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Lo que vemos no siempre es verdad

Dic. 9, 2024 |   Por una practicante de Dafa en China

(Minghui.org) Soy una practicante de Falun Dafa que comenzó a practicar la cultivación en 1997, pero mi verdadero camino de cultivación comenzó el año pasado. Aunque mi marido se opone a mi práctica, mi hija practica Dafa conmigo y siempre nos hemos animado mutuamente. Si una de nosotras comete un error, la otra se lo señala. En este sentido, mi hija se ha cultivado mejor que yo. Cuando mi hija señalaba mis apegos, yo tendía a responder a la defensiva como lo haría una madre común. Nuestro entorno familiar no ha cambiado mucho a lo largo de todos estos años.

Sin embargo, Shifu es compasivo y no se dio por vencido conmigo. Gracias a sus arreglos, finalmente encontramos un grupo de estudio del Fa este año. Después de un período de estudio en grupo, y con la ayuda de otros practicantes, accedí al sitio web Minghui y leí artículos seleccionados sobre experiencias de cultivación compartidas y artículos de conferencias del Fa. Finalmente me di cuenta de lo mal que me había cultivado durante estos años. Estoy decidida a eliminar mis apegos comunes, incluido el apego a la ostentación, la mentalidad competitiva, los celos, el miedo, el deseo de comodidad, las quejas y el no permitir que los demás me critiquen. Eliminaré un apego a la vez y me cultivaré diligentemente.

Recientemente me sucedió algo que me impactó profundamente. Era la primera vez que me encontraba con una manifestación milagrosa de Dafa en mi vida, lo cual era una pista de Shifu. Nunca antes había experimentado algo así porque mi estado de cultivación no era sólido.

Uno de mis apegos era que me gustaba mirar ropa bonita. Incluso si no la compraba, a menudo encontraba una razón para ir a mirarla, y este apego era bastante fuerte. Para ayudarme a eliminar este apego, Shifu me hizo presenciar una escena aterradora: abrí un paquete de ropa nueva que había comprado y descubrí que estaba cubierto de hormigas. Rocié la ropa con pesticida, la metí en una bolsa de plástico sellada y rocié más pesticida por mi casa.

Me tranquilicé y me di cuenta que nada es una coincidencia. Me senté a mirar dentro mío para encontrar mis apegos y envié pensamientos rectos: “Si esto es causado por seres de bajo nivel o sustancias malignas, debo eliminarlos por completo. Si Shifu me está guiando para eliminar este apego de querer mirar ropa hermosa, le diré: “Estoy equivocada y definitivamente me libraré de este apego”.

Un día después volví a abrir la bolsa y pensé en lavar la ropa, pero en la bolsa no había nada más que ropa, ni siquiera una hormiga muerta.

Me di cuenta que mi apego está compuesto de materia negra. ¿No es entonces cada uno de nuestros apegos una materia muy sucia y mala? ¿No es entonces como estar en un basurero, aferrándose a la basura? ¿No es todo lo que vemos ante nuestros ojos una apariencia falsa? Depende de cómo reaccione nuestra mente. A través del estudio del Fa, entendí que todo en este mundo es ilusorio, así que ¿por qué deberíamos aferrarnos a ello si es falso? Cuando soltamos todo, ¿no habremos completado la cultivación? Solo al soltar las nociones humanas podemos avanzar hacia lo divino.

Lo anterior son algunas de mis reflexiones personales. Si hay partes que no están en línea con el Fa, por favor, señálame amablemente.