(Minghui.org) Me gustaría compartir algunos de mis pensamientos recientes sobre la cultivación de “Ren” (Tolerancia).
Tengo 81 años y comencé a practicar Falun Dafa en 1995. Sufrí muchas enfermedades antes de comenzar a cultivarme y no recuerdo ningún día bueno. A los dos meses de practicar Dafa, la sarna en mis pantorrillas y la enfermedad de la piel de serpiente (ictiosis) en mis piernas desaparecieron. También me recuperé de mis dolores de cabeza, dolores de estómago y taquicardia. Ya no me molestaba ninguna enfermedad. ¡Dafa me dio un cuerpo saludable!
Dafa también cambió mi carácter. Solía ser una mujer de voluntad muy fuerte que siempre tenía la última palabra en casa. Después de años de estudiar el Fa y cultivar mi xinxing, seguí las enseñanzas de Shifu y utilicé los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia para conducirme. Cuando me encontraba con problemas, trabajaba duro en el “Ren” y en mejorar mi xinxing.
Por ejemplo, una vez compré una prenda de ropa para mí. Cuando mi nuera la vio, me dijo: “Ya tienes mucha ropa para ponerte. ¿Por qué compras más?”. Mi primer pensamiento fue: “No me quejé de que no me compraras ropa. ¿Cómo puedes criticarme cuando me compro ropa?”. Pronto recordé que era una cultivadora y entendí que me estaba ayudando a mejorar mi xinxing. Inmediatamente sonreí y le dije: “¡Gracias!”. Me miró y no dijo nada durante un buen rato.
Lo que fue aún más increíble fue que una vez, cuando estaba hirviendo agua para beber, mi nuera me criticó: “¿Por qué bebes tanta agua?”. Cuando hablé durante una comida, mi hijo me gritó: “¡No hables mientras comes!”. Una vez, cuando estaba cocinando, mi hijo dijo: “¡Tu comida no es comestible!”. Mi hijo y mi nuera no estaban contentos con casi todo lo que hacía, incluso fregar el suelo, lavar los platos, hacer las compras, cortar las verduras, etc. Criticaban todo lo que hacía y a menudo me ponían las cosas difíciles. Yo era inútil a sus ojos.
Cada vez que me criticaban, me recordaba que era una cultivadora y recordaba el Fa de Shifu, que decía que hay que mirar hacia dentro cuando se encuentran problemas. Este pensamiento me ayudó a calmarme. Cuando pensé en estas cosas después, en realidad no eran nada. Si no hubiera practicado Dafa, habría sentido que habían ido demasiado lejos. Especialmente para alguien como yo, que tenía una personalidad fuerte, no habría forma de que lo dejara pasar fácilmente. Sin embargo, después de comenzar a cultivarme en Dafa, aprendí a mirar hacia dentro, y lo que parecía probable que fuera a crear problemas familiares desapareció. ¡Dafa es verdaderamente maravilloso! No solo me dio buena salud, sino que también me dio una nueva vida y una familia armoniosa.
Mientras trabajaba en la cultivación del “Ren”, comprendí que también era mi oportunidad de eliminar los sentimientos humanos hacia mi hijo. Solía preocuparme por él, temiendo que no comiera bien, que no durmiera bien o que se cansara demasiado. Como cultivadora, sabía que debía eliminar este apego. ¡Todo está dispuesto por Shifu y todo es bueno!
Una vez volví a casa de mi hijo mayor después de visitar a mi hijo menor. Cuando entré, mi hijo mayor me preguntó amablemente: “¿Has comido?”. Le dije que sí. Poco después, de repente se enfadó conmigo sin motivo y me criticó: “Vieja tonta, ¿por qué saliste con tan mal tiempo? ¡Si te pasa algo, no te cuidaré!”.
En ese momento recordé lo que dijo Shifu:
“Siendo nosotros personas que refinan gong, repentinamente se pueden producir conflictos” (Cuarta Lección, Zhuan Falun).
No dije nada y aun seguía de buen ánimo. Pensé que, desde el punto de vista de mi hijo, él tenía buenas intenciones para mí y le preocupaba que pudiera caerme en un mal momento. Si no estuviera cultivándome en Dafa, definitivamente me habría enfadado si mis hijos me faltaran el respeto. Como cultivadora, sabía que todos estos eran lazos de yeli. Por lo tanto, no sólo no debía quejarme, sino que también debía agradecerles por ayudarme a elevar mi xinxing. ¿En qué otro lugar podría obtener tan buenas oportunidades para cultivarme?
Con la guía compasiva de Shifu, sigo cultivándome. En el futuro, haré todo lo posible por hacer bien las tres cosas: salvar a más seres conscientes, cumplir mis votos históricos, completar mi cultivación y seguir a Shifu hasta mi verdadero hogar.