(Minghui.org) Recientemente leí algunos artículos en minghui.org relacionados con el apego a la envidia, que me ayudaron a mirarme en mi interior. Me gustaría compartir mis experiencias sobre este tema.
Un problema de largo tiempo
Cuando era estudiante, prefería vestir con un estilo único y me sentía incómoda cuando alguien se vestía como yo. Hace poco, Shifu me dio una pista para ayudarme a darme cuenta que mis pensamientos provenían de un apego.
Si una prenda que tenía no le quedaba bien a alguien, dejaba de ponérmela. Si una prenda que tenía le quedaba bien a alguien, tampoco me la pondría, pensando que quizá a mí no me quedaría tan bien. ¿No era la envidia la causa de este comportamiento?
Cuando empecé a practicar Falun Dafa hace muchos años, otros practicantes y yo leímos una vez la sección sobre el Corazón de envidia en Zhuan Falun, las enseñanzas principales de Falun Dafa. Al pensar que no tenía ninguna manifestación de envidia, me sentí muy bien. Pensándolo ahora, realmente estoy avergonzada de mí misma.
Shifu dijo:
“Cuando enseño el Fa, frecuentemente hablo sobre el problema del corazón de envidia. ¿Por qué? Porque el corazón de envidia se manifiesta extremadamente fuerte en China, es tan fuerte que ya se ha vuelto natural y uno por sí mismo ni siquiera lo percibe” (Séptima Lección, Zhuan Falun).
Pensándolo bien, yo era la clase de persona que Shifu mencionó en su lección, y no sabía que sentía envidia. Durante más de 20 años, leí las enseñanzas de Dafa todos los días e hice las tres cosas. Sin embargo, no entendía completamente cuando algunos practicantes hablaban de prestar atención a asegurarse de que cada pensamiento se alineara con Dafa en los artículos de experiencias que compartían en Minghui. Ahora comprendo que eso es necesario para ser un auténtico practicante.
Varias manifestaciones
Durante la pandemia, empecé a memorizar y recitar Zhuan Falun, y traté de rectificar cada uno de mis pensamientos. Descubrí que muchos de mis problemas estaban relacionados con la envidia. Un día, de camino al trabajo, vi a una mujer vestida con un abrigo negro de piel que hurgaba en un cubo de basura junto a la carretera mientras fumaba un cigarrillo. Me sentí desequilibrada y pensé: "¿Por qué rebusca en la basura si tiene tanto dinero?".
Una vez vi pasar a una mujer llamada Zhao, que conducía un auto blanco. Vivía en el campo y se divorció de su esposo porque no ganaba suficiente dinero. Su nuevo esposo trabajaba a menudo en otra ciudad y tampoco era muy adinerado. Pensé: "Tiene casi 50 años. ¿Por qué le gusta presumir tanto?".
Cuando conocí a una practicante llamada Lan, también estaba allí otra practicante llamada Ling. Como no había visto antes a Ling, Lan me preguntó: "¿Puedes decir su edad [de Ling] con solo mirarla?". Sentí un poco de envidia y respondí: "Lo siento, no podría saber". En mi mente pensaba: "Sí, parece mucho más joven. ¿Y qué?". Mirando hacia atrás, me doy cuenta que era envidia, y era sucio. Debería alegrarme cuando una practicante luce más joven que su edad, ya que es una forma de validar Dafa.
También hubo otras manifestaciones de mi envidia. Por ejemplo, cuando los practicantes compartían sus experiencias de cultivación, a menudo me impacientaba, pensando: "¿Por qué perder el tiempo en algo tan trivial?". En realidad, mi pensamiento mostraba mi escaso entendimiento.
De hecho, este problema comenzó hace muchos años. En los años ochenta, mi hermano pequeño fue admitido en la universidad y toda la familia se alegró. Pero yo pensaba: "No ha estudiado tanto como yo. ¿Cómo se lo merece?".
Después de casarme, me enfadaba cuando mi esposo hablaba y se reía con otras jóvenes. Incluso imaginaba que la situación se agravaba y me aferraba a esas ilusiones. A veces, tales pensamientos afectaban mi vida.
Cultivando Dafa y eliminando la envidia
Me di cuenta que todos estos pensamientos son causados por la envidia y están relacionados con malas nociones humanas así como con la cultura del Partido Comunista Chino (PCCh).
Shifu dijo:
“Por eso, tal persona compite y pelea durante toda su vida y su corazón sufre mucho daño; él siente mucha amargura, está muy agotado y dentro del corazón siempre está desequilibrado. No come ni duerme bien y está descorazonado, sin voluntad, y al llegar a la vejez ya ha hecho un gran embrollo en su cuerpo y le vienen toda clase de enfermedades” (Séptima Lección, Zhuan Falun).
Cuando leí este párrafo, sentí como si Shifu estuviera hablando de mí. Solo tenía 30 años, pero sufría todo tipo de enfermedades. Ahora sé que estaban relacionadas con mi apego a la envidia. Al hablar de la envidia con otra practicante, sentimos que era como una espada de doble filo que nos daña tanto a nosotros mismos como a los demás.
Estoy muy agradecida con Shifu por haberme salvado y limpiado. Cuando estaba memorizando las enseñanzas de Falun Dafa, Shifu eliminó las sustancias malas que había en mí. La envidia seguía apareciendo de vez en cuando, pero era capaz de detectarla y superarla. Ahora me doy cuenta que la envidia también está relacionada con otros apegos como la ostentación, la lujuria, la vanidad, menospreciarse, la competitividad y el resentimiento.
Mientras escribía este artículo, tuve un sueño en el que caminaba por una carretera cubierta de estiércol húmedo. Había tanto estiércol que mis pies estaban sumergidos en él, y luego subía y cubría mi cuerpo como un abrigo, y solo mis ojos eran visibles. Cuando caminaba más deprisa, el estiércol se hacía más espeso. Al final del camino, vi varias ramas de árboles con hojas verdes, y salí de una cueva.
Luego, caminaba por un camino ancho que estaba sumergida en agua profunda y clara. Me hundí en el agua y di vueltas para quitarme el estiércol negro. De alguna manera me había puesto ropa de verano. Avancé con el cuerpo sumergido, pero la cabeza por encima del agua. Me encontré con algunos de mis compañeros practicantes y conversé con ellos. Al cabo de un rato quise meterme en el agua para limpiarme el pelo.
Al despertar, me di cuenta que el estiércol negro era la envidia combinada con elementos de la cultura del Partido del PCCh. Ambos son sucios y densos. Después de que Dafa me ayudó a reconocer este apego, decidí deshacerme de esas cosas sucias y Shifu me ayudó a hacerlo. Sin embargo, estaba apegada a la comodidad y no quería limpiarme con mi propio esfuerzo. Permanecí en el agua y confié en el esfuerzo de Shifu para mantenerme limpia. Ver a mis compañeros en el sueño implicaba que podía aprender de otros practicantes y compartirlo con ellos para mejorar juntos.
Lo anterior es mi entendimiento. Por favor, háganme saber si algo es inconsistente con las enseñanzas de Falun Dafa.