(Minghui.org) Solo había leído Zhuan Falun una vez cuando comenzó la persecución en julio de 1999. Por miedo a ser perseguido, no continué practicando.
En junio de 2003, mientras caminaba por una calle, vi un pequeño cartel en la pared con palabras brillantes que decían "Falun Dafa es una práctica recta". Me quedé muy sorprendido, pues nunca había visto palabras que emitieran una luz intensa. Quité el cartel de la pared y me lo llevé a casa. Quería atesorarlo para siempre.
Pero luego pensé que lo había puesto otro practicante para que lo viera todo el mundo. No debería tenerlo en mi poder. Volví a colocarlo donde estaba y decidí poner más carteles yo mismo.
Encontré el ejemplar de Zhuan Falun que aún tenía en casa. Me sorprendió ver que los caracteres de la línea que estaba leyendo destacaban y emitían una luz brillante. Esto sucedió con cada línea que leí hasta que terminé de leer el libro unos días después.
Nunca había experimentado algo tan milagroso cuando era niño. Sucedió cuando estaba en un estado mental muy claro. Sé que es real y no un sueño. Me asombró el poder sobrenatural de Dafa. También supe que obtuve el Fa y que Shifu cuida de mí. Debería practicar genuinamente Dafa y seguir a Shifu de vuelta a mi verdadero hogar.
Me puse en contacto con una practicante que conocía. Me contó los hechos sobre el engaño de la autoinmolación de Tiananmen. Solo entonces me di cuenta de que había sido un montaje del régimen comunista para incitar al odio contra Dafa y justificar la persecución.
Quedé horrorizado y eso me hizo estar más decidido a defender a Dafa. Espero que la gente conozca los hechos y deje de creer las mentiras del régimen comunista. Mi corazón está lleno de gratitud a Shifu.
(Artículo seleccionado para la celebración del Día Mundial de Falun Dafa en Minghui.org)