenta de que hay un mensaje detrás del sueño. Es cómo Shifu combina los instrumentos musicales de las culturas oriental y occidental en perfecta armonía, cómo presenta historias tradicionales chinas de una manera que los occidentales puedan entender y cómo se utiliza la tecnología para complementar la danza clásica china que transmite la profundidad y amplitud de la cultura china genuina. El mensaje está en mi comprensión: aplicar la sabiduría, aplicar el juicio y aplicar el equilibrio desde la perspectiva del Fa.

Todavía estoy aprendiendo el arte de informar y creo que Shifu me guiará.

Gracias, Shifu. Gracias, mis compañeros practicantes.

(Presentado en el Fahui de Canadá 2024)